martes, 31 de enero de 2023

§ 2.925. El trompetista (Michael Curtiz, 1950)

 

Piopic del cornetista (más que trompetista) Bix Beiderbecke, un musico de Jazz blanco que rivalizaba por el mismísimo Satsmo (Louis Armstrong ) en originalidad y potencia creadora.
Hombre torturado por la vida desde la infancia y que huyó hacia los abismos del alcohol a marchas absolutamente aceleradas. Murió de un delirium trémens con tan solo 29 años. Una auténtica barbaridad. Huérfano de padres, no tuvo un auténtico hogar.
Aquí se endulza su historia con la enseñanza de un músico negro,  aunque la historia verdadera quizá no concuerde. Siempre le he tenido por un autodidacta incapaz de leer música y con graves problemas para tener la disciplina necesaria para ser un auténtico músico. Aun así ha quedado para la historia como un auténtico mago de la trompeta en los inicios del jazz, con esos sonidos agudos y la reverberación del sonido estridente de ese dixeland anterior al jazz clásico. 
Hay algo de malditismo en su figura, como también la hay en otros trompetistas clásicos, desde Miles (que tiene un disco con el mismo título en ingles que la película) hasta el de 'las alas rotas'... Como aficionado, muy aficionado, la trompeta es el instrumento que más me fascina. Quizá por su dificultad, quizá porque se puede transportar, quizá porque tiene algo de fálico y tocarlo es una masturbación sonora. No sé.
La cinta es muy buena. Excelente. Bien ambientada, bien narrada, con un guión que camina despacio pero sin detenerse en nada pero tocándolo todo. Te haces una perfecta idea de lo que era tocar en una banda de jazz. 
Muy bien Kirk Douglas, como siempre. La siempre interesante Lauren Bacall y una guapísima Doris Day forman el plantel femenino. Completan el elenco: Hoagy Carmichael que es el pianista que narra la vida del trompetista y Juano Hernández que da vida al maestro negro que le enseña a tocar.
Me ha gustado mucho. Curtiz le da un toque de distinción a todo lo que hace. Un cine muy clásico, sin innovaciones estilísticas ni giros efectictas. Sabes lo que va a pasar, y cómo. Y aun así te gusta la película.

lunes, 30 de enero de 2023

§ 2.924. Muerte al atardecer (Jack Arnold, 1956)

 

Otra de Arnold. He visto dos recientemente, y me han gustado mucho. No le tenía yo por un director de Western, pero tengo que cambiar esa opinión. Tiene buenas películas del Oeste.
Esta es una historia clásica, contada como se cuentan las cosas del oeste: despacio, paso a paso, con buenos y malos en estereotipos bien definidos que se ven abocados a tomar decisiones trascendentes basadas en la moral aprendida de chico. El honor, la amistad y la fidelidad a las decisiones tomadas.
No se necesita saber mucho de casi nada para tomar la decisión correcta. Y ayudar a quien te ha ayudado es una decisión correcta.
La redención también es un camino correcto. Y este es el principal motor de esta cinta, el cambio de forma de vivir que experimenta un pistolero al ver morir a un amigo a manos de otros 'macarras' más rápidos y violentos que él.
Rory Calhoun es el pistolero y Martha Hyer la chica de quien se enamora en la segunda oportunidad que le concede la vida.

§ 2.923. Más allá de la barrera del tiempo (Edgar G. Ulmer, 1960)

Graciosa propuesta de ciencia ficción que vista desde las técnicas actuales de efectos especiales se revela muy pobre. Pero hay que entender el contexto de producción de la cinta y el chaché del director, un hombre maldito en un Hollywood que ya había exprimido a conciencia todo el potencial de creatividad de los cineastas europeos llegados a la tierra de promisión que era la california de la época.
Desconozco si Ulmer había leído algo de la teoría de la relatividad, o si tenía conocimientos de física, pero lo que pretende en la historia que cuenta es algo que tiene que ver con estas cosas. Al menos a mi -profano absoluto en la materia-  así me lo parece: la alteración de las coordinadas del tiempo y del espacio a través de la velocidad.
La película es simpática, se deja ver y puede servir de complemento para ver otras cosas. Tiene su gracia. No sé si interpretarlo como una parodia de la guerra nuclear, o más sencillamente, como una historia del futuro. No creo que el Director reivindicase una postura ideológica o política. Sencillamente adaptaba una historia a la pantalla.

 

domingo, 29 de enero de 2023

§ 2.922. Las amapolas (Kenji Mizoguchi, 1935)

 

Retrato intimista de la vida cotidiana. Un fresco moral de emociones primarias bien expuestas y narradas, pero sin la deseable pulsión emocional para provocar en el espectador algo más que una seca y fría admiración por el estilismo seco y sobrio.
No me agradado especialmente. Tiene 88 años la cinta y eso se nota, pero he visto cosas americanas que eran más potentes desde el punto de vista emocional.
Además, la temática del acuerdo entre familias para mediar en los matrimonios de los jóvenes no es lo que más motiva. Hay que ver de todo y creo que es una propuesta interesante comenzar con Mizoguchi, del que sólo he visto dos cosas: El intendentes Sansho  y La mujer crucificada, ambas de 1954. Y de ninguna de ellas guardo especial recuerdo. De esta seguro que tampoco.
Me gusta la naturalidad con la que se mezclan las costumbres ancestrales japonesas -comer con palillos, vestir con quimonos los hombres y las mujeres, tener el pelo cardado, etc.- con la vestimenta netamente occidental, trajes, gafas, corte de pelo, zapatos. 

