domingo, 25 de septiembre de 2022

§ 2.768. Nadie quiere la noche (Isabel Coixet, 2015)

La otra película que vi de ella, "La vida secreta de las palabras" (2005) me pareció fascinante. Delicada y muy cuidada, intimista y muy sincera. Profunda y redonda.
Y esta es también magnífica, con una Juliette Binoche espléndida, un para mi desconocido Rinko Kikuchi, y la presencia potentísima de Gabriel Byrne aunque con muy poco metraje para él.
Aventuras de una mujer culta y rica en la tundra del ártico. Paisajes bellos, condiciones de vida extremadamente duras, y una historia de amistad. Una película que pudiéramos denominar "femenina", por la presencia totalmente protagonista de la mujer, que no se sabe muy bien qué determinación la lleva a viajar al ártico y buscar a su marido que estaba buscando una camino para llegar al polo norte. Quizá no fuese el amor por su marido, sino su amor propio, quizá tuviera una conciencia clara de su valía y de sí misma. En todo caso la mujer jugó un papel muy importante en las expediciones árticas y su marido es reconocido como el conquistador del Polo Norte.
El tono intimista le va bien a la cinta, pero hay algo que no funciona del todo bien. Es una cinta difícil de ver, que no es para todo el mundo. No es exactamente un melodrama, sino una cinta íntima y personal, recogida y sensible, que es difícil cuadrar con la problemática de aventuras. 
Me ha gustado. No tanto como la otra, pero me ha parecido muy interesante.

jueves, 22 de septiembre de 2022

§ 2.767. La vida de Émile Zola (William Dieterle, 1937)

 

Versión clásica del asunto Dreyfus, de los años treinta. Conciencia social, valor para contarlo, y genialidad para narrarlo bien, compromiso personal y bondad.
Un gran hito que ley hace muchísimos años. Compré el librito en una librería de Segovia, me acuerdo perfectamente. Me interesó mucho en su momento, pero no tanto por el antisemitismo del fondo del asunto, sino por producirse dentro del ejército.
Refleja muy bien las penurias económicas en las que vivía la bohemia parisina a finales del XIX. Émile vive con un tal "Cezanne", que supongo que es Paul Cezanne.
Narra muy fácilmente el tránsito de la pobreza a la riqueza, de no tener para comer a nadar en una cierta riqueza. Y la vuelta al compromiso consigo mismo y con la sociedad la volver a escribir sobre temas comprometidos, el caso Dreyfus.
El compromiso con la verdad vuelve, aunque la verdad, quizá nunca se fue.
Me ha gustado mucho, pero es que Dieterle es una auténtica barbaridad. Un directorazo.

miércoles, 21 de septiembre de 2022

§ 2.766. La conspiración (Robert Redford, 2010)

 

Su particular visión sobre un hecho muy conocido, que necesariamente tuvo que conmocionar al recién creado país. A mediados y finales de los años ochenta estaban de moda las cintas sobre la guerra del Vietnan, aportando cada director americano su visión particular. Parece que Redford recupera historias que le interesaron en su infancia. Es una hipótesis seguramente no descabellada.
Más que el estudio de la situación, de la deslealtad o del magnicidio mismo lo que se debate en el asunto es si las garantías procesales y materiales de cualquier justiciable también son aplicables en supuestos como éste. La inconstituionalidad del sometimiento de un civil a un proceso militar. "Que la pena no te haga perder el buen juicio".
También es la historia de Mary Surratt, la mujer acusada de dar cobertura en su casa a los conspiradores, finalmente considerada culpables y condenada a la pena de muerte, que se ejecutó y no conmutó, siendo la primera mujer condenada a la pena capital.
Es interesante la cinta, bien rodada, con una escenografía interesante, equilibrada y entretenida. Pero le falta algo. Tiene intriga, pasión, fuerza, y la historia para un no americano que conoce esa realidad desde muy lejos y no siempre bien es instructiva.

martes, 20 de septiembre de 2022

§ 2.765. Los héroes también lloran (George Seaton, 1956)

De Seaton me encantó "Espía por mandato" (1962), algo menos otras cosas: Sitiados (1950), Silencio de muerte (1963), 36 horas (1965) y Aeropuerto (1970).
Una historia de amor como mandan los cánones en un conflicto bélico. Con un William Holden, y una Deborah Kerr absolutamente exultantes, acompañados de una eficaz, como siempre, Thelma Ritter, en un papelazo impresionante, verdaderamente emotivo.
Me ha encantado la película. Naturalmente es para una época muy especial y un momento muy especial, pero tiene todo lo que una historia puede tener.
El planteamiento varonil el militar y la dulce viuda de guerra que, en realidad, no sabe por qué está allí. Es una combinación que puede salir fatal, pero es que con estos dos monstruos de la interpretación es difícil no construir una historia interesante. El tópico quiere facilitar la dulzura del marine, pero, a lo mejor, lo que se produce es el endurecimiento de la chica. Y en el amor también hay ese tipo de sentimientos.
Ella se enamora de su rudeza, de su seguridad, de su empaque. Él de lo que ella representa, de su ternura, de su belleza. Me parece un peliculón excelente. Me ha gustado mucho la música de Victor Young, que me recuerda a "La colina del adiós".



lunes, 19 de septiembre de 2022

§ 2.764. La exótica (Sam Wood, 1945)

 

Una de aventuras con Wood como director, Cooper y Bergman como actores no puede salir mal. Y, sin embargo, no tengo a esta película por muy conocida o famosa. Flora Robson, con la cara pintada de negro, completa la trilogía principal. 
El papel de la joven vengadora de un pasado que ni conoció ni padeció está algo forzado en Bergman, a veces con poses algo desentonadas, un punto histéricas y, a mi modo de ver, fuera de lugar. Una interpretación algo forzada, con una cierta superficialidad y pretendiendo una frialdad que no se corresponde con lo que el personaje demanda: una mujer fría, calculadora, y con un propósito muy determinado de conseguir su objetivo.
Cooper sin embargo sí creo que da el tono más que adecuado. Cierto que parece un papel hecho para él, duro y tierno, americano desde la raíz a la cepa. Además el papel, como en la realidad, representa a un señor más mayor que la chica.
Ella naufraga, radicalmente además. Con una actriz más 'racial', más potente, más exuberante en su belleza, con esas caras que parecen decir "sexo" en todo momento quizá hubiera sido un papel más redondo. No se necesitaba tanta actriz y hubiera bastado con una mujer menos dramática.
El guión está bien dosificado, narra con pausa y determinación. Aunque es larga -135 minutos- se deja llevar, porque no se hace pesada, y las cintas tan largas suelen sofocarme. Tiene un gran virtud