sábado, 30 de septiembre de 2023

§ 3.132. El enigma del yate (Carlos Aured, 1983)

Si sabes lo que  quieres ver no te decepciona. Pero si esperas algún producto medianamente sofisticado quizá debiera buscar en otro lado.
Muy de la época en relación con la pretensión onírica. Pero muy deficiente en su planteamiento estético. Seguramente, en su momento, era un planteamiento atrayente, pero los años han tratado fatal a este tipo de cintas, residuales en una organización cinéfila mínimamente organizada. Ni siquiera se puede ver, en esa frase tan mía.
La frigidez tiene un tratamiento radicalmente histérico en la cinta, rallando en la enfermedad mental.  Es horroroso el planteamiento de la sexualidad de los personajes. Burdo, innecesariamente barroco, superficial, tirando a lesbiano, y sumamente básico.

viernes, 29 de septiembre de 2023

§ 3.131. El último Kamikaze (Paul Naschy, 1984)

 

Pues no creo que pretendiera ser un remake de El Samurai (El silencio de un hombre), de Melville. No tiene esa idea, pero desde luego le influyó en su construcción. No es la primera vez que aprecio que Naschy lo que hace es traer, a su manera, elementos de otras películas. Seguro que veía mucho cine y era un gran aficionado.
Y, de una manera u otra, también tiene elementos de El Crack 2, incluso actores que participaron en las dos cintas, la del 1981 y la de 1983.
Creo que las cintas de este género, el 'fantaterror', hay que verlas con ligereza. Sin pretensiones. De manera liviana. 
En esta, además, como si de una película de 007 se tratase nos hace un recorrido por varios países que, la verdad, no aportan nada a la trama, más allá de emular esas cintas de un género super singular. 
Me ha gustado mucho el estilo  y la belleza clásica de Irán Eory, una actriz de esas que parece que no tiene carrera pero filmaron más de 60 cintas. Bellezón de siempre, de los que me gustan. Con estilo, con ese pelo que siempre me recuerda al de mi mujer.
Además de Naschy y la citada Irán intervienen: José Bódalo, que la verdad, supongo que lo hace por necesidades alimenticias, y Manuel Tejada. Actores de siempre en el escena de aquellos años.

jueves, 28 de septiembre de 2023

§ 3.130. Malas tierras (Terrence Malick, 1973)

 

Le tenía a Malick como un director cosmopolita, menos apegado al terruño sureño. Porque esta película parece un relato sureño de Tennessee William o de William Faulkner. Emociones primarias, sentimientos básicos. Luces y sombras de la vida, poesía coral y en movimiento. Imágenes que no conducen a ningún sitio.
Vaqueros ingenuos, pelirrojas pícaras pero inexpertas. El primer amor de Turgeniev en versión postmoderna. Algo irracional y salvaje, irreflexivo pero contundente. 
Un poema visual atrayente y sugestivo. Sin demasiado interés en observar una dinámica ortodoxa pero tampoco abiertamente rupturista. 
Es el debut cinematográfico de Malick. La pareja Martin Sheen y Sissy Spacek no me parece que tengan mucha química. A lo mejor eso era precisamente lo que quería el director. Porque aunque en la película se llevan 10 años -es lo que dicen en un momento inicial de la cinta- ella parece mucho más niña, y el mayor. La carrera de él si la he seguido bastante, y me gusta. Siempre con un aire de autenticidad, hombría bien entendidas y compromiso moral. La de ella nunca me ha gustado. Ella no me gusta. A pesar de ser pelirroja. Siempre me han gustado las pelirrojas. Mi mujer lo es.
Se acompañan en el primer tercio de Warren Oates, que no tiene mucho metraje.
Una especie de Road Movie extraña, distinta, poética y con un todo lírico por medida de su propia validez. Una Road Movie de interior, si eso es posible. 
Me ha gustado. Bastante más que cualquier otra del director.

miércoles, 27 de septiembre de 2023

§ 3.129. Apollo 18 (Gonzalo López-Gallego, 2011)

 

Perteneciente a la categoría de "metraje encontrado", o incluso a la de "falso documental", aborda una teoría fructífera para los conspiranoicos de todo tiempo y lugar: que el viaje a al luna no fue tan claro y limpio como se ha mostrado siempre. En este caso la hipótesis no es que nunca se fue, y que, por tanto, todo fue un montaje. Aquí se discurre por otro camino. Más aterrador y bizarro. Sin mucho gore, pero con sus buenas dosis de sustos y efectos visuales y sonoros, entretiene y aumenta de interés a medida que el metraje avanza. 
Previsible y no especialmente brillante, se deja ver. Sin más.

