jueves, 26 de junio de 2025

§ 3.908. Billy el niño (David Miller, 1941)

Otra versión más de uno de los mitos americanos de siempre. Una versión clásica, frente a la de Sam Peckinpah de 1973 y a la de King Vidor de 1929 que aunque probablemente no será la primera, sí es la canónica que comienza las idénticas en guión y temática.
Es buena, está muy bien, un Robert Taylor guapo de verdad y un Brian Donlevy con su bigote característico.
Está muy bien hecha, esta bien rodada, tiene ritmo y es muy colorida.
Director interesante, que debuta con esa película. En algunas bases de datos la dirección se muestra en coatoría con Frank Borzage. en la cinta que he visitando sólo indica que es de Miller.

martes, 24 de junio de 2025

§ 3.907. Best Seller (John Flynn, 1987)

Interesante historia, bien narrada, bien contada. Quizá un poco larga, pero se deja ver. Tiene verdadero interés. Es producto de su tiempo. Comienza bien, pero a medida que la historia se desarrolla comienzan los problemas de la película. Ya no funciona tan rotundamente. Es un thriller de su época, de su momento. Ahora quizá no funcionaría. Ni por la temática, ni por el estilo, ni por el planteamiento. No funcionaría. 
El casting no es malo, James Woods funciona, como siempre, y Brian Dennehy quizá esté en su mejor papel.
La temática es, precisamente, la que se supone del título.

§ 3.906. Sombras en el paraíso (Aki Kaurismäki, 1986)

Mi primer Kaurismaki. Un director finlandés, muy de moda y con muchos seguidores. Esta es la primera de un trilogía, que se denominó o se conoce como del proletario. Un cine social, o con pretensiones sociales alejado de mis intereses y del cine que me gusta.
No es que me haya encantado, pero se deja ver, tiene interés, mucho interés y desde luego funciona. Mantienes el interés, no decepciona y se deja ver.
No es un cine crítica, ni exactamente un cine dogma, ni por supuesto es un realismo, aunque muestra la faz más desagradable de una país próspero como es Finlandia (doy por supuestos que se filme en su país). Quizá tampoco la más desagradable, simplemente la que retrata las clases menos prósperas, que no es exactamente lo mismo.
No tiene reparos en mostrar los aspectos más deprimentes de la sociedad. La soledad, las relaciones de pareja, el desagrado del empleo poco remunerado es mostrado con una gran crudeza, sin ahorrar la más mínimas mota o gota de suciedad, de hastío, de crudeza.
La música de piano que acompaña la cinta en todo momento es excelente.
Un cine distinto, para el que tienes que tener una cierta predisposición para verlo. No es sencillo.

lunes, 23 de junio de 2025

§ 3.905. Al volver a la vida (Byron Haskin, 1948)

Una de cine negro clásico de toda la vida. En el duelo interpretativo entre Burt Lancaster y Kirk Douglas no veo claro quién es más potente. Ambos están estupendos. Acompañados de una rompedora Lizabeth Scott y de una no menos bella Kristine Miller. 
Dos secundarios de los importantes, Wendell Coreyy y George Rigaud completan el plantel principal.
Rencillas, antiguos problemas no resueltos, socios que engañaron, y la siempre latente posibilidad de desarrollar un escenario de violencia física imparable.
Está bien, la tensión se palpa y la solución parece irremediable. Tiene hechuras de un gran clásico. Aunque no llega a las cotas de otros típicos del género.
Me ha gustado.

domingo, 22 de junio de 2025

§ 3.904. La muerte cumple condena (Joaquin Luís Romero Marchent, 1966)

 
Otro Western del montón, industrioso, rápido, sin pretensiones, pero con propósito. La copia no se ve del todo bien, y eso dificulta el seguimiento. Un amarillo pálido protagoniza todo el metraje, y, la verdad, es un poco incómodo de seguir. 
Ver a José Bódalo y a Jesús Puente en la primera escena de la película cabalgando a caballo por un desierto muertos de sed ambos auguraba mejor película de lo que finalmente ha sido. 
Un guión poco original, con unas gotas de humor sobre fondo del Oeste.
Venganza, terratenientes, pistoleros y una deuda pendiente entre ladrones. Buen material.
Bien desarrollada, con un guión inteligente, buenos diálogos y actores que dan la talla.
Me ha gustado. 

§ 3.903. La herida luminosa (Tulio Demicheli, 1956)

Versión original  de una cinta que tuvo su remake en una de Garci, con el mismo título, que me pareció interesante, sin ser de las mejores de él, pero que dejó una interpretación muy sentida de Guillén cuervo.
Ésta tiene guión del director con Julio Coll (que el año anterior había trabajado con De Córdova en la maravillosa Los peces rojos), uno de los mejores directores españoles de esa década y está dirigida por un  director de origen argentino, que rodó en México mucho, y vivió en Madrid, donde murió en 1992.
Un poco al estilo de las de Douglas Sirk, muy colorida, y brillante. Las luces del personaje del médico están pero tratadas aquí por Arturo de Córdova, que en la de Garci por Fernando Guillén. Ambos actores magníficos. El español más hecho, más impostado, más teatral; el mexicano más galán, más estilo Hollywood, con menos matices quizá, pero más rotundo, más pleno.
En esta película es el hijo quien va a tomar los votos, en la de Garci es una hija.
Pero la historia es similar, aunque hay algunas diferencias notables. Básicamente en que en la de Garci el doctor se enamora de una colega, y aquí de su sobrina.
La mujer es Amparo Rivelles (que lo hace realmente bien) la sobrina es Yolanda Varela, y también in la amante es Mercedes Monterrey.
Me ha gustado mucho. Tiene un aire clásico y un fatalismo dramático que enamora.
La predestinación de un amor infantil es un mito recurrente en la historia de la humanidad.
La escenografía es excelente, y el diseño de producción muy interesante. Aquí se plantea un escenario más dramático, más cruel, más rupturista. La imposibilidad del divorcio genera una tensión añadida. No es EE.UU., no se puede romper el matrimonio y tener una nueva vida. 
Y la amante está obsesionada con ocupar el papel de mujer a todos los efectos. La idea de un crimen aparece, se desarrolla y se proyecta.