§ 2.921. Jubal (Delmer Daves, 1956)

 
Me ha gustado mucho. Es la segunda vez que la veo. Todos los tópicos de una película de este género conviven en ella.
Glen Ford como siempre está magnífico. También Borgnine (sobre todo en la segunda parte), pero no tanto Steiger, que le he viso en mejores películas. Está soso, sin alma, fuera de sus registros más certeros, que son aquellos que le acercan al histrionismo, a la marginalidad, a la rareza. No era un actor para hacer papeles de hombre corriente.
Un tratamiento muy cercano a los melodramas de celos y venganza. El resentimiento es el motor de la venganza. 
El arquetipo de Western perfecto. Varios tópicos del género se nos muestran, aunque de manera algo fría y desinteresada.
Vaquero (Glenn Ford) contrato por terrateniente (Ernest Borgnine) que está casado con una mujer muy guapa que se le insinúa al nuevo recién llegado. Se va situado como hombre de confianza y levanta los recelos de los otros vaqueros, especialmente de uno (Rod Steiger) que ya había tenido en el pasado un affaire con ella. Todo marcha bien hasta que se convierte en capataz y estalla la guerra soterrada de celos, amarguras, traiciones y venganzas.
Es acusado injustamente de cometer adulterio, provocado en gran parte por la actuación de la mujer que deja entrever falsamente esta circunstancia y el patrón intenta asesinarle. Otro vaquero le ayuda a defenderse dándole un arma y el desenlace fatal era lo previsible. Nada hace presagiar que el resto de trabajadores y demás pobladores no le ahorquen pero al final en un requiero del propio destino consigue aclara las cosas y abandona el rancho con una mujer que pertenece a una caravana que había estado varias días en un arroyo de la finca con permiso del patrón.

§ 2.920. Gritos y susurros (Ingmar Bergman, 1972)

 

Estupendo ensayo sobre la incomunicación y el afecto. Difícil de ver, como todo Bergman, pero muy interesante. Los prototipos de personajes están perfectamente matizados. 
El color rojo, en sus varias tonalidades, lo preside todo. El amor y el sexo, pero también la muerte y el dolor. 
Tres hermanas con sus diferencias y su semejanzas viven la agonía en el cáncer terminal de una de ellas recordando sus vivencias y su vida en común. Duelo actoral del que claramente sale vencedora Liv Ullmann. No solo es guapísima, sino que destila clase, estilo, personalidad, potencia. Es, claro, el papel más brillante de todas ellas. Frívola y muy sensual. Harriet Andersson es la hermana enferma y verdaderamente es su suplicio verla respirar y llorar de dolor, además de que está siempre en cama y muy desmejorada. Y el personaje de Ingrid Thulin, la hermana más firme y seca, probablemente la de vida menos satisfactoria, tiene la dificultad de empatizar con el espectador.
Al parecer está muy bien considerada dentro del ranking de las películas de Bergman. No es de las que más me han gustado, aunque ciertamente es muy impactante. Fue un éxito de crítica y público, algo no del todo usual en el director.

sábado, 28 de enero de 2023

§ 2.919. Una vela para el diablo (Eugenio Martín, 1973)

Una versión spanish kitch del terror de toda la vida. Pero realmente muy bien hecho. Entre drama religioso y terror gótico plantea perfectamente la cuestión, y narra las consecuencias de manera magistral. Si en vez de estar rodada en España fuese inglesa estaríamos hablando de una cinta mítica. Estoy convencido. Siempre he entendido que el mejor terror es el británico, esa mezcla de barroquismo en la puesta en escena y sobreentendidos tan típicos y clásicos. Esas elipsis, esta forma de contar sin decir, de hacer ver sin exponerlo claramente.
Funciona a la perfección. Expone perfectamente las angustias y los temores de las hermanas, con un toque de lesbianismo y frustración personal importante. Hay un punto de fervor religioso que pretende sustituir a la sensualidad que está muy bien conseguido.
La película está rodada en Ronda. En un momento dado una turista dice: "La piscina está en el Parador". Por un momento pensé que podía ser Arcos de la Frontera, pero es Ronda. Al menos eso he leído en un blog. 
Me ha gustado mucho Aurora Bautista, que es quien de verdad da miedo. Lleva el peso de la cinta en todo momento. Lo que ocurre alrededor de ella es la trama.
El resto de actores están decentes, pero no imponen su sello dramático como sí lo hace ella. Además es una mujer muy guapa.

§ 2.918. Como en un espejo (Ingmar Bergman, 1961)

 

Una película difícil. La última que me quedaba por ver de la trilogía El silencio de Dios (las otras dos cintas son: El silencio y Los Comulgantes). Es la primera de las tres. No sé muy bien por qué se llama así. En las otras dos sí es cierto que hay un alto componente místico y religioso.  Pero en ésta no se aprecia tanto (tampoco en El Silencio), más allá de las alucinaciones de la hija.
Hay algo de imposibilidad del hombre para situarse en el mundo, para comprender su lugar y a qué se dedica, por qué está en él. Y, sobre todo, en las tres, pero en esta especialmente, lo que se aprecia claramente son las dificultades para situar al hombre en relación con sus seres queridos. Sobre todo con los hijos. Si todo autor, si todo creador deja algo autobiográfico en todo lo que hace, es evidente que Bergman tenía serio problemas con sus hijos. Qué era un auténtico 'utilizador' de mujeres, por no emplear una palabra más fuerte, era conocido. Pero el aspecto relacionado con sus hijos no lo conocía. Es evidente que sufre por ello, porque lo deja más que claro con varias cintas. Ésta, por ejemplo, Saraban, etc.
También es llamativa la frecuencia con la que sus personajes sufren enfermedades mentales, esquizofrenia particularmente. Es evidente que le llama mucho la atención y que es más que un recurso estético o estilístico. Es algo que le atormenta y le hace sufrir. No sólo que le llama la atención. No es un recurso, es un hijo conductor en toda su obra.
Los personajes de la cinta son interpretados por Harriet Andersson, Gunnar Björnstrand, Max von Sydow, y Lars Passgard. Los tres primeros son actores de la 'troupe' de Bergman. Mucho conocidos y grades actores. Me ha encantado Gunnar, en el que me he fijado con cierto detalle. 
Me ha gustado. No es de lo que más me ha gustado de Bergman, pero debo reconocerle una gran capacidad de sugestión.