martes, 26 de septiembre de 2023

§ 3.128. Nieve que quema (Karel Reisz, 1978)

Segunda que veo de Reisz. La primera me gustó mucho: Sábado noche, domingo mañana (1960). Esta, parece, al menos en principio, de temática totalmente distinta. Sobre el tráfico de drogas tras la guerra de Vietnam he visto varias cintas. Ésta debe ser una de las primeras, más que nada por la fecha.
Un reparto encabezado por Nick Nolte, tan joven como puedeas imaginar, al que le acompaña Tuesday Weld , Michael Moriarty y Anthony Zerbe.
Tardas en saber cuál es la problemática del asunto. El drama moral, la angustia existencial, los remordimientos de conciencia, la deriva psicológica de los personajes sometidos al tremendo estrés de la guerra es la fuente de la que mana la trama de la obra. La relación entre ellos no es sencilla, se basa en circunstancias no contadas expresamente en la cinta y no suelen tener un propósito conjunto de vida o de obra. No es que sean realmente dos historias cruzadas, ni nada parecido, pero funcionan como dos asuntos diferentes.
Tiene algo de road movie, algo de película de redención, de superación de adicciones a las drogas, de enamoramiento indebido, de frustraciones de la clase media, de redención de uno mismo en el pecado, en el lugar más infame posible.
Es interesante, pero menos que la citada, se deja ver y mantiene el interés a lo largo del metraje. No decae y funciona. Supongo que también en taquilla, porque era la época de las películas del Vietnam y cada Director, célebre o no, tenía su propia visión sobre el asunto, cada unos desde una perspectiva diferente.  Además Nolte acababa de abordar el  estrellato, por lo que verle era un incentivo.

lunes, 25 de septiembre de 2023

§ 3.127. El clan de los irlandeses (Phil Joanou, 1990)

 

He oído y leído que es una buena película. Típica y tópica de los años 80, "gansteril" y faltona, provocadora y fuerte. En la estela de las de mafiosos pero con más músculo y menos intensidad dramática. Más testiculina y menos cabeza. Actores de moda, un buen guión, desarrollo rápido y voraz. 
Estética muy desarrollada, personajes excesivamente jóvenes, por momentos prácticamente infantiles, que no aparentan más de veinte o veintidos años. 
Si por cada película que narra los problemas de la "Cocina del infierno" y sus vericuetos fuese real sería el barrio más famoso de todo Nueva York.
Del director he visto dos cosas más, una de ellas interesante, la otra no tanto. No ha sido muy prolífico, pero si parece un realizador solvente, de los que conoce el oficio. Grabó mucho videoclip en los ochenta de U2 y de Bon Jovi. Y ese pulso, esa viveza se nota. Sucesión de escenas rápidas y brillantes, puestas en escena con ángulos cerrados y caras estridentes.
Un reparto muy de moda: Sean Penn muy joven, todavía sincopado y poco calmado; Ed Harris sobrio y formal, profesional y algo alejado de los problemas emocionales de los asuntos mafiosos; Gary Oldman en un gran papel de mafioso histérico, totalmente descontrolado y fuera de lugar; una guapísima Robin Wright que le da un tono intimista aunque algo limitado; John Turturro dando clases de actuación y John C. Reilly como complemento indirecto.

domingo, 24 de septiembre de 2023

§ 3.126. Ruedas de fuego (Tay Garnett, 1950)

 

Película de formación del espíritu patriótico. El sueño americano y las realidades de la vida. De los niños sin casas y su frustraciones personales y, sobre todo, las vitales. En la línea de las películas de niños con problemas, dramatiza la vida de uno de esos niños de hospicio que sólo encuentran salida a su propia vida a través de una oportunidad que esta te concede. Y no concede muchas.
Es interesante, entretenida y tiene más lecturas que las que en principio pudiera parecer. 
La versatilidad de Mickey Rooney se complementa bien con la entereza de Pat O'Brien, un actor más que interesante. También interviene Marilyn Monroe. El director es Tay Garnett, para mi el director de El cartero siempre llama dos veces, una verdadera joya del cine negro.