§ 3.902. Entre el amor y el juego (Sam Raimi, 1999)

 
Tercera vez, quizá cuarta, que la veo. Siempre me ha gustado mucho.

§ 3.901. La trampa (M. Night Shyamalan, 2024)

El director pretende algo difícil, difícil de verdad, entroncar una persecución policial dentro de un estadio donde se está celebrando un concierto de una celebridad pop. El recinto lleno de niños, policías en las puertas, etc.
Ya he visto alguna similar en estadio de Futbol americano, creo recordar que de Gordon Douglas (aunque quizá mi recuerdo me traicione), y aunque era entretenida no la recuerdo como especialmente buena.
Es interesante, algo forzada en el guión, pero no quedaba otro remedio, como fácilmente pueden comprenderse.
Funciona a medias, pero es demasiado larga. Le cuesta concluir la historia. De 90 a 105 minutos sólo hay 15 minutos. Pero es la diferencia entre una cinta con ritmo, de una que pierde algo de sentido y razón por su duración. Pero esto es un parámetro mío, que quizá no se comparta. Las películas actuales son, a mi juicio, demasiado largas.
Un director que tuvo un éxito verdaderamente impresionante con El sexto sentido (1999) y nunca más ha vuelto a repetir un éxito de crítica y público tan formidable. Fue una verdadera conmoción. 

sábado, 21 de junio de 2025

§ 3.900. Tres días de noviembre (León Klimovsky, 1977)

 

El penúltimo Klimovsky, un gialo patrio en un sanatorio a cuyo mando se encuentra un sofisticado y salvaje doctor encargado de realizar experimentos de lo más peculiares. Lo singular es la expectativa que el espectador va a generar en averiguar qué le ocurre a los pacientes, cómo se curan de sus enfermedades y cuál es el secreto que esconde el dueño de la clínica, al que guardan el secreto el matrimonio de doctores que le acompañan.
Mónica Randal, Maribel Martín, Narciso Ibáñez Menta, Tony Isbert y un de secundarios de siempre del cine español.
Funciona, más o menos. Pero no es un gran título. Metraje corto, pretensiones escasas, todo trama y algo de lo que hablar al salir del cine. 
Película fácilmente olvidare, que la podría haber rodado Jesús Franco perfectamente, un Jesús Franco de finales de los sesenta y principios de los setenta.

§ 3.899. Estos son los condenados (Joseph Losey, 1963)

Terror británico a cargo de la Hammer, por un director estadounidense exiliado en Inglaterra porque era perseguido por sus ideas políticas en su patria (EE.UU.). 
Un director peculiar, que siempre me ha atraído. 
La historia funciona a medias.más que nada porque vista en su conjunto parece que le falta metraje. La presentación de los personajes se extiende hasta la media hora, para proponer el problema, el asunto principal, en ese momento. Es cierto que tienes algunas escenas que te puedan dar alguna pista, pero muy sutiles. 
El repaso que le da la cinta a la educación ortodoxa es tremendo. La excusa de los niños educados desde la excelencia para un propósito determinado (generalmente político o ideológico) funciona. Son tiempos de contestación social, de crítica al Estado, de nacimiento de nuevas ideas y perspectivas sobre la vida, lo público, el poder, etc. 
Muy interesante es la influencia que en la oscuridad de la trama aportan las esculturas modernas que aparecen en cada momento. Es como el lado oscuro de la realidad, que de por sí es oscura.
Puede ser catalogada como una cinta de Serie B (por el productor, el metraje, los medios, la producción, presupuestos, etc.), en su versión de paranoia nuclear, pero, en realidad, es más una cinta social, con la exposición de circunstancias sociales: los nini de nuevo cuño, la liberación sexual, las nuevas feminidades, etc. El metraje que ocupa la parte de terror no es mayoritario en la cinta.
Me gusta por varias razones. Me gusta Losey, un director siempre sugerente, me gusta las películas británicas de serie B, me gusta la Hammer y la copia está rodada en un blanco y negro precioso que se ve perfectamente y se escucha realmente bien.
Indudablemente tiene algo de Orwell, y algo de Pink Floyd, algo de control social y experimento humano. La hipótesis es descabellada, pero funciona en la lógica de la trama. 
Y, sobre todo ello planea una pregunta principal -¿Para qué están los niños en esa especie de reclusión instructiva?- y varias secundarias: ¿Cuál es el propósito de dicha educación?, ¿Qué obtiene el poder con ello?, ¿Con qué propósito se han recluido a los niños en la isla?, ¿Por qué los niños siempre están fríos?, ¿Por qué tienen poderes difíciles de explicar?
Preguntas, éstas y otras posibles, que nos sitúan ante otros escenarios, éste sí verdaderamente aterrador.

viernes, 20 de junio de 2025

§ 3.898. Tu nombre envenena mis sueños (Pilar Miró, 1996)

Muy bien rodada. Gran guión (que procede de una novela de Jesús Leguina), excelente ambientación y diseño de producción, actores en su punto, aunque se echa de menos algo más de fuerza en los protagonistas.
Una gran película de intriga. Un thriller que se desarrolla en un período histórico muy peculiar de la historia de este país. 
Todo lo que tiene que ver con la organización de la película es verdaderamente notable: fotografía, producción, vestuario, etc. El reparto quizá se encuentra un poco falto de punch. Carmelo Gomez está bien, pero ni siquiera tiene la fuerza que proyecta en otras películas. Parece contenido, arrobado, como con el freno de mano puesto. Emma Suárez no da el perfil de pérfida mujer, perdida por los hombres que aglutina en torno a sí toda una pléyade de admiradores tan peligrosos como inocentes en el sexo. Tony Cantó bastante deficitario. Y Simón Andreu tan brillante como siempre.
Me ha gustado. Una de las últimas películas de una directora excelente.

