viernes, 22 de febrero de 2013

LEONE, Sergio. Agáchate, maldito (1971)


Prescindible película muy mejor de Leone, con un metraje excesivamente largo, y con la curiosidad que tengo que preguntar a algún experto en el tema de si la música es la misma que en "Hasta que llegó su día", que esa sí es un obra de altura.

sábado, 16 de febrero de 2013

Siri Hustvedt: El verano sin hombres, Anagrama, Barcelona, 2011, 218 págs.


La broma de la página 112 es suficiente para dar por acabada una novela que no tuve que empezar. Es insufrible por Dios, que horror de delirio de escritura automática, sin medida, sin mesura, sin ningún tipo de análisis de personajes, sin auténtica trama, sin ritmo, sin pulso... Nada... Y lo de la página 112 es para cerrar el libro y no volver a leer nada suyo nunca más. Así lo haré. Lo de Elegía para un americano, bueno, tiene un pase, esto no. Ni mucho menos. No dudo que para un determinado público le guste saber qué va a suceder con La Pausa, pero es que no lo cuenta ni siquiera con gracia.

CURTIZ, Michael. Ángeles con caras sucias (1938)


Magnífica película del género, o mejor decir, subgénero de chicos malos de la calle redimidos por un padre muy de la calle. Un Pat O´Brian casi tan bueno en el papel como Karl Malden en las típicas de Elia Kazán, y un Cagney soberbio, frente a un apocado Bogart.
Cine en estado puro, setenta y cinco años después de haberse rodado. Cine del bueno, del único, del intemporal. Cierto es que te tiene que gusta el género y no es de los más agradables.

domingo, 10 de febrero de 2013

FLEISCHER, Richard. [Co-dirigido con Kinji Fukasaku] Tora!, Tora!, Tora! (1970)


     Magnífica película bélica, rodada con todos los cánones del género, una estupenda ambientación, un vestuario adecuado, unos planos en abierto en el mar y en el aire limpios, diáfanos, escenas largas, de varios minutos, una recreación histórica muy precisa, y sobre todo una fidelidad a lo acontecido que engrandece la cinta.
     Dos cosas me llaman mucho la atención de esta cinta: lo bien que está construido el ejército nipón, con actores muy sobrios, y lo impresionante que se ven los portaaviones en el mar. De la historia me queda muy claro dos cosas. Que los EEUU había sacado días antes los grandes buques del puerto de Pearl Harbour, lo cual indica que preveían algún ataque, y que a pesar del relativo éxito de la cruzada japonesa, para el devenir de la guerra fue una escaramuza más. Ni siquiera muy importante. La falta de concreción de un segundo ataque nipón restó eficacia destructiva al mismo.
     Una reflexión general puede hacerse sobre la visitación que hacen los directores de cine americano a las diferentes guerras que han vivido. Sólo por comparar, ¿cuales son mejores películas, estas de la segunda guerra mundial, junto con primera victoria, el día más largo, la batalla de Midway, etc, o las que veinticinco años después hicieron sobre Vietnan?. A mi no me cabe ninguna duda, siendo más espectaculares las actuales, la potencialidad visual y las tramas auténticas de las antiguas están muy por encima del resto.

sábado, 9 de febrero de 2013

LUMET, Sidney. A la mañana siguiente (1986)

     Buena película, entretenida mejor dicho. Muy de verla y ya está, sin pretensiones, sin mucho que ofrecer pero muy digna. Bien hecha, bien filmada, metraje correcto, actores en su línea, mejor Bridges que Fonda, a mi juicio.
     Una chica se despierta completamente bebida en una cama de no se sabe qué habitación, a su lado hay un hombre asesinado, un puñal en el centro del corazón así lo atestigua.
     Huye despavorida, de nada se acuerda, el alcohol no le permite recordar qué ha pasado. Acude a su ex marido, un peluquero de buena fachada con el que mantiene una extraña relación de amistad y protección por parte de él. Peripecias varias, encuentro con el ex policia dado de baja permanente por un problema médico en un hombro que sospecha que es inocente, vuelta a ver a su ex marido que va a casarse con otra mujer... y desenlace más o menos esperado: a la novia de su ex le hacía chantaje el fallecido por lo que urdieron su muerte, pretendiéndosela colgar a la chica. Última escena más o menos tierna en donde ella decide quedarse con él en el hospital para curarse de las heridas sufridas en el violento encuentro que han tenido los cuatro. En realidad se queda por ella misma, pues lleva días sin beber y necesita continuar en la senda de la tranquilidad  que en este sentido le da el ex policía.
     Muy de Lumet, aunque no es de sus mejores cintas.

domingo, 3 de febrero de 2013

DMYTRYK, Edward. La mano izquierda de Dios (1955)

Un sacerdote con una pistola es una imagen muy gráfica de lo que es la película. Aparece en el pueblo en la China de mitad de siglo y todo el mundo le supone sacerdote cristiano. Actúa como tal, delante de toda la comunidad, escucha a los niños y les enseña a tocar el piano, trabaja con todos, evita los abusos de los mascas locales...
Evidentemente no era sacerdote, había huido de un cautiverio más o menos forzado al que le sometía un mafioso local. Era aviador y su aparado había sido derribado. Secuestrado por el mafioso para convertirlo en su mano derecha en la extorsión que practica habitualmente entre las gentes de la zona.
Todo va bien, sólo hay un problema, una enfermera local se enamora de él, del sacerdote, es Gene Tierney, con esa belleza enigmática tan suya. Al final tiene que abandonar la comunidad porque llegan otros párrocos, pero se decide no desvelar su engaño: ha actuado como un auténtico sacerdote y no merece la pena destrozar a la comunidad. Sin embargo él sí le dice la verdad a la enfermera, que finalmente no se va con él.
Buena película, de un director interesantísimo...

sábado, 2 de febrero de 2013

DMYTRYK, Edward. A siete millas de Alcatraz (1942)

  Película claramente propagandística pero muy bien rodada. De trama fácil y concreción de las bondades y maldades de los protagonistas con total rapidez.
   Dos presos se acaban de escapar de Alcatraz y se refugian en un faro que se encuentra a medio camino entre la playa y la prisión. Allí viven un retirado militar con su hija y un ayudante. Uno de los presos es aficionado a los crucigramas y detecta un mensaje en clave que un submarino alemán ha mandado a sus contactos en tierra. El desembarco en la bahía de San Francisco es una realidad. No. No tan deprisa, pues aunque los alemanes de tierra han desembarcado en el faro y retienen a sus tres ocupantes y los dos presos, éstos son capaces de desembarazarse de los nazis, detenerlos, avisar a tierra del pastel y abortar la misión. Por ello reciben el perdón de la sociedad.
     De las primeras películas de Dmytryk pero muy bien estructurada. Realmente muy bonita de ver. Gran entretenimiento.

§ 3.378. Los ojos de la noche (Jesús Franco, 1970)

  Algo hay que reconocerle a Jesús Franco, la capacidad de montar proyectos, películas, y lanzarlas al mercado. Le tengo fichadas 156 pelícu...