§ 3.125. El carnaval de las bestias (Paul Naschy, 1980)

 

Un delirio, oiga. Una especie de Manga japonés pasado por el fantaterror español con toques de erotismo "made in spain" que nada aportan más que una visión particular de la censura y todos sus mecanismos de evasión del control.
La cinta es deficiente, se mira con la perspectiva que se mire, incluso la muy bondadosa. Es plana, rallando en el absurdo por momentos, sobre todo cuando intervienen los japoneses, porque, la verdad, es todo tan absurdo...!!!
Infame es poco.

sábado, 23 de septiembre de 2023

§ 3.124. Un domingo maravilloso (Akira Kurosawa, 1947)

 

Un cierto intimismo que comienza desesperado para ir transitando hacia la luminosidad que sólo son capaces de patrocinar personas vitalistas y felices. Los problemas de siempre, desde una perspectiva japonesa. La vivienda, las dificultades del trabajo, los sueños de los enamorados. Una reflexión sobre la pobreza, sobre el amor, y sobre las personas.
No es lo más brillante de Kurosawa, ni mucho menos. Sin embargo, como también me suele pasar con Bergman, los planteamientos estéticos son atrayentes, limpios, con imágenes icónicas, planos virtuosos y una preparación de las escenas que a veces parecen cuadros. 
Es pura poesía.
Pertenece a este género denominado Shomin-geki, que se podría relacionar con el realismo italiano al centrarse en las cuestiones cotidianas de la gente corriente. Integradas en la maquinaria del sistema pero en su estatus más bajo. Ni son pobres de solemnidad, ni marginales, pero no consiguen escapar de sí mismos ni del engranaje en el que están atrapados.
La última de Kurosawa que me quedaba por ver. La tenía comparada hace años y guardada en el estante de las que hay que ver. Que cada vez tiene menos cintas, porque tengo el propósito de escoger al menos dos de ese estante por cada nueva que compro. Tendré una doscientas compradas y apiladas en ese estante.
También llueve. No recuerdo ninguna película de Kurosawa en que no llueva.

§ 3.123. Defensa (John Boorman, 1972)

 

Tenía muchas ganas de verla. Una especie de epopeya moderna que termina en tragedia, o casi, por el enfrentamiento entre dos formas de ver el mundo y de relacionarse con la naturaleza y con los semejantes. Grandísimos Jon Voight y Burt Reynolds, que debían ser verdaderas estrellas para la pantalla, acompañados de Ned Beatty y de Ronny Cox. Naturaleza, formas de relacionarse con ella y la opresión de los lugareños. Hay algo de irracional en la forma de relacionarse los lugareños con los protagonistas, sobre todo porque carece de explicación alguna su comportamiento.
Director más que solvente del que sólo he visto cuatro cintas pero todas estupendas, especialmente Infierno en el pacífico (1969) y A quemarropa (1967). El sastre de Panamá también (2001) es interesante, pero no tanto como las dos citadas.
Entiendo que Reynolds fuera una estrella. Lo tiene todo para serlo. El Tom Cruise de la época. Musculoso, muy varonil, aguerrido, con un punto salvaje y probablemente un imán para las mujeres, tanto en taquilla como en su cama. Tiene acreditadas más de cien películas, lo cual es una barbaridad, incluso para un hombre de cine clásico. Siempre me ha gustado, me parece un actor muy 'característico'. Le ves y tienes la sensación de estar pasando un ato divertido. 
Jon Voight es otra cosa, más trascendente, menos lúdica, más formal, de etiqueta, no de sport. Le veo capaz de mayores cotas artísticas.

jueves, 21 de septiembre de 2023

§ 3.122. Domino (Brian De Palma, 2019) 

 

La última película de De Palma. Un despido no acorde a su genio y a su altura cinematográfica. Una cinta incluso vulgar por momentos, plana y poco edificante. Con actores (para mi) desconocidos y con una guión previsible y poco acorde a las historias que ha filmado a lo largo de su vida. Un grande que se despide como puede o como sabe, quizá como le dejan porque no encontraba financiación para otros proyectos, o sencillamente que se dejó de tener confianza en sus iniciativas. No lo sé.
No me extrañaría que el guion fuese de alguno de esos nuevo escritores de novela negra escandinavos que tanto abundan y que tan buenos resultados suelen dar, tanto de público como de crítica. Lo firma un tal Petter Skavlan, que firma el guión de otras cuatro películas, ninguna vista o conocida por mi.
Actores para mi desconocidos.
Plantea un tema muy escabroso. Cómo se integran los extranjeros en los países desarrollados. Y cómo se aprovechan de la bondad de los sistema protectores para desarrollar actividades delictivas. Lo que ocurre es que el guión es muy plano, muy básico. Malos muy malos, contra buenos inmaculados. Un poco aburrido. Un cierto pastiche, que no me ha parecido nada noticiable. Plana, aburrida, sencilla, sin ninguna complejidad y para mentes muy cerradas. No es una cinta digna de De Palma, que tiene cosas absolutamente geniales.