§ 3.897. Fedra West (Joaquin Luís Romero Marchent, 1968)

 
Un guión previsible, aunque interesante. Con la gracia de ver al gran actor que fue Simón Andreu en un rol del oeste. No es exactamente un vaquero, sino  un señorito, el hijo de un terrateniente que llegado de estudiar fuera se encuentra enamorado de la segunda esposa de su padre. Una historia que bien podría tener varias vueltas y que es la adaptación del mito griego clásico. 
Es una trama que tiene algo más que ser del Oeste. Porque, del Oeste, en realidad, es sólo el ambiente, el contexto, el marco en el que se desarrollan las pasiones, conflictos y tensiones entre los vértices del triángulo amoroso y de tensión que se organiza.
Se deja ver, pero con matices. Gana la carga dramática de la historia, pero pierde la frescura de las livianas del Oeste de Marchent.
Los diálogos están pensados, y las escenas entre padre e hijo tienen potencia. El resto es un poco prescindible.
La copia que he visto se veía fatal. Mal de verdad, llena de grumos y manchas, aunque se oía perfectamente.

§ 3.896. La última señora Anderson (Eugenio Martín, 1971)

 
Una acercamiento al cine de suspense británico de toda la vida. Rodada en los exteriores de Londres, supongo que con personal británico, extras ingleses, decorados, escenarios, etc.
Los actores principales lo son: Carrol Baker, Michael Craig. A los que se les suma José Luís López Vázquez como inspector de policía de Scott Land Yard. No da mucho el pego, pero bueno. Es un actor consumado, capaz y brillante. No le pega porque sabes quién es, para el que le vea por primera vez puede ser que no detectase que no es británico.
Me ha gustado, pero se me ha hecho larga. Director todoterreno, capaz de obras verdaderamente interesantes, como Una vela para el diablo, Pánico en el transiberiano, o Una casa en la afueras, que creo que son sus tres mejores cosas.

§ 3.895. Nacida en el oeste (Budd Boetticher, 1959)

 
Una del Oeste, basica, de Boetticher, con un siempre atinado Randolph Scott y una guapísima Virginia Mayo.
Un tema más o menos de siempre. Colorida, bien narrada, estupendamente concretada y con los cánones, tópicos y clichés del género. No es de lo mejor de Boetticher, un director consumado experto en el Oeste y sus tramas. 
Lo bonito de las películas del Oeste es que... te las llegas a creer.
A esta película le falta un "malo malísimo" para funcionar, y quizá algo más de metraje. Parece un producto directamente dirigido a la segunda película de los cines de barrio, antes del éxito, que generalmente duraba más y era, más o menos, igual de buena o mala.

§ 3.894. El secreto inconfesable de un chico bien (Jorge Grau, 1976)

Pues no. No le salió bien a Grau. Un director de lo más interesante, con títulos verdaderamente potentes. Eran los años de la transición, de comedias ligeras, de cine sin pretensiones. Habían pasado los años duros y secos, y se imponía un cine más abierto, desenfadado, comercial. 
Los directores, entre ellos Grau, tenían que optar en continuar la fórmula de "Estudio 1", es decir, rodar historias trascendentes, con sentido, generalmente dramáticas, y sesudas, bien pensadas, espesas, o acudir a fórmulas más suaves, ligeras, quizá anodinas y menos trascendentes, pero que funcionaban mejor en taquilla, que interesaban más al público en general. Como es el caso. Pero no le salió. En absoluto. 
Pretende exponer un modelo de chico bien, lo que hoy sería un "nini" y sus problemas de adaptación a dos exigencias: las de un padre muy mayor enfrascado en su viudez y sus recuerdos, que vive enfrascado en una lucha permanente con la mujer del servicio y los amigos que viven la vida de manera desenfrenada y libre. Un caos mental para él, naturalmente.
Además, desde el punto de vista estilístico, acude a elipsis y sueños del protagonista que encajan mal en la dinámica expositiva.
Prescindible.

jueves, 19 de junio de 2025

§ 3.893. Exorcismo (Juan Bosch Palau, 1975)

 
Al calor de la moda impuesta por el éxito internacional (y sin precedentes) de la película de William Friedkin El exorcista (1973), la industria española no podía dejar pasar la ocasión de hacer una versión "celtibérica show".
El aliciente de Paul Naschy es, sin lugar a dudas, uno de sus valores. Me parece un genio. Como actor, como director, como creador, como cineasta. Alguien no suficientemente reconocido en España. Pasa mucho, no obstante, en este país, tan proclive a machacar a los que valen. Aristofobia lo llamaba Ortega y Gasset. 
La cinta reune todos los tópicos de la época: destape, fantasmagoría, algo de thriller, tensión, un punto de morbo y varias rubias de bote.
Me ha gustado. Me parece que dentro de las limitaciones esta bien rodada.

