Es muy buena, pero la recordaba mejor, a la altura de El Padrino, pero no. Es estupenda, pero no a la altura de una obra maestra. El reparto es magnífico, la música mítica, el guión perfecto, el tempo cierto, todo está muy bien, pero no es una gigantesca obra. Es, sin duda, una película maravillosa, pero no es una obra de arte.
Lev Stepanovich era un contador de historias ciego que la abuela de León Tolstoy tenía a sueldo en la casa familiar. Era legendaria su capacidad para contar cuentos... manipularlos, hacerlos una y otra vez de manera diferente... Eso pretende este Blog, contar cuentos... de manera creible.
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