§ 2.917. La más bella (Akira Kurosawa, 1944)

 

Supongo que no se le podrá criticar a Kurosawa su falta de patriotismo, porque esto es una película abiertamente militarista, probablemente, como he leído a otros compañeros de Filaffinity, de encargo del Gobierno japonés para insuflar ánimos a una población hastiada de la guerra que estaban perdiendo. No creo que eso sea un problema para ver una película. Es más, excelentes directores han jugado a ese juego. Quizá no se trate de una opción voluntaria. Es más, es probable que no tuviera realmente otra opción.
En todo caso, y sea como fuere, la cinta no es de las consideradas grande. Tiene un propósito claro, y eso lastra tanto la estética como el mensaje. Mostrar el 'ardor guerrero' de la población civil dedicada a la fabricación de armas es realmente muy difícil. Mucho más si las protagonistas son mujeres que trabajan en una factoría de fabricación de ópticas militares de manera interna. Viven en la fábrica, allí trabajan y allí enferman. Enferman de trabajar sin descanso, pero también de trabajar sin perspectivas, sin nada por lo que luchar. Sus familias están lejos, su país sólo quiere de ellas su mano de obra. La producción es el objetivo y a su mejora se supedita todo.
Es interesante y tiene momentos emotivos, pero, la verdad, es de las que menos me gustas suyas. Con todo es una película de Kurosawa. 

miércoles, 25 de enero de 2023

§ 2.916. A las nueve cada noche (Jack Clayton, 1967)

Unachi
Clayton me parece un director solido y muy eficaz. Riguroso, canónico y tremendamente profundo. Todo lo que hace tiene sentido, tanto desde el punto de vista moral como estético. Aborda, además siempre temáticas duras, difíciles, siento ésta un buen ejemplo de ello. 
No sabría calificarle desde un punto de vista técnico, supongo que es tan bueno como cualquiera. No veo alardes en lo que importa a los planos, los tráveling, los encuadres, el color, los movimientos de cámara o la sucesión de planos. Un director eficaz. 
Sin embargo desde el punto de vista artístico le veo como un director muy dotado. Sensible y delicado, sabe darle al tono de la película un estilo basado en la emotividad (sin sensiblería) y en una exposición directa y algo descarnada de los sentimientos. No juzga o se posiciona en una parte o en otra de la confrontación de situaciones o de intereses.
Esta película es difícil de ver. Como casi todas las películas con niños no me agrada demasiado. La evolución de los niños ante el fallecimiento de la madre y cómo abordan el duelo y el resto de su vida es el propósito de la cinta. Da casi más para una serie que para una cinta. 
Los diferentes caracteres de los niños están muy bien expuestos. Una chica muy dominante, un varón claramente sádico -con sus propios hermanos-, un chico tartamudo algo retrasado y la chica mayor que ejerce de madre sustituta.
La cinta se vuelve algo tediosa. Es excesivamente lenta y morosa. Los primeros cincuenta minutos de exposición de los personajes y la trama dura demasiado. La llegada del padre de los niños sobre el minuto  55 parece alumbrar otra luz a la historia. Pero no es una luz muy potente. Por más que Bogarde le insufla calidad y madurez no consigue que la cinta remonte.
Es interesante y debe verse, pero no es una película que me llene realmente. De las que he visto de Clayton es la más floja, la que menos me ha impactado.
Seguro que a muchos espectadores les habrá parecido aterradora, sofocante y sumamente perturbadora. Pero no es mi caso. Me parece interesante, sin más. No creo que la historia tenga un propósito escondido, ni un discurso moral por edificar. Me parece que las visiones más allá de lo pretendido por el autor es pura especulación. Y esta cinta es de esas sobre las que corren ríos de tinta, estoy convencido.

martes, 24 de enero de 2023

§ 2.915. Pánico en el transiberiano (Eugenio Martín, 1972)

 
Ayer murió este director, del que no había visto nada, pero sí oído lo buena cinta que es ésta. Película singular, horror ibérico con pocos medios, pero de resultado interesante. Con un reparto más que potente -dentro de los cánones del género- con dos de sus figuras más relevantes: Christopher Lee, y Peter Cushing, a los que acompañan  un siempre característico Telly Savalas y unos cuantos actores españoles, de lo que sólo me suena Silvia Tortosa. Me he fijado también en Alberto de Mendoza, actor argentino más que interesante, al parecer un grande del cine argentino.
Una producción cuidada -trajes, trenes, pistolas, trenes, etc.- con un guión que te mantiene siempre alerta hacen el resto de una cinta con metraje más que contenido, 90 minutos que sólo se hacen largos en el último tercio, ya cansado de tanto tren.
Interesante película que supongo que con el paso de los años se ha erigido en una cinta de culto, rememorada por nuevos espectadores.
Pero le falta la magia que sólo tienen grandes obras muy reconocidas. Y esta no llega a ese nivel. Se ve porque es de un autor español y porque ha coincidido su fallecimiento ayer.

lunes, 23 de enero de 2023

§ 2.914. Django (Sergio Corbucci, 1966)

 