§ 3.892. Una extraña entre nosotros (Sidney Lumet, 1992)

 
Una película difícil de lograr. Interesante, con un cierto propósito pero nada sencilla de lograr. Intentar introducirse en los entresijos de una comunidad judía jasidica en Nueva York no es difícil. Me recuerda lo maravillosamente bien que escribía Isacc Babier Singer, un escritor verdaderamente maravilloso.
La lucha de perspectivas entre la joven y poco idealista policía, joven, guapa, brillante, poderosa y los judíos y sus costumbres es un buen campo para explorar contradicciones y sembrar escenas y  tramas muy cinematográficas. La riqueza discreta, las costumbres ancestrales, el seguimiento de un modo de vida cerrado y, por momentos, obtusos se enfrenta a un mundo cambiante, moderno, pragmático. 
Es interesante, pero tiene un gran error: el casting de actores. Melanie Griffith es una actriz limitadísima, con escasa capacidad de adaptación y nulas posibilidad de llevar a buen puerto este papel. El resto del reparto es de actores poco conocidos (para mi). James Gandolfini actúa en una película por primera vez.

miércoles, 18 de junio de 2025

§ 3.891. El 7º día (Carlos Saura, 2004)

 
Sucesos bien conocidos, especialmente por un extremeño, y singularmente por uno que estudió derecho, como es el que escribe, en aquellos momentos. El en aquel momento Fiscal Jefe de Extremadura, Jorge Sena, comentaba luego a los luíos de doctorado que el panorama en el pueblo era desolador, una auténtica carnicería, más propia del Far West que de un homicidio corriente y moliente. Unos hechos inconcebibles, inenarrables, de una España ancestral, de una sociedad primitiva, salvaje, pedestre, asilvestrada, por civilizar.
La cinta esta muy bien hecha, con un diseño de producción verdaderamente impecable. Aunque con alguna licencia de modernidad (los Juegos Olímpicos de Barcelona 92 en la tele, cuando el suceso acaeció  en agosto de 1990).
La película da calor. Quema al verla. Es impresionante. Todo un logro. Sabe transmitir perfectamente el ambiente cerrado, opresivo, oclusivo, maligno, perverso, insano, tumefacto, podrido...
El odio entre las familias está muy bien narrado. Las consecuencias también, los tiroteos, la carnicería. 
Es curioso, el gran Saura comienza con La Caza y termina con esta cinta, parecidas sino que tienen la misma raíz, el mismo fonema. Algo más que coincidencia.

§ 3890. Sisu (Jalmari Helander, 2022)

Pocas películas Finlandeses he visto. La verdad. Más allá de este señor y Aki Kaurismakis, no conozco más cineastas Finlandeses.
Y esto es una clara película americana en territorio Finlandés. Sin más. Un tipo "El renacido" o similar. Ensalada de violencia más o menos justificada.
El paisaje supongo que es original, quiero decir Finlandés, y la historia no tiene mucho que contar. Se sabe qué va ocurrir desde el primer minuto. La gracia está en el cómo.
Me ha gustado. Se puede ver. Tiene interés y está muy bien rodada. Con mucho color, mucha acción y siempre con una estética bélica muy bien conseguida.
No entiendo justificada la organización por capítulos de una película tan corta. Son 90 minutos. No necesita una organización tan singular. 
Es una película de acción típica, bien hecha y bien narrada.

martes, 17 de junio de 2025

§ 3.889. Coda (Claude Lalonde, 2019)

 
Una historia excelente. Una dirección delicada, estilizada, elegante, firme sin ser agresiva. 
Un tono perfecto para la temática que expone. 
Una reflexión sobre la profesional, sobre las últimas oportunidades, sobre la capacidad para automotivarse con un objetivo nuevo. 
El miedo al fracaso, el pánico escénico, el síndrome del impostor.
Me ha gustado mucho el casting. Patrick Stewart lo borda, absolutamente. Es magistral. 
Katie Holmes siempre la he tenido por "ñoña", como una actriz del momento, poco consistente y algo frágil. Pero nada de eso. Aquí tiene una fuerza insospechada.
Y el tercer pilar es Giancarlo Esposito, que también da con el tono perfectamente.
Me ha gustado el tono tranquilo, suave, sereno. La falta de histerismo, de energía desbocaba, no debe suponer falta de interés. Antes al contrario. Es un interés distinto, pausado.
Primera película que veo de su director, que es su ópera prima y su única película, por ahora espero.

§ 3.888. Ray (Taylor Hackford, 2004)

 
Pues muy bien hecha, muy lograda, emotiva y sofisticada. A quién le gusten los biopic seguro que ésta cinta le agradará. A quién le gusta la música de Ray, también. 
Jamie Foxx lo domina todo. Lo hace excepcionalmente bien. Se ha estudiado muy bien el papel: los movimientos de la cabeza, la forma de cimbrear el cuerpo, el corte de pelo, las gafas, el cabeceo cuando habla, la forma de encolerizarse, de caminar en su oscuridad, de sonreír con la boca abierta y ladeando la cabeza. Muy logrado.
Interesante es el papel de Quincy Jones, interpreta por Larenz Tate.
Está muy bien lograda cuando engarza determinadas canciones suyas con sucesos de su vida. Había titulado a las canciones con sucesos que le habían pasado.
También es muy interesante cómo el director enfatiza los aspectos de la vida ordinaria que tiene que ver con su ceguera.
También es muy bonito el tratamiento que hace de cómo perfilan y pulen su estilo. El papel de Ahmet Ertegun, el mandamás de Atlantic Records. El parecía un virtuosismo absoluto del piado, capaz de tocar cualquier cosa al piado. Blues, Jazz, Gospel, Rock and Roll, Strike, Bop, Bebop, etc. Un estilista y un prodigioso del piano.
Realmente está muy bien hecha, hacía tiempo que no veía un biopic tan bien hecho.

lunes, 16 de junio de 2025

§ 3.887. La vampira de Barcelona (Lluís Danés, 2020)