miércoles, 20 de septiembre de 2023

§ 3.121. La gata negra (Edward Dmytryk, 1962)

 

Es lo que denomino una película de gran formato. Pretenciosa, ampulosa, mayestática, grande, con música de cámara, actores característicos, una historia potentísima, un blanco y negro lindo y una trama dura y seca, difícil para la época, todavía actual.
En definitiva, con todos los triunfos en la mano para ser un gran éxito. Y, sin embargo, supongo -no sé por qué- que no tuvo gran éxito de público. Seguramente la crítica pensó otra cosa. E intuyo que con el paso de los años ha ido ganando adeptos y seguidores.
Con la pléyade de actores es difícil que la cinta no funcione. Nada menos que Laurence Harvey, tan sólido como siempre, aunque algo hierático; Capucine, una actriz rara y hermosa, pero que está sobrepasada en el papel; Jane Fonda verdaderamente guapa, lozana y hermosa, Anne Baxter en un papel raro y desacostumbrado en ella, y Barbara Stanwyck, en un rol de gran dama pérfida y sofisticada hecho para el tipo de mujer que era. Un reparto sensacional, rodeado de extras estupendos.
El drama existencial que expone suele dramatizarse de manera menos virulenta en la realidad que en esta película. No es una elección consciente y real con toda la información encima de la mesa. El acceso a la prostitución siempre es obligada, o casi siempre. Y las explicación que suministra el director para hacernos una idea de qué ha pasado y por qué ha llegado a ejercer la prostitución. 
El encuadre de la trama en el Sur en el período de la gran depresión tiene su explicación, probablemente en el propia novela de la que parte la cinta, pero no aporta nada singular a la trama.
La fragilidad del personaje principal está excesivamente amanerado. No tiene mucho sentido en la lógica interna de la trama y hace que el soporte que patrocina no sea suficiente para sustentar la viga maestra de todo en conjunto arquitectónico. 
Interesante los títulos de crédito, de Saul Bass, nada menos, que muestran desde el principio cuál es el sentido de la cinta y cuál su propósito.
Me ha gustado bastante, aunque sus pretensiones de obra maestra no se consolidan, especialmente por la dificultad de apreciar lo que está oculto: el lesbianismo de la protagonista y la Madamme del burdel.

martes, 19 de septiembre de 2023

§ 3.120. Sábado noche, Domingo mañana (Karel Reisz, 1960)

 

Debut cinematográfico de un director interesante, con una vida realmente de 'película'. Judío salvado de los campos de la muerte por Sir Nicholas Winton, siendo unos de los 669 niños que rescató de la muerte. Sus padres murieron en Auschwitz, emigró a Inglaterra. Director intelectual, amigo de Tony Richarson. Creador de revistas de cine, y gran referente del cine independiente británico, denominado "Free Cinema". 
La cinta pretende ser una exposición de una realidad muy vivida por la clase proletaria de Inglaterra de los años sesenta.
Una especie de exposición de la realidad de un nihilista, tan de moda todavía actualmente. Trabajar de lunes a viernes y viviendo el fin de semana borracho perdido, con enredos de faldas con todas aquellas que se dejan embolicar con su piquito de oro.
No me gustan las películas 'realistas'. En especial las francesas, que no las soporto, ni las italianas. Pero este realismo inglés tiene algo distinto. No sólo la exposición de las realidades, que es parecida a cualquier otra, sino el tratamiento tan teatral, tan nítidamente inglés. Es lo que le da empaque y frescura.
Una especie de fresco realista al estilo de las italianas tan reconocidas. Me recuerda, y mucho, a "La soledad del corredor de fondo". Muy interesante también es la presentación en sociedad de esa gran actor que es Albert Finney, realmente un grande del cine británico.

lunes, 18 de septiembre de 2023

§ 3.119. El fantasma del paraíso (Brian De Palma, 1974)

 

Cine ensayo, experimental, de culto. Colores, formas, modas, música técnica y arrogante. No me gustan las películas musicales. Las encuentro poco entretenidas, que rompen demasiado la dinámica de la acción principal. Raramente encuentro continuidad entre el desarrollo de la trama y esta cinta no es una excepción. Seguro que tiene muchísimo seguidores, incluso fanáticos de ella. Pero no es mi tipo de cine. Es original, tiene gancho, pegada y es sugestiva, pero no es mi cine. 
Indudablemente es entretenida, muy distinta a todo lo usual y fresca. Esa es, probablemente, su gran virtud, la inocencia de su planteamiento, la sencillez de su música y la versatilidad de su lectura. La puedes ver como una película musical, como un thriller, o incluso como una película de terror, porque, en realidad, es un poco de las tres cosas. 
No pierdes con ella el interés en ningún momento. 