La original película, tantas veces copiada como alabada. considerada una obra maestra del género, del Spaghetti Western. Mítica para Tarantino que hace apología de ella. Además hace aparecer a Franco Nero en una de sus cintas, claramente inspiradas en este tipo de cine.
El planteamiento estético es impecable. Nos presenta un Oeste sucio, decrépito, nada idealizado, cruel y egoísta. Probablemente era, en realidad, más cercano a esta visión que a la tópica de tantas película americanas.
Entretenimiento en estado puro. No es, con todo, la cinta del género que más me ha gustado. Fuera de las de Leone, que son mejores, me gustó más El Gran Silencio. Tanto por la temática como por la profundidad de su planteamiento estético y moral.
En ella están planteados, no obstante, los temas más característicos del género (la venganza, el resentimiento, el dinero, la codicia, la violencia, la crueldad) así como los recurso estético característicos (la ropa, los figurantes, los diálogos -secos, duros y nada poéticos ni contemplativos, y esa estética general desaliñada y zafia).
Inconmensurable está Franco Nero, en el que, probablemente, es el papel de su vida. Una chica guapísima, Loredana Nusciak, es la protagonista femenina. El gran José Bódalo haciendo de mexicano no parece la mejor opción, aunque es un actor muy dotado. Me ha gustado mucho Ángel Álvarez, al que no conocía, que hace un papel muy propio.
Me ha gustado mucho.

domingo, 22 de enero de 2023

§ 2.913. Hidden Fear (André De Toth, 1957)

Una de cine negro, policíaca que se decía antes. Un blanco y negro que se ve muy bien, y un sonido claro y limpio que deja escuchar estupendamente la dicción, algo cerrada, del ingles americano que se destila. La cinta empieza de una manera absolutamente fulgurante. En los primeros dos minutos te ha contado todo el propósito de la cinta, por lo que no puede perderse ni un segundo la atención.
La trama es muy interesante, la mezcla de glamour y sordidez tiene su gracia. Probablemente esté verdaderamente rodada en Dinamarca, lo que se aprecia por las calles y el paisaje.
No creo que sea una cinta muy conocida de su director. No ayuda que los actores no sean especialmente conocidos. Excepto John Payne que efectivamente trabajó en muchas películas los demás no me suenan prácticamente nada.
La tengo, no sé por qué, por una película de estudio, de esas que el director tenía que rodar porque estaba bajo contrato del estudio. Ese mismo año rodó también "Combate decisivo" que sí creo que parece una obra más personal y que me gustó bastante.
Ésta es más oscura, sucia, fría e impersonal. No es una cinta redonda, pero es interesante y se puede ver.

§ 2.912. Rebelión redentora (Budd Boetticher, 1953)

Interesante propuesta. Sencilla, como casi todo en el cine de Boetticher, sin alambiques ni requiebros, metraje más que contenido (80 minutos) en un producto dirigido a las sesiones dobles de los cines de medio mundo. Tiene una temática algo distinta a lo habitual en las del Oeste. No hay venganza ni pistoleros. Hay una historia de amor de un americano en la revolución mexicana.
Me gusta mucho Van Heflin, creo que es un actor excelente, que sirve para todo: Western, películas de cine negro, aventuras, dramas, policíacas. Aquí está acompañado de Julie Adams, una actriz que trabajó una verdadera barbaridad, tanto en cine como en televisión.
El resultado es algo plano. No tiene la intensidad y el tiempo de otras de Boetticher del Oeste. El enredo político de la revolución no está bien ensamblado  en la película de aventuras.
En todo caso se deja ver, es bonita, se ve bien y entretiene.

§ 2.911. El tren de las 3:10 (Delmer Daves, 1957)

Estupenda película, gran Westher, con interpretaciones magníficas, tanto de Glenn Ford, faltaría más, pero, sobre todo, de Van Heflin, un gran desconocido para mi hasta hace relativamente poco pero que muestra esa clase media de actores americanos absolutamente imprescindibles, magníficos.
A veces un hombre tiene que hacer lo que tiene que hacer, sin parar a pensar qué ocurriría si no lo hiciese, sin detenerse por las consecuencias que ello pudiera generar, más o menos desagradables. Delmer Davis es un grande, muy bueno, magnífico, estupendo.

 

sábado, 21 de enero de 2023

§ 2.910. El crimen de la calle de Bordadores (Edgar Neville, 1946)

Probablemente, junto con la Torre de los siete jorobados, la película más célebre de Neville, un auténtico genio en una España poco fecunda para el arte libre. 
Madrid costumbrista, enredo policial, y una crítica feroz al periodismo patrio. Teniendo como excusa a los personajes del crimen, víctima y posibles asesinos, expone cómo se vivía en Madrid a finales del siglo XIX, patrocinando un fresco sobre aquella época.
Llama la atención el tiempo que dedica a canciones flamencas. Al parecer era un verdadero entendido en ese arte. Me parece un personaje muy sugestivo. Un vividor, con amantes, amigos, que hacía el cine que quería en un régimen político difícil (por decirlo muy suavemente) en el que todo estaba en contra de los artistas. El protagonista de esta película tiene algo de la propia personalidad del director. Un vividor que consigue enamorar a una mujer mayor muy adinerada. 
Me ha gustado. No tanto como otras de Neville.

§ 2.909. Una bala sin nombre (Jack Arnold, 1959)

Un planteamiento muy clásico, bien tratado y con un guión razonablemente bien organizado. Se me hace raro ver a Audie Murphy en un papel de asesino a sueldo. Con esa cara de niño y su forma de caminar. En el papel quizá hubiera estado mejor alguien más "malo", con cara de malo, con actitudes de malo. No lo hace del todo mal, pues tiene pose y una gran experiencia. No en vano hizo muchísimos Western.
Su llegada al pueblo provoca una curiosa actitud en los lugareños. Casi todos le temen, pero no saben por qué, y el médico, sin embargo, no le tiene ningún miedo. Cada uno en su mente va fabricando los motivos por los que podría venir a por él. Muy inteligente el planteamiento.
Se reflejan así lo miedos de cada uno, sus aspiraciones, sus pasados, sus culpas, sus angustias. Cada uno las expresa de la mejor manera que sabe, pero todos pretenden exorcizar su pasado hablando con él y convenciéndole de que no tome la decisión que ha venido a ejecutar. 
Pero lo más curioso de todo es que nadie sabe -tampoco el espectador- a qué ha venido John Gun a la ciudad. Todos creen que es para matarles a ellos, cada uno busca en su mente el motivo, y cada uno lo acaba encontrando.
Me ha parecido un planteamiento muy inteligente. Y más serio que otros Western más convencionales.
Me parece una joya escondida. Mejor de lo que parece. Aquí el metraje la lastra un poco, 77 minutos parecen pocos, debería haber ido a 90, aunque probablemente era un producto destinado a las dobles sesiones de cine de barrio. 
Interesante y bien rodada. Me ha gustado mucho.