 
Supongo que el personaje femenino principal se encuentra arraigado en la imaginación colectiva, allí dónde habita el decrépito y depravado mundo de lo sórdido y lo delictivo. No será un personaje real, pero seguro que a él se le atribuyen todos los males de una sociedad. Sirve de chivo expiatorio de los pecados de una burguesía bienpensante que necesita encontrar un elemento que aglutine todos los males sociales. 
La cinta está verdaderamente bien hecha. El mundo sórdido está rodada en blanco y negro, mientras que las escenas que muestra a la burguesía catalana y sus vicios está rodada en color. Interesante juego.
Tiene evidentes niños a La carreta fantasma y a El séptimo sello.
Me ha gustado, es una mezcla interesante de Thriller periodístico y película de terror envuelto en una atmósfera fantasmagórica que acentúa los aspectos sórdidos y barriobajeros de la historia.
Me ha gustado, me ha parecido muy interesante. Director a continuar. Es su única película.Ha rodado varios documentales y una serie (supongo que algunos capítulos, etc.) para la televisión.

§ 3.886. Un rostro en la multitud (Elia Kazan, 1957)

 
Como todas las de Kazan es de una fuerza brutal, descarnada, salvaje. Auténtica y un punto depravada. Muestra los aspectos más sórdidos del sueño americano, en este caso en versión "country". Tiene algo de miedoso, de peligroso, de  antinatural.
Un hombre sin destino, solitario y borracho es encumbrado al estrellado de la radio por su naturalidad contando las cosas y cantando canciones populares. Pero el seguimiento de la masa esconde un peligro, evidentemente: la potencia de encumbrarse en un líder social. Un líder social que pueden convertirse el político. Y las cosas ya no son como antes. Son diferentes. 
El peligro de un líder magnético es la capacidad del entorno para manipularle, o la de él de perder el sentido de todo lo que le rodea. 
Un reparto excelente. Andy Griffith en su primer papel. Una guapísima Patricia Neal, natural y sedosa, fina y deslumbrante. Les acompaña Anthony Franciosa, Walter Matthau y Lee Remick.
La película es prodigiosa, toca temas muy actuales: el poder de los medios, la capacidad de la televisión para manipular a la sociedad y el rol de los medios como meros instrumentos de la manipulación social.
La historia, y el guión, es de Budd Schulberg, un auténtico príncipe de Hollywood, un hombre de la industria que pertenecía a la aristocracia del cine. Leí de él una biografía absolutamente prodigiosa, que tengo que volver a leer algún día.

domingo, 15 de junio de 2025

§ 3.885. Sundown (Michel Franco, 2021)

 
Bueno. Una película algo diferente. Una reflexón soibre el ópaso del tiempo, sobre la vida, sobre la depresión y el abandono de uno uno mismo. Sobre la pareja y sobre las relaciones humanas entre adultos que se quieren y se cuidan, pero que no llegan a congeniar.  El paso de los años, la culpa, lo no dicho, lo que hubiera querido decir y no se dijo, lo que deberías haber dicho y no dijiste. En definitiva, la dificultad de congeniar con el paso de los años. 
Pero también puede verse como una utopía, como la proyección natural de un sueño recurrente: empezar de nuevo en otro lugar, sin ataduras y con el propósito de volver a vivir de nuevo la vida que no viviste porque estabas en otras cosas: ganando dinero, trabajando, atendiendo a familiares, etc.
Una dirección bien estructura que acompaña al guión, algo errático y por momentos no coherente con el propósito del discurso. Rodada en sitios reales de playa en México, no es  una historia dramática de las clásicas. El drama no es por los acontecimientos, sino existencial del personaje y de sus circunstancias. Un drama que viene del interior, no del exterior. La vida cambia porque el personaje cambia, no porque acaezcan situaciones que le impulsen a modificar su comportamiento.
Me ha gustado, sin más.

§ 3.884. Cabalgando hacia la muerte (El Zorro) (Joaquin Romero Marchent, 1962)

Muy colorida, repetitiva (hace varias de la serie, insiste en la fórmula desde El Coyote) algo amanerada, bien trabajada y con un decente diseño de producción. Pero sin (demasiada) vida, acartonada y caminando por sendas trilladas. Esta bien rodada, pero por momentos cansa y aburre, no se comprende porque falta guión y estructura.
Se deja ver, pero nada más..

§ 3.883. Vals para un asesino (Jesús Franco, 1977)

 
Una más de Franco. Rodada en Lo Pagán (Murcia) y otros pueblos (que creo de la zona), de corta duración, poco interesante, y rodada como siempre, a todo correr, con prisas, con un guión pretencioso, algo enrevesado, y tirando a mediocre. Pocos medios, metraje muy moderado y un guión oscuro, confuso, y carente de ortodoxia interna. Un lio de argumento, una interpretaciones desfasadas y un resultado final poco desarrollado. Como se nombran varios pueblos, y se rotula en la cinta, llego a pensar que la película la promocionaron esos pueblo con la idea de hacerse un nombre en el nombre de los pueblos de verano de finales de los setenta. Actúa el propio Franco de hippie de Ibiza que dejó de ser hippie pero no de ser paliza.
De lo más mediocre de Franco.