domingo, 17 de septiembre de 2023

§ 3.118. Delito de pasión (Gerd Oswald, 1947)

Interesante propuesta, que mezcla el clásico problema de cine negro, un crimen, con el papel corrosivo de la prensa. Guapa y fina Barbara Stanwyck, como siempre, pero algo menos espectacular que en otras ocasiones. Sterling Hayden tan varonil como siempre, y Raymond Burr como policía acompañan a la estrella del momento. 
La pareja no funciona del todo. Por lo menos en esta cinta. Quizá ella estaba ya algo mayor, pero él está como cansado, aburrido, quizá el papel que jugaba era precisamente ese, pero, la verdad se hace raro verlos juntos. 
Intenta ensayar un mensaje feminista. La vida de una mujer independiente, aunque algo entrada en años que se enamora de un policía que tampoco ha tenido especial suerte con las parejas a lo largo de si vida. 
Pero la cinta va derivando hacia una película de cine negro clásico, ortodoxa: ambiciones desmedidas, sueños irreflexivos, imposibilidad de asumir el papel que cada uno ha sido capaz de labrarse. Una falsa perspectiva de la valía de cada uno. Y, sobre todo, la necesidad de crecer, de avanzar, de que la vida es algo más que lo que se ha vivido. En el fondo retrata los problemas de una mujer fuera de lugar, incapaz de adaptarse a las situaciones que vive, porque experimenta una desazón por dentro difícil de manejar consigo misma. A veces es mejor renunciar a las aspiraciones que continuar aferrado a ellas. En todo caso el desequilibrio que experimenta es casi patológico. No sabemos nada del pasado de la protagonista, pero sí intuimos que arrastraba una maleta cargada de lluvia.
Primera película que veo del director. Los primeros minutos parecen mutilados, parece como si pasaran demasiadas cosas en poquísimo tiempo. 

§ 3.117. El aullido del diablo (Paul Naschy, 1987)

 

Una más de la factoría Naschy, con sus cosas. Algunas buenas y otra no tanto. Verle haciendo de Rasputín supera todo umbral de credibilidad. Destape, miedo y toda falta de escrúpulos al rodar hacen de este singular producto patrio una cinta atrayente.
Todo parece conducirnos hacia los crímenes de un 'aparecido', pero la realidad es algo más compleja.
Hay un punto de desquicie del guión, que, se mire como se mire, está fuera de lugar. Fulanas, destape, miedo y resentimiento. Un cockel muy difícil de manejar. Intenta salir de él de manera airada, pero naufraga irremisiblemente, porque, probablemente, no pretende otra cosa que entretener. Lo que ocurre es que una vez vista una de Naschy, vista todas. Con todo respecto y con todo el cariño, porque es un género más que interesante que construyó el director junto con unos pocos.

§ 3.116. El manantial (King Vidor, 1949)

 Muchas veces vista, una de las películas de mi vida.

Extraordinaria, desde cualquier perspectiva que se analice. Me encanta. 

jueves, 14 de septiembre de 2023

§ 3.115. El otro amor (André De Toth, 1947)

 

Melodrama clásico de un director luego experimentado rodador de Western. Novela de Eric María Remarque, que desconocía que tuviera un relato de este tipo, casi melodramático.
Clásico triángulo amoroso en el que el vértice es la mujer. Bien tratado, bien narrado, un melodrama ortodoxo lleno de emocionalidad y energía.
Ver a Bárbara Stanwych es toda una delicia, una mujer guapa de verdad, con esa belleza clásica pero atrevida, grande ante las cámaras como ninguna otra, con una sonrisa de fuego, angelical pero peligrosa. Está soberbia, frágil y vulnerable pero de un encanto arrollador.
David Niven tiene esa galanura de hombre maduro con un pasado lleno de vida, de experiencias. Incluso joven parecía un hombre pasado de años, con experiencias vitales y siempre con un pasado dolorosa en las relaciones amorosas. Le tengo por el galán al que la chica deja plantado por otra mejor opción, como sucede en esta película.
Richard Conte en su papel de siempre, viviendo al límite, en el filo de la vida, Don Juan arrebatador, racial y con una fisicidad muy peculiar, no es musculoso, ni siquiera estaba fuerte o era grande. Ni siquiera era alto, pero tenía una magia especial con la cámara.