§ 2.908. Django desencadenado (Quentin Tarantino, 2012)

 

Tercera  quizás cuarta vezque la veo. Siempre entretenida.

jueves, 19 de enero de 2023

§ 2.907. El desfiladero del cobre (John Farrow, 1950)

Me gusta Farrow, es un cine sencillo, sin pretensiones, bonito y fácil. Cuenta una historia con detalle pero sin abrumar en datos o cifras. Te deja que seas tu, viendo la cinta, el que construyas la historia. Te da retazos de lo que ha ocurrido, de lo que quiere contar, de lo que cuenta siendo tu el que disfrute imaginando que ha ocurrido en los lapsos que deja. Un cine muy clásico en este sentido.
El reparto no parece muy propio del Oeste: Ray Milland, Hedy Lamarr en los papeles principales no parecen muy propios. Especialmente Lamarr, mujer sofisticada más propia en papeles de mujer fatal o cintas de época o error gótico. No la veo. No la veo en absoluto.
Milland tampoco está en su mejor papel, no parece otorgar credibilidad al papel. Es algo hierático y estirado. Desde luego siempre que le veo me acuerdo de su papel en días sin huella, verdadero papel de mérito.
La cinta tiene un propósito bien definido, pero le cuesta arrancar y no parece que se engarce bien con los acontecimientos que suceden posteriormente.
Es algo cadenciosa, le falta 'punch', pegada, le falta la motivación que suele ser habitual en las cintas del Oeste. Se hace larga, a pesar de no serla.

miércoles, 18 de enero de 2023

§ 2.906. Salvad al tigre (John G Avildsen, 1973)

 

Un tono intimista y natural rodea el comienzo de la historia. Un hombre normal y corriente, ejecutivo de una empresa normal y corriente, tiene una vida normal y corriente, en una ciudad media americana normal y corriente, con una casa normal y corriente, con una esposa normal y corriente, con una hija normal y corriente... que se siente profundamente deprimido. Atraviesa una crisis existencial seria, todo le recuerda a su infancia, y sólo le hace feliz recordar su infancia. 
No comprende el mundo en el que vive, todas las circunstancias normales de la convivencia le superan, no es capaz de adaptarse y eso le provoca un desarreglo consigo mismo.
Es un ejecutivo altamente competente en su trabajo. Pero la edad, los problemas ordinarios, la vida conyugal aburrida, la ausencia de la hija y la bancarrota de la empresa le abocan a cuestionarse toda su vida. Un hombre que le gusta el Jazz, el beisbol, las cosas de los niños.
Desde luego es una cinta que pivota sobre el protagonista principal, maravillosamente interpretado por Jack Lemmon, que ganó el Oscar de la academia.
Es el relato de una vida normal, de una existencia como tantas otras, del fracaso, del pasado. Las conversaciones con su socio sobre su pasado y cuando eran niños son muy emotivas.
Me ha gustado mucho. Es realista y algo deprimente. Sugerente en cualquier caso.
Director del que he visto ya algunas cosas. Probablemente esta sea su mejor película.

martes, 17 de enero de 2023

§ 2.905. Misery (Rob Reiner, 1990)

 

Celebérrima cinta de terror que procede de un libro de Stephen King autor prolífico y cuyas obras han sido llevadas al cine con mucha frecuencia.
Creo que Kathy Bates ganó el Oscar con esta cinta, en donde destaca también James Caan, y la participación breve de Lauren Bacall.
Con sus siempre enrevesados argumentos pero escritos con sencillez -he leído poco a King, pero me ha parecido siempre un literato con extraordinario talento dedicado más a las tramas que al continente- expone un tema rápido y directo. Y funciona. Es un escritor que vende miles de ejemplares de cualquiera de sus novelas y seguro que ha sacado pingues beneficios por la venta de los derechos cinematográficos y televisivos de sus obras.
El asunto es que tras la personalidad del protagonista puede esconderse algún rasgo biográfico del propio King. A lo mejor él también está, como el protagonista, encerrado en una escritura monótona y aburrida. Es un genio haciendo lo que hace, pero, a lo mejor, le gustaría escribir otro tipo de novelas, a lo mejor de amor y de fantasía.
Como expresión cinematográfica no me ha parecido especialmente interesante. Como película de terror quizá consiga lo que pretende: crear un clima opresor inaguantable y asfixiante en el que se mezclan la locura y la obsesión por un lado  con la pretensión de supervivencia por el otro.
Decididamente no me ha gustado. No digo que sea una mala cinta, ni mucho menos. Está bien rodada, mantiene muy bien la tensión emocional de principio a fin y los actores están sembrados, especialmente Kathy Bates, que realmente consigue darle al papel un aíre de perturbada.
En realidad es que no me gustan mucho las películas de miedo, de terror o similares. No es que me pongan nervioso, pero ni las veo con frecuencia, ni tengo una cultura de cine de terror. Muy pocas me han agradado realmente y casi ninguna la consideraría una obra interesante de ver por segunda (o tercera) vez. Más allá de El resplandor (Stanley Kubrick, 1980) y alguna otra similar...

lunes, 16 de enero de 2023

§ 2.904. Buchanan cabalga de nuevo (Budd Boetticher, 1958)

 