§ 3.882. El expreso de Andalucía (Francisco Rovira Beleta, 1956)

 

Junto con Hay un camino a la derecha (1953) y Los atracadores (1962) forma parte de la trilogía del delito de Rovira Beleta. Ya he visto las otras dos. Son buenas, interesantes, y por momentos portentosas, pero ésta quizá sea la mejor de las tres.
Con un punto de realismo a la española y con algo de las clásicas obra de cine negro americano. Una mezcla de los más interesante, con un metraje civilizado, que se ve como un suspiro y que funciona a la perfección. 
Un reparto muy de la época, en donde destacan: Jorge Mistral, Marisa de Leza, Mara Berni, Vicente Parra y Carlos Casaravilla son los actores principales.
Tensa, dramática, con su mensaje asociado, qué duda puede caber al respecto, pero con soltura y garbo. Me ha gustado mucho. La historia esta perfectamente hilada, sorprende lo realista del desarrollo y lo bien que funciona todo. Me ha gustado mucho.

martes, 10 de junio de 2025

§ 3.881. La leyenda de los ocho samuráis (Kinji Fukasaki, 1983)

Fukasaki es el director de la segunda unidad de la películas "Tora! Tora! Tora!" de 1970 cuyo principal director fue Richard Fleischer. Una de las mejores de guerra naval y todo un clásico del cine de contiendas. A pesar de ser muy conocido y prolífico no había visto nada de él en solitario. 
Tiene una mezcla de tradición japonesa de los samuráis con elementos fantásticos, mágicos, míticos narrados en un tono ligero, nada dramático como impone Kurosawa o Kobayashi por ejemplo, con color, emociones de el "capa y espada" japonés, es decir sus Samuráis, una estética más moderna con aspectos claramente teatrales y una música que podría incorporarse a cualquier película similar occidental.
Un fondo de tragedia de las de siempre -madre e hijo, poder y tiranía, rebelión y tradición- envuelve la trama.
No me ha gustado especialmente. Entretiene, se deja ver, es visual, colorida y entra por lo ojos, pero siempre que veo cintas japonesas me fijo en los estándares impuesto por Ozu, Mizoguchi, y los citados, y esta cinta no responde a esos parámetros. Inclusos las peleas a espada aquí son rápidas y eléctricas, mientras que en los clásicos japoneses la pausa y la calma forma parte de la pelea, siendo mucho más intensa y dramática.
Aunque seguramente ambas formas de representar estos duelos no responden a la realidad, a la realidad histórica en sentido estricto, como ocurre, por ejemplo, con los duelos del Oeste, es más interesante la forma clásica.
No me ha parecido una gran película, demasiado larga y por momentos deslavazada. He perdido el interés y la concentración en varios momentos.

lunes, 9 de junio de 2025

§ 3.880. La bruja (Robert Eggers, 2015)

 
Primera película de un director del que he visto, con ésta, todas sus cintas, cuatro en total. Ésta era su debut cinematográfico. 
Cuatro películas en nueve años. Ninguna de ellas me ha llegado a calar del todo. El Faro la entendí muy pretenciosa. El hombre del Norte, algo trillada. Nosferatu, sí me pareció una excelente versión.
Esta debe ser un cuento gótico alemán o americano, de finales del XIX supongo. Aunque el guión es original del propio director y no dice la ficha técnica que esté basado en ningún cuento o relato. Es, por tanto, un guión original.
Creo que es una película muy vista, con multitud de aficionados que la veneran y la tienen por referente. Funcionó bien en taquilla y la crítica no la despedazó.
No me ha parecido una obra tan colosal. Está bien hecha, tiene su interés y se deja ver, pero de ahí a pensar que es una maravilla, hay un trecho. Un trecho muy largo.
La sensación de angustia, de inmediatez, de sorpresa, de desamparo se arraiga fácilmente, pero no trasciende lo epidérmico. No es que se superficial, es que no es profunda.
El ideal del bosque embrujado es revisado con alegría. Sí es cierto que las tomas aliare libre son espléndidas, una excelente fotografía.
No me ha llegado. Ninguna de las cuatro de él me han parecido rotundas obras. Ésta, en concreto, me parece la peor de las cuatro.
El diablo representado por animales, conejos, cabras, etc. Una organización clásica del mal, una iconografía de siempre.

domingo, 8 de junio de 2025

§ 3.879. Resultado final (Juan Antonio Bardem, 1997)

Última cinta del indiscutible gran Director que fue Bardem.
Y ya sabes lo que leen este blog la idea que tengo sobre la última película de los grandes directores. En líneas generales no suelen ser buenas. Más bien suelen ser malas. El genio creativo se acaba, los recursos económicos no quieren arriesgar con directores mayores, la apuesta por la novedad es una pulsión grande.
La idea no es mala. Su desarrollo quizá no tanto. Pero las críticas que recibió la película sepultaron al director y a la actriz principal, Mar Flores.
En Filmaffinity recibió un 2.1 de media, de 688 votos. Es una barbaridad de resultado. Además las 8 críticas redactadas la fustigan de manera inmisericorde. En IMBd la media sube al 3.3, y en Letterbox no tiene suficientes notas para hacer una media, pero las votaciones que se aprecian son también muy deficientes.
Curiosamente la crítica que valora bien la película lo hace con verdadera pasión e interés, entendiéndola como una obra maestra incomprendida por la crítica y el público.
No creo que sea para tanto. No es, desde luego, una obra maestra. No es ni siquiera comparable a Muerte de un ciclista o Venganza. Ni siquiera llega, a mi juicio, a Los pianos mecánicos.
La idea es buena, el tema estaba de moda, el revisionismo crítico de al transición desde el punto de vista personal y crítico, aportando una melancólica visión retrospectiva siempre interesante. 
La excusa es el cáncer de útero que padece una mujer que vivió los acontecimientos de la transición política española en primera persona. Luego triunfadora en la vida, casada y con hijos. Lo que podríamos considerar una vida plena y llena, que se ve enturbiada con la enfermedad, que ella atribuye a su marido, que es, básicamente, un putero.
Es, básicamente, un ajuste de cuentas de los comunistas con el PSOE. Supongo que a los votantes del partido hegemónico en el país no les gustará la película. 
La idea es brillante de verdad. Pero falle en su ejecución. No sólo porque Mar Flores no da la talla (aunque he visto interpretaciones femeninas peores), sino porque tiene fallos de guión y de continuidad evidentes. 
Además, las reflexiones sobre cómo se hunde el comunismo en la transición y toma el poder el PSOE siempre son dialogadas, y más allá de algunas escenas gráficas, tiene un peso intelectual impropio de las relaciones humanas. Además, el hecho de colocar escenas de documentales parece querer contar la historia únicamente desde un punto de vista. 
Que hubo una élite más o menos acomodada en el franquismo que apoyaba sin decirlo abiertamente al comunismo y su lucha contra el régimen y luego, de la noche a la mañana se integró en el PSOE es una evidencia. Y eso molesta al régimen bienpensante.
Sí es cierto que el adoctrinamiento es cansino, y lastra la película de manera determinante.
A mi no me ha parecido tan mala película. Desde luego, si en vez de ser Mar Flores es otra actriz más consagrada, y si el director de cine (alter ego del Director) hubiese sido alguien más pujante la cinta hubiera sido un éxito.
No me parece que sea tan mala película.