§ 3.114. Hola, Mamá (Brian De Palma, 1970)

 

Casi un ensayo, más que una película, sobre los desvaríos de un espirante a director que ha visto demasiadas veces la Ventana indiscreta, del maestro británico. Rodado de una manera muy libre, pero muy fresca, atrevida y como convención. 
Algún que otro guiño a la intelectualidad más progre que, la verdad, da gusto verlos al día de hoy, donde la corrección política es una buena parte del éxito social y, sobre todo, de la aceptación grupal. Desde este punto de vista elabora un discurso radical, distinto y fresco. La trama es algo caótica, pero no creo su propósito elaborar una cinta canónica.
Le queda una especie de comedia urbana, con giros y con risas de lo más interesante, en una búsqueda -el aquellos años- de una personalidad propia que pueda contar cosas.
Película que vista la evolución del director puede considerarse como una película de formación.

miércoles, 13 de septiembre de 2023

§ 3.113. Una mujer bajo la influencia (John Cassavettes, 1974)

 

Probablemente la gran película de Casavettes como director. Faces (1968) no me gusto demasiado. La encontré algo insustancial, real y apegada a un tipo de sociedad y comportamientos, muy realista en este sentido, pero no acorde a mis gustos. Por momentos es un ensayo, más que una película. No es, ni lo pretende, un documental, ni mucho menos, pero el estudio de los personajes desde un punto de vista sicológico, y desde el punto de vista de las relaciones humanas. Interesante.
Los problemas (emocionales, y también etílicos) de las mujeres de los años setenta no parece un buen escenario para desarrollar las dotes artísticas de la pareja formada por Gena Rowlands y Peter Falk.
Actores magníficos, sobre todo ella, que están absolutamente estupendos, llenos de vitalidad y fortaleza.
Rowlands es delicada y fuerte. Le imprime al personaje una inestabilidad que por momentos asusta. Era una mujer de belleza clásica, rubia, entrada en cuerpo, pero con grandes dotes para el cine, e imagino que también para el teatro. 
Falk es un actor más rudo, totalmente opacado por su papel de inspector de policía astuto y pequeño que todo lo resuelve desde la perspicacia y la tranquilidad.
Los movimientos de cámara, la rápida sucesión de imágenes en los momentos de crisis nerviosa o de excitación se acompañan con planos más relajados y tranquilos que suavizan la dinámica destructiva en la que se encuentra.
Aunque es una película larga, 140 minutos no se hace pesada. Ni mucho menos. 

martes, 12 de septiembre de 2023

§ 3.112. Todo el dinero del mundo (Ridley Scott, 2017)

 

No sé por qué, pero creo que no me va a gustar la película. Los prejuicios es lo que tienen. Sin fundamento te formas una impresión sobre algo, una obra de arte, una persona, etc. 
Quizá sea la temática, quizá la fama de autor complejo, pero la verdad es que era un perjuicio injustificado. No es de las mejores de él, pero no sólo se deja ver, sino que tiene ritmo, estilo y personalidad. Como las últimas cintas del director me parece que le sobra metraje.
Está montada a través de diferentes flashback que funcionan relativamente, no te aclaras del todo y por momentos confunde. Sí está muy bien organizada la fotografía, con diferente color y diferente textura para cada época. Es un prodigio la organización del atrezzo para cada momento histórico. 
Supongo que el hecho de contar una historia real patrocina gran cantidad de material, bibliográfico, fotográfico, documental del juicio, etc., facilita mucho la organización del material para documentar la cinta.
Gran actuación de Christopher Plummer. Se acompaña de una actriz que no me suena nada, aunque seguro que he visto cosas suyas, Michelle Williams, que lo hace fenomenal (entre ellas  Brokeback Mountain); el siempre solvente Mark Wahlberg, y de Timothy Hutton.

lunes, 11 de septiembre de 2023

§ 3.111. Intocable (Olivier Nakache y Eric Toledano, 2011)

 

Inteligente película francesa célebre y muy vista en su momento. Tan real como la vida misma, como la necesidad de trabajar para vivir, y la inoportunidad de los acontecimientos desagradables y desafortunados que surgen y que pueden truncar una vida... o hacerla más rica. No se trata de perspectiva, ni de circunstancias, sino de voluntad, carácter, coraje y determinación. Todo el mundo tiene, siempre, una segunda oportunidad. Incluso cuando aciertas o tiene un éxito hay que volver a empezar, tienes otra oportunidad, de hacerlo bien, mejor que antes.
La sucesión de gag a veces se hace excesivamente aburrido. Pero le sirven al director para mostrar todos los tópicos posibles de la contradicción existente entre un hombre rico, profesional, altamente reconocido y el hombre que le cuida, suburbial, muy poco cultivado, de extraradio, de color y tremendamente vitalista.
Es interesante, por momentos da gusto verla, y es de las que se recuerda. Me ha gustado, puede apreciarse, aunque quizá no sea una de esas películas que se vean varias veces.
Los actores está excelsos: François Cluzet, como el rico impedido, y  Omar Sy como el chico que le cuida y le atiende.