Una del Oeste más. Interesante, como todas las del género, que es mi preferido. Boetticher es uno de sus máximo sacerdotes. 
Interesante, bien desarrolla y con fundamento. Además se ve perfectamente. Un technnicolor brillante pero no 'arrebatado'.
Me ha gustado mucho. Una especie de juicio en el Oeste por un asesinato. Las justificaciones y explicaciones forman parte de la propia película. No es que se dieran muchas explicaciones en el juicio, pero entretiene. Además tiene un metraje muy correcto, cortita pero sin llegar a ser breve.
Randolph Scott algo menos rígido que de costumbre, sin llegar a estar 'sembrado'.

domingo, 15 de enero de 2023

§ 2.903. Sangre en el rancho (Jack Arnold, 1957)

 

Intenso drama sobre el racismo y los problemas entre trabajadores mexicanos y rancheros que necesitan la mano de obra.
Interesante Jeff Chandler, actor más que versatil, capaz de hacer hoy una de guerra, mañana un western, pasado un drama, luego una comedia... bueno, una comedia no... y muy sobrio Orson Welles, como siempre.
Tiene un parecido con la de Arthur Penn, la Jauría Humana, en el sentido de la lucha del Sheriff por esclarecer la verdad. No es Marlon Brando pero realmente lo hace muy bien Chandler. Le da un tono cálido y autoritario a la vez difícil de conseguir. No se subleva contra el poder -el ranchero todopoderoso- por rebeldía o ganas de molestar. Lo hace porque lo tiene que hacer, porque es su deber, porque lo eligieron para ello. Un hombre hace lo que tiene que hacer, tenga el apoyo de los poderosos o no.
El desarrollo está muy logrado, la tensión aumenta poco a poco y el desenlace es el previsible, pero tiene un ritmo muy adecuado y está muy bien rodada.
El drama moral no está del todo bien narrado, se sobreentiende pero no es del todo claro. 
Los celos del capataz y el romance del bracero mexicano son el motivos principal del móvil del crimen, pero aunque sabes qué pasa y cómo van a ser las cosas el desarrollo es entretenido. Le falta corporeidad para elevarse a otras cotas. Es una buena película, pero no llega dramatizar del todo el meollo del asunto. Rasca en la superficie, pero no profundiza del todo.

jueves, 12 de enero de 2023

§ 2.902. Flecha rota (Delmer Daves, 1950)

Una película muy bonita. Un Western de toda la vida. Emotivo y emocional, de esos que pretenden enseñar una lección de vida. Una película de acercamiento entre el pueblo indio y los blancos.
James Stewart tan característicos como siempre, Jeff Chandler muy varonil y la guapísima -a mi siempre me lo ha parecido, desde las películas de Lang más- Debra Paget, una actriz sin demasiado recorrido a pesar de tener 30 películas, algunas excelentes.
Al parecer, según se cuenta en la propia película, es un hecho real el que narra, la aventura de paz con Cochise, un indio Chiricagua que organizó las tribus apaches y las sometió a un único mando, el suyo. Tratado de paz mediante se pretende narrar una historia de amor que quizá ya forme parte de la leyenda. Lo del tratado de paz sí parece real, pero la segunda parte, la historia de amor, quizá no tanto.
No la tenía por un 'clasicazo', pero lo es. Una de las grandes del Oeste, sin lugar a dudas. Tiene ritmo, pulso, emoción, aventuras, y argumento.
Muy respetuosa con los indios y sus tradiciones, su cultura y su forma de ser. El planteamiento político que muestra lo hace con naturalidad y con claridad, sin artificios ni alambiques. 
Me ha gustado mucho. En realidad me gustan mucho los Western, es mi género favorito.

miércoles, 11 de enero de 2023

§ 2.901. Tras la pista de los asesinos (Budd Boetticher, 1956)

 

Otra de Boetticher cuyo título en castellano es menos gráfico que en ingles, que da todas las pistas sobre el tema de la película. Tema que, por cierto, no es muy diferente al de la película de ayer, titulada "Cabalgar en solitario", aunque siempre va acompañado.
Más allá de estas cosas estamos en presencia de una Western notable, más maduro y sereno que otros del director. Con más fondo, presencia y prestancia. Una trama madura, más tranquila en su planteamiento, mejor en definitiva.
Presenta un Oeste solidario, la venganza como la única alternativa, y el matar como el único camino de un hombre vencido por la muerte de su mujer. Un Sheriff de buen corazón persigue a los asesinos de su mujer, sin contarnos el por qué y qué pasó con anterioridad para emprender esa "aventura".
No está llena de tópico, aunque los temas son un poco los de siempre. Pero su tratamiento es muy respetuoso y de alguna manera 'nuevo'.
Randolph Scott está como siempre, algo hierático y muy inexpresivo.  La chica es Gail Russell, una desconocida para mi. Lee Marvin le da un toque de rudeza y autenticidad a la cinta. Un gran actor, allí donde lo pongas.

martes, 10 de enero de 2023

§ 2.900. Cabalgar en solitario (Budd Boetticher, 1959)

 

Excelente Western, realmente magnífico. Sencillo, simple, bien rodado, bien interpretado y con un resultado estupendo. En diez minutos te cuenta de qué va. En otros diez desarrolla la historia, en otros veinte centra la cuestión y en diez más concluye. 70 minutos de puro cine. 
Me ha encantado. A pesar de lo muy poco expresivo que es Randolph Scott, un actor que ha participado en muchos Western pero que no destaca como actor en ninguno. Le acompaña Karen Steele, dos actores que no conozco: Pernell Roberts, y James Best, y otros dos muy clásicos del cine del oeste:  Lee Van Cleef, James Coburn.
Realmente un resultado estupendo. Algún plano recuerda vagamente a Centauros del desierto (John Ford, 1956), especialmente el filmado a través de la ventana de una casa.
Seguramente Boetticher es considerado el rey de la Serie B en cintas del Oeste: bajo presupuesto, reciclaje de atrezzo, guionistas de los propios estudios (sin acreditar especificamente), poco presupuesto, actores no especialmente consagrados, pocos exteriores, rapidez en el rodaje, poco tiempo para montar la cinta y una publicidad y unos canales de exhibición limitados. Y así y todo funciona. Y no sólo en su época, sino también para generaciones futuras.