§ 3.878. Comando de asesinos (Julio Coll, 1966)

Inspirada evidentemente en las películas de 007, pretende darle a la trama la misma mezcla de comicidad y seriedad en ambientes veraniegos, de vacaciones, elitistas.
Protagonizada por Antonio Vilar, Letícia Román y el peculiar Peter van Eyck, inconfundible en sus poses y sus ademanes. 
Como era de prever a veces la trama sirve como excusa para mostrar una ciudad, en este caso Lisboa, paseando en coche por sus calles.
La falta de medios y de guión hacen fracasar a la cinta, que se puede ver, pero que es casi de las peores que he visto de Coll.
No da con el tono. Tiene algo, pero no funciona. Es algo pasada y aunque tiene un metraje civilizado, 83 minutos, por momentos de hace pesada.
Me llama la atención que el Profesor malvado se llama Zandor, que lo entiendo como una derivación del Profesor Zaroff, de "El malvado Zaroff" la extraordinaria película de 1932 de Irving Pichel y Ernest B. Schoedsack.
Se puede ver, con esfuerzo. Sin más.

sábado, 7 de junio de 2025

§ 3.877. Apuestas contra el mañana (Robert Wise, 1959)

Otro Wise prodigioso. Qué forma de hacer cine, qué maravilla, cómo exprimir los argumentos, qué capacidad para presentar a los personajes, qué dominio del escenario, de los planos, de la luz, de las emociones. Qué cosa más divina.
De Wises he visto prácticamente todo. Me queda dos o tres películas que no están editadas en dvd y que tampoco pueden verse on line.
Cine negro, atraco a un banco, planes perfectos que salen mal, apuestas de caballos, hombres despiadados y deshumanizados, gánsters de cartón piedra, chicas guapas cuando todavía no se ha quitado el maquillaje.
Me ha gustado mucho. De la filmografía de Wise que recuerdo es la más negra de todas las películas suyas. Tiene otras duras, pero no de corrupción policíal y atracos.

§ 3.876. El desierto de los Tártaros (Valerio Zurlini, 1976)

Leí la novela y me gustó mucho. El paso del tiempo, la madurez, las ilusiones perdidas, el declinar de la vida, la pérdida de la inocencia, de la alegría, del impulso vital.
Me pareció un excelente relato, incluso podría calificar de ensayo. No exactamente, pero podría leerse con lápiz y papel, reflexionando con ella a medida que avanzas en su lectura.
La película es un goce de los sentidos. Me ha parecido árida y desangelada, sin corazón. emotiva y triste. Una gran obra, muy bien hecha, delicada y puntillosa.
La aristocracia de la guerra, con una puntillosidad, con una distancia del mundo real, lejano de los valores humanos, cercado por tradiciones, saludos, reverencias y aspectos superfluos que no sirven más que para retroalimentar al propio sistema militar.
Además de una reflexión sobre el paso del tiempo, sobre la tranquilidad del reloj, sobre la decrepitud y la vida, puede leerse como un ensayo sobre la inutilidad del ejercito, sus propósitos y su funciones.
Un tema que también trata son las ilusiones, y hasta qué punto éstas puede haceros perder la razón, el criterio y la cálmales. Ilusiones personales y  vitales, e ilusiones reales, convertidas en alucinaciones. La alucinación como derivación de la ilusión.
La inutilidad del paso del tiempo sería el lema de la novela y la película. 
El reparto es espectacular: Vittorio Gassman, Helmut Griem, Francisco Rabal, Fernando Rey, Jean-Louis Trintignant y Max von Sidow. Casi nada. Es cierto que los dos españoles interviene poco.
Dicen que fue un proyecto que abrazó Luis Buñuel pero que nunca llegó a poner en pie.
Primera película que veo del director, que me ha parecido un gran artesano. Domina el tiempo, los escenarios, los actores, los planos, encuadres y demás.

§ 3.875. Hay un camino a la derecha (Francisco Rovira Beleta, 1953)

La delincuencia como camino y esperanza vital. Una vida normal, un trabajo normal, una esperanza normal. Que se ve alterada por la pérdida del empleo, la precariedad económica, la falta de esperanza y de futuro.
Un tema muy clásico, bien rodado, bien narrado, con una evidente carga moral acorde al ideario del régimen, naturalmente.
Tiene un punto de neorealismo italiano, por la norma de presentar los personajes, de rodar, de mostrar la realidad, por la forma de abordar la temática.
Pertenece a la trilogía del delito del director, junto con El expreso de Andalucía (1956) y Los atracadores (1962).
Muy bien Francisco Umbral, verdaderamente magnífico, además de un gran actor guapo de verdad. Un hombre verdaderamente guapo. En ese momento tenía 27 años y era una de sus primeras películas, la décima, más o menos. Otro actor que trabajó como un animal, a lo bestia, a destajo. Seguramente ganando un buen dinero, nada que ver con lo que se gana ahora en el cine, pero un buen dinero.
Julita Martínez es la protagonista. Una actriz clásica, de las de siempre, nacida en 1931, todavía viva, y que trabajó muchísimo, tanto en cine como en teatro y el televisión.
La cinta va como anillo al dedo al código moral de la época. Vida con pocas esperanzas laborales, malas influencias de amigos y familiares, crimen (supuestamente) perfecto, delito, pena, redención, perdón, esperanza. 
Funciona, es interesante, se ve perfectamente y está muy bien rodada. Buen director, con oficio y talento.

§ 3.874. El ojo en la oscuridad (Umberto Lenzi, 1975)

 
Un Giallo italiano clásico rodado en Barcelona, con una simbología clásica, un método ortodoxo y una técnica depurada. Un cineasta de siempre, que sabe hacer lo que tiene que hacer y lo hace. 
Un poco lo de siempre, pero es que el género no da para más. la originalidad no es infinita, y es un género en donde abundan la mediocridad. Es, en realidad, un género mediocre. El drama, los históricos, dan para más. Parecen dar para más.
Un thriller clásico en donde lo peculiar es saber quién es el asesino y para qué hace lo que hace. Lo de por qué lo hace, es casi lo de menos. Porque no tiene explicación.
Excusa para ver algunos edificios peculiares de Barcelona, alguna chica guapa y poco más.
De las cuatro películas que he visto de Lenzi, es la menos brillante. Es la más vulgar.

viernes, 6 de junio de 2025

§ 3.873. Top gun: Maverick (Joseph Kosinski, 2022)

 


§ 3.872. María, matrícula de Bilbao (Ladislao Vajda, 1960)

Cualquier comparación con "Capitanes intrépidos" (Victor Fleming, 1937) es una ofensa. Por más que la trama tenga alguna conexión o que ambas se desarrollen en un barco y sirva éste de enseñanza vital a un niño que evoluciona en el viaje de forma más deprisa y con más solvencia que de cualquier otra manera posible.
Los líos en los que se mete el niño son los propios de la edad, de la edad de aquellos años de aquellos niños.
Seguro que se pretendió con una forma de mostrar un camino de superación a los jóvenes, la época era propicia a ello, y en algunos momentos se muestran ciudades, barcos, una portaviones norteamericano, etc.
Bueno. Se puede ver. Pero no tiene dos visionarios. Tiene un cierto matiz antiguo, pasado de moda, fuera de estos tiempos. Es una película que ha envejecido mal, muy mal. Que no se puede ver con los cánones actuales, hay que verla en su tiempo y lugar. Como muchas otras cintas, por otra parte. 
Vajda es un artesano que sabe lo que hace.

§ 3.871. Ana y los lobos (Carlos Saura, 1973)

Interesante película, peculiar, algo mórbosa, extraña y, a la vez, tierna en su singularidad.
No es exactamente una crítica social. No pretende exponer diferentes tipos de 'personas' y asociarlas a una determinada conducta, a un tipo de comportamiento, a un tipo social, cultural o político. Es evidente que tras esa aparente simplicidad se esconde una crítica dura a la burguesía española desocupada y hacendada. A ese tipo de sociedad incapaz de crear, que vive de las rentas y que siempre añora tiempos pasados porque los cree mejores. Cualquier cambio en ese status quo se interpreta como una agresión, no como una evolución.
Son personas a las que le ocurren cosas en un ambiente cerrado, claustrofóbico y asfixiante.
La bondad de la institutriz es incapaz de sobreponerse a la rareza del espacio en el que se desenvuelve. Un ambiente tóxico, a veces morboso, a veces incluso erótico y sexual.
La pasión sexual que levanta la institutriz en todos los varones de la casa es peculiar. Cada uno lo vive de diferentes manera, pero todos los hermanos experimentan la pulsión de diferente manera. A veces callada, a veces con palabras, a veces con gestos. 
Interesante reflexión sobre la madurez sexual y lo perturbado que puede ser un ambiente nuevo cuando se introduce una pieza no prevista en el tablero.

jueves, 5 de junio de 2025

§ 3.870. Fantasía... 3 (Eloy De La Iglesia, 1966)

Debut cinematográfico del director que, a mi juicio, mejor representa el cine en la transición política española. Irreverente, libre, transgresor, creador, cineasta, y muchas cosas más, algunas al día de hoy proscritas por la ley e incluso mal vistas por la sociedad. Y no me refiero a su condición o gustos sexuales, sino a otras cosas, fáciles de deducir por cualquier lector.
A mi me encanta. Tiene obras magnificas, llenas de creatividad, de energía, de burla y coña, de miedo y sagacidad. Desde esta, que me parece su peor película en 1966 hasta "Los novios búlgaros" que fue su despedida en 2003, aunque desde "La estanquera de Vallecas" en 1987 no había rodado nada para la gran pantalla, sí algo para la televisión en coautoría.
Tres historia distintas, tres cuentos infantiles, tres cortometrajes distintos, de fantasía de época y de misterio.
No me ha parecido gran cosa, no me ha motivado mucho. Nada que ver con sus siguientes obras, mucho más creativas y brillantes.

§ 3.916. Beltenebros (Pilar Miró, 1991)

La vi hace muchísimos años, en Cabueñes, en Asturias, en un campamento juvenil que organizaba el Injuve (el Instituto Nacional de la Juventu...