domingo, 10 de septiembre de 2023

§ 3.110. Contratiempo (Nicolás Roeg, 1980)

 

Una historia contada de forma diferente, en la que te cuesta entrar en ella.Sabes de qué va y te cuenta la historia de manera retrospectiva, con flases hacia atrás y realidad en el tiempo presente. Por momentos es confusa y algo complicada, pero es entretenida.
El reparto es peculiar. Un cantante de moda: Art Garfunkel, una chica guapa (luego pareja del director): Theresa Russell, y un Harvey Keitel tan enigmático como siempre, rudo y seco, pero perspicaz, inteligente y muy profesional.
Art es muy plano, le falta potencia y gallardía para llevar el personaje adelante, no parece sentir emociones, ni impone matices. Es residual, algo simple y muy previsible. Theresa es otra cosa, desde el primer momento sabes que estás en presencia de una actriz decente, sobra pero con energía, capaz de conseguir lo que pretende haciendo un papel difícil, de alcohólica y alocada mujer al que le brota algún tipo de enfermedad mental. Keitel es todo maestría, pero mi juicio está viciado porque es uno de mis actores favoritos. 
La lentitud en algunos momentos lastra su frescura y la técnica de los continuos retrocesos hacia atrás no me parecen que estén del todo bien resueltos. Sobre todo porque son demasiado constantes y tan a menudo que la historia carece de corporeidad en el tiempo real.
Genera más expectativas de las que finalmente satisface.

§ 3.109. La venganza de la momia (Carlos Aured, 1975)

 

Bueno, un subproducto del fantaterror, sin nada destacable, pero que acabas viendo porque se te hace divertida y amena. En este género, que es mucho menos prestigioso que visto, sobresale Paul Naschy, un cineasta total, director, actor, guionista, lo que haga falta, productor, dialogista, y todos los oficios del cine... Seguramente estaba desaprovechado, mucho más brillante como productor o ideólogo que como actor, algo plano y "brutote"
En realidad es una cinta más del género, o del subgénero de egiptomanía, que se parece mucho a otras tantas. Interesante, con momentos estelares, pero una más dentro del maremagnun de cintas similares.
Aured siempre está en el mismo plano, sencillo, pero eficaz, intentandono aburrir pero a veces excesivamente plano. 

sábado, 9 de septiembre de 2023

§ 3.108. El despertar (Mike Newell, 1980)

 

Insustancial, y atrayente a la vez, película de aventuras en Egipto. Con el reclamo de un gran Charlton Heston, ya mayor pero todavía en forma, y una Susannah York como actriz de moda, del momento.
Muy buen color, a cargo del gran Jack Cardiff favorece la visionado, por momentos realmente brillante. Parece una cinta menor en la filmografía del Director, pero es entretenida y resultona. Bien para pasar el rato, sin pretensiones.
Se regodea en todas los tópicos del género, pero funciona como cinta de entretenimiento. Maldiciones, apariciones, venganzas milenarias, riquezas, desiertos, ambiciones... Todo cuadra más o menos con suavidad y naturalidad. No es que sea una cinta estupenda, pero se puede ver. Siempre tienes el atractivo de la trama, de la sorpresa y del desenlace. 
El guión se organiza desde una novela de Bram Stoker, famoso por Drácula, naturalmente. 

jueves, 7 de septiembre de 2023

§ 3.107. La barrera invisible (Elia Kazan, 1947)

 

Una de las primeras de Kazan. Como siempre con este director abordando un tema controvertido, polémico y poco fácil de manejar. El antisemitismo en EE.UU. Estamos en 1947 y el tema era duro y áspero. 
Una organización muy teatral, con planos largos muy escenificados, la cámara en un sitio neutro, sin intromisiones, flashes o grandes angulares. Simplemente pone la cámara y las escenas se desarrollan dentro del encuadre. Ningún alarde en este sentido.
Su maestría se aprecia en otros aspectos técnicos, la organización de los planos, la puesta en escena, las entradas y salidas de cámara de los personajes, la iluminación, con blancos y negros puros y con pocas sombras. Y, sobre todo, con un guión depurado y unos diálogos más que redactados. Sencillos pero directos al grano.
Me ha gustado mucho, me parece valiente, actual y, sobre todo, conmovedora, especialmente en los momentos en que el protagonista se relaciona por primera vez con una persona que no conoce. Las caras y los gestos son expresivos y muy sintomáticos, entre sorpresa y espanto. Muy realista.

§ 3.106. Escala en Tokio (Jack Arnold, 1958)

 

Comedia ligera sin pretensiones, colorida, dinámica, con reminiscencias en esos clásicos del aire de Howard Hawks que enamoraron a cualquier buen aficionado al cine.
Discurre con suavidad, todo encaja y da gusto ver este tipo de cintas, verdaderamente encantadoras. Tiene esa aire de comedia ligera de situación y de historia de amor. Triángulo amoroso resuelto desde el primer tercio de la película, que no deja lugar a dudas de qué estás viendo.
El atractivo de Lana Turner es, sencillamente, incuestionable. Qué belleza clásica, que cara limpia y morbosa a la vez, puede ser una monja o una prostituta, o las dos en la misma cinta. En esta época estaba en su apogeo, aunque algo más madura, lo que le daba todavía más morbo. Es una de las mujeres más morbosas del mundo del cine.
Jeff Chandler es otro monstruo del cine, un actor muy característico, que se hinchó a trabajar en todo tipo de cintas y que tuvo un final muy trágico, una gran pérdida.
Arnold tiene grandes cosas, verdaderamente interesantes, un director con dos o tres Western magníficos, y con auténticas epopeyas en el cine de ciencia ficción y del espacio.

miércoles, 6 de septiembre de 2023

§ 3.105. Luz de domingo (José Luis Garci, 2007)

Una de las últimas del Maestro, después de Tiovivo, que a él le gusta mucho. Ruralidad, tradición, y la historia de amor de (casi) siempre, que va subiendo de tono hasta convertirse prácticamente en un Western de violencia y venganza.
A la 'troupe' habitual del director se le une la dupla Paula Echevarría y Álex González, con resultados algo dispares. me parece que desentonan, no enganchan en la historia y se nota bastante su bisoñez y su falta de tablas. No son buenos actores. Él siempre envarado, ella, sinceramente, no creo que vuelva a la gran pantalla muchas más veces más. Actriz de televisión, más que de cine, pero con muchas clacas. Al lado de Landa, Larrañaga, o Mánver parecen escolares. Inclusos sus voces no están bien trabajadas, no son empacosas, no transmiten, no proyectan. Son vulgares, sin vocalizaciones ciertas y correctas. Voz de chicle, que sirve para cualquier emoción, para cualquier situación y para cualquier película. La misma sonrisa, la misma energía, ningún matiz, ninguna preparación. Allí se ponen y hacen igual un drama que una comedia. Supongo que les elegiría porque estaban de moda, o porque daban bien en pantalla, pero vista quince años después parece claro que es el punto más frágil de la cinta.
El guión es bueno, y la narración es correcta, pero el resultado no es el esperado. Al menos el esperado por mi, que tengo en grandísima estima a Garci.
No es que me haya parecido mala, pero no es de las mejores del director.

martes, 5 de septiembre de 2023

§ 3.104. La banda de los Grissom (Robert Aldrich, 1971)

 

Una película que catalogaría de "ligera", de temática intensa pero con un tratamiento deliberadamente poco trascendente. No es en realidad una comedia, pero tiene momentos cómicos. Tampoco es una cinta de risa, ni de situaciones que favorezcan la comicidad de la acción. De hecho por momentos es violenta, incluso muy violenta, con escenas explícitas de maldad y sangre. 
Se desenvuelve bien, con suavidad, pero el guión no para más, aunque tiene varios personajes y se enreda con la misma facilidad que se desenreda. La chica (Kim Darby, la de Valor de Ley, la original de Hathaway de 1969) lo borda, pero no llegó a convertirse en una actriz del sistema, en una estrella. Sí consiguió seguir trabajando, que quizá no sea poco en el mundo del cine. Sin embargo el personaje que interpreta Scott Wilson no lo veo bien encajado en su papel, un rol difícil y complicado.
No es de las más célebres del director. Ni mucho menos. Ambientada en los años 20, probablemente a finales, justo antes de la Gran Depresión, o al comienzo de la década de los 30, cuenta una historia clásica, conocida, una especie de Bonnie and Clyde. Secuestros y amores furtivos, imposibles. Las películas ambientadas en esa época no suelen gustarme, sin excepción.

§ 3.378. Los ojos de la noche (Jesús Franco, 1970)

  Algo hay que reconocerle a Jesús Franco, la capacidad de montar proyectos, películas, y lanzarlas al mercado. Le tengo fichadas 156 pelícu...