§ 2.899. El reto del Samurai (John Frankenheimer, 1982)

 

Es entretenida, en esa línea de acción que el director cultivó como nadie en los ochenta y noventa. Un planteamiento inverosímil, pero que funciona. Porque esto es cine. No tiene que ser real, ni siquiera parecerlo. Tiene que tener la credibilidad que debe tener la narración dramática cinematográfica.
Comienza bien, tiene su gancho y se deja ver, pero cuando pasa de la acción a la proposición dramática ya no funciona tan bien. A los cuarenta y cinco minutos ya no está tan claro qué nos quiere contar, si una historia de venganza entre dos hermanos por una espada japonesa o el aprendizaje de los métodos de lucha tradicionales. 
Y no consigue remontar. Tiene su gracia por saber qué pasará, pero nada más. Es impersonal y algo anodina. 

lunes, 9 de enero de 2023

§ 2.898. Impacto (Brian De Palma, 1981)

Película de culto, radicalmente libre pero bajo la égida de La Conversación (Coppola, 1974), película muy superior a esta. Sin embargo, aunque el planteamiento es sencillo funciona perfectamente. Es atrayente, tiene ritmo, pulso y deja siempre margen de interpretación al espectador. Siempre bajo ese halo de misterio y de thriller tan característico del director.
De Palma es un experto en plantear estos climax, estos escenarios. Siempre en tendencia ascendente, hacia la resolución del asunto de la forma más dramática e inesperada.
Lo principal y más importante de De Palma creo que ya lo he visto. Incluyendo sus grandes éxitos y sus películas más comerciales. Ésta no es una de ellas y sin embargo es considerada una cinta de culto, de esas que marcan tendencia, época.
Un planteamiento más que interesante, con un trabajo de guión estupendo del propio director, con una fotografía excelente de Vilmos Zsigmond, luego director del que he visto su La larga sombra (1992), que la recuerdo como una especie de remake de M de Lang pero en tiempos modernos.
Un resultado interesante, que se deja ver y entretiene. Por momentos pierde fuerza y tiene momento valle, pero el resumen es muy positivo.
El reparto es muy de la época: John Travolta, después de los bailones éxitos, Nancy Allen por entonces la mujer del director, John Lithgow, y Dennis Franz que adquiere toda su potencialidad con la serie de televisión Canción Triste de Hill Street. 

domingo, 8 de enero de 2023

§ 2.897. Carson City (André De Toth, 1952)

Una de vaqueros de un grande, De Toth. Contenida filmografía, siempre con pulso y presencia. Obras muy reconocidas, siempre en temática del oeste o de cine negro. Peleas, aventuras, salones que venden alcohol, borrachos, pistoleros... y a veces todas muy parecidas.
En esta Randolph Scott no es un Sheriff, sino un ingeniero al que han contratado para construir una vía férrea entre dos poblaciones de Nevada, Virginia City y Carson City. En los títulos de crédito, al principio de la cinta, se comenta que es una historia real. Lucille Norman es la chica, que es la hija del dueño del periódico. Sólo hizo tres películas entre 51 y el 53. Era en realidad cantante y se dedicó mucho a la radio.
También participa Raymond Massey como el propietario de la mina. Un perfil de 'malo' tantas veces visto que llega a cansar.
Tiene su pulso, su ritmo y su afán, pero no es de las mejores cintas de De Toth. La historia de amor juega bien su papel en la historia y sirve escenario ideal para mostrar los términos del enfrentamiento entre los lugareños y los ferroviarios. Una especie de repetición del tradicional enfrentamiento entre ganaderos y agricultores que tan buenos resultados ha dado para el cine.

§ 2.896. Top Gun: Maverick (Joseph Kosinski, 2002)

 

Segundo visionado. Algo mejor, pero no es lo que más me gusta. Se puede ver y tiene su emotividad, pero no tiene la magia de la primera cinta.



sábado, 7 de enero de 2023

§ 2.895. El cisne negro (Henry King, 1942)

"Capa y Espada" de un director clásico que hizo obras estupendas.
Un 'repartazo' realmente impresionante: Tyrone Power, Maureen O'Hara, Thomas Mitchell, George Sanders, y Anthony Quinn. 
No creo que tenga la más mínima veracidad en lo que cuenta, pero sí es cierto que como relato de aventuras funciona perfectamente. Con una estética de aventuras muy reconocible que marca los cánones de 'las de piratas'. 
Es trepidante, desde el principio no te deja respirar, comienza con acción, sigue con acción, se desarrolla y termina con acción. Con la consabida trama de amor rebelde entre las dos estrellas del reparto: Power y O´Hara. Es un género que funciona: amor y aventuras, y supongo que sirve para satisfacer a todo tipo de público, incluyendo el infantil que, en dobles sesiones, consumía cine como forma de evasión los fines de semana.
Me ha parecido preciosa, entretenida y muy sugestiva.
Henry King es todo un maestro, capaz de rodar cosas en diferentes géneros y brillar en todos. 

viernes, 6 de enero de 2023

§ 2894. Asesino implacable (Mike Hodges, 1971)

 

Ver a Michael Caine al principio de los setenta tiene su gracia. Actor sobrio, muy profesional, venido a más con los años, de gran prestigio y una fuerte formación autodidacta. En esta cinta está fenomenal. El rictus en la cara, la mirada de hielo, la boca crispada, los hombros firmes, el cuerpo cimbreado con traje. Guapo pero sin ser un hombre escandaloso, varonil pero no 'cansino', atento sin ser empachoso, mujeriego pero discreto.
Tiene algo atrayente, esa sosegada atracción por la calma, por los silencios. Con una trama muy bien organizada, simple pero bien filmada. Un planteamiento sencillo pero seguro.
La venganza como trasfondo, la vuelta a la ciudad de la que emigraste como decorado, el peligro del homicidio, rodeado de esa sensualidad de las mujeres de los años setenta que ahora, visto con los ojos actuales, queda tan lejos.
Me ha gustado. Es un director que no conocía.

