SIRK, Douglas. Pacto tenebroso (1948)

Hay tres películas sobre la misma temática: Luz de gas, de George Cuckor; Atormentada, de Hittchock, y esta... 
La mejor, no lo sé. Esta es buena, muy buena, las otras dos tienen un algo muy especial.
Esta está muy bien narrada, con una Claudette Colbert muy interesante, que ya me encantó en una película de Negulesco: regresaron tres, y que aquí lo borda. Una mujer distinta, claramente de otra época, no tan exuberante como en la década posterior, más dedicada a los roles tradicionales de la época, pero con una vida interior, una sonrisa y una forma de vivir la vida, una alegría inmensa...
Bonita película. Recomendable.

THOMPSON, J. Lee. Justicia salvaje (1984)

No es muy buena, no !!!
Es más bien mala. De esas que le das algo de puntuación por darle algo. De lo peor que he visto últimamente, y, desde luego, la peor película de J. Lee Thompson, que me parece un director arregladito y con momento más que interesantes.

DE NIRO, Robert. El buen pastor (2006)

Pues qué quieren que les diga. Me parece un coñazo....

RAY, Nicholas. Infierno en las nubes (1951)

No es especialmente buena película...

CASTELLARI, Enzo G. El largo día del águila (1970)

Haces verdaderos esfuerzos por que te guste, pero ni aun así...

MANN, Anthony. El hombre de Laramie (1955)

Un buen Whester, sí señor. Típico, tópico, clásico, pero excelente. Siempre canónico, siempre previsible, muy entretenido, con paisajes espléndidos, buenos puros y malos taimados. Todo un clásico.

COSTA-GAVRAS, Constantin. La caja de música (1989)

Cine comprometido, cine de autor. Es la segunda vez que la veo, y la verdad, la primera me pareció mejor película. No es que ahora me parezca mala, es que la otra vez me gustó más. Era más impactante, y, además, había visto menos cine. 

Lo que me ocurre con este tipo de películas apoyadas tanto en una idea concreta (política, ideológica, como se quiera llamar) es que una vez conocida la trama todo lo demás le sobra. No tiene un ideal estético en sí mismo, no pretende hacerlo bonito como fin principal, y aunque se consigue menos barroquismo en su resultado y un mensaje más directo y nítido, como es el caso, que está muy logrado, se aleja del cine que me gusta más: aquel en el que te olvidas de la trama y te sumerges en el papel del protagonista.

Se echa de menos, en definitiva, ese puntito de cuidado en la interpretación, que propia, por ejemplo de Montgomery Cliff, y ese tipo de autores.

Con todo es una película decente, que puede verse con gusto y que deja un mensaje moral muy potente.