§ 2.893. Un lugar en la cumbre (Jack Claytton, 1959)

Un drama clásico de gran prestigio al servicio de una historia de amor adulto, igual de desenfrenado que de desesperado. Diferentes perspectivas para él y para ella.
Para la mujer que representa Simone Signoret el romance en ciernes es su última oportunidad. Una mujer adulta, mayor, moderadamente satisfecha de la vida que está ante la posibilidad de reverdecer sus amores, volver a sentir el fuego de la pasión. Para el joven que representa Laurence Harvey el amor se abre como una tabla de salvación para su vida, como una posibilidad de progreso. Pero el fracaso de sus pretensiones le abre la posibilidad de vivir una relación adúltera con la mujer mayor. Y aprecia otro tipo de visiones, otras perspectivas.
Gran película que supuso un Oscar para Signoret y, de una forma u otra, la consolidación de Harvey dentro de ese tipo de actores británicos de calidad, sobrios y sólidos pero tremendamente emotivos.

§ 2.892. Memento (Christopher Nolan, 2000)

Segunda película de Nolan, primera de gran éxito. Y, desde el principio, con su características complejidad de tiempo y lugar en la fijación de los aspectos narrativos esenciales. No es un cine sencillo de ver, porque, además, como ocurre en esta cinta, hay muy pocos personajes y la película es muy larga.
Hechos frente a recuerdos. Los recuerdos pueden ser reconstructivos, ser capaces de fabricar una situación, unos hechos, desvirtuar una realidad.
Pérdida de la memoria reciente. Una enfermedad real, aunque poco estudiada y muy poco conocida. Una enfermedad extraña y poco frecuente.
El esfuerzo de guión de este tipo de cintas es mayúsculo. Es todo guión. En este caso es también del director. Es esfuerzo para expresar todos los tipos de memorias que el ser humano tiene es imponente, y de una manera o de otra el director juega con ellas.
Me resulta innecesariamente complejo su cine en general, y esta película en particular. Aunque bien es cierto que esta cinta tiene un pase. Se comprende, aunque quizá no toda, y se asimila, al menos en parte.

jueves, 5 de enero de 2023

§ 2.891. El último Don II (Graeme Clifford, 1998)

 
Saga telefilm de un telefim del año anterior que, razonablemente tuvo que tener su éxito, porque en caso contrario no se hubiera rodado esa saga, además tan larga, cuatro hora nada menos.
Retoma escenarios e ideas de la anterior cinta, y tiene algunos giros retrospectivos que favorecen la integración de los dos partes de la historia. En este caso el guión no es de Mario Puzo, limitándose los créditos a referenciarle como creador de los personajes. Una nomenclatura bastante exacta y precisa.
Me ha gustado bastante menos que la anterior, y aquella no me gustó mucho. Es reiterativa y no tiene demasiada imaginación. No me parece una gran obra. Vivía al calor de la fama de las películas de gánster, realmente muy atractiva.
Los actores son los mismos, aunque algunos personajes sí cambian de actor, supongo que los diferentes proyectos de cada uno aconsejaban cambios, o quizá problemas económicos o cualquier otra circunstancia personal.
Se hace muy larga, y es innecesariamente ligera, como con pocas sustancia de manera consentida. No tiene razón de ser, hay actualmente mejores miniseries que esta. Es cierto que los telefilm tienen otros ritmos, otros tempos, otras texturas, otras formas. Pero esta no tiene el nivel necesario para consagrarse. Además perdiendo a Aiello y a Mantegna pierden a los mejores actores, a aquellos que le daban caché y más empaque.
En definitiva, creo que han estirado demasiado el asunto y que no daba para más.

§ 2.890. El último Don (Graeme Clifford, 1997)

 

Leí la novela hace muchos años y me gustó mucho. No tanto como El Padrino, pero sí tenía su gracia y era muy impactante. Comienza como una especie de Romeo y Julieta moderna, ambientada a la mafia que da comienzo a toda una serie de luchas por el poder en EE.UU. Rápida y con pocas concesiones a los efectos dramáticos, a los estudios de personajes o a las tramas intermedias, se centra en el meollo de la cuestión, en la acción.
Lógicamente los temas recuerdan a las tramas de El Padrino, como no podía ser de otra manera, pues realmente Puzo expone los temas esenciales de la mafia de una manera celeidoscópica, 
Danny Aiello como jefe de la mafia, y Joe Mantegna como sobrino del Don son los actores más trascendentes, los mejores y sobre los que pivota la historia. Penelope Ann Miller también es muy conocida, como Daryl Hannah. Ambas están razonablemente bien, pero no es Aiello o Mantegna, que realmente parecen estar hechos para los papeles de mafiosos que interpretan.
A veces el pulso narrativo es demasiado plano, con poca tensión, sin relieves, sin verdadera intensidad. Su propósito no es exponer los temas desde un punto de vista personal, sino narrar acción enlatada en un formato muy demandado.
En general me ha decepcionado. Se puede ver, naturalmente, pero no tiene verdadero interés. La estructura de telefilm va deteriorando el producto poco a poco, hasta el punto de hacerlo intrascendente. Es una sucesión de tópicos, siempre relacionados con asesinatos de la mafia.

§ 3.377. Los cien caballeros (Vittorio Cottafavi, 1964)

  Pues un 'peplum' peculiar, con temática española. Es la adaptación de un texto teatral de Lope de Vega. El texto es "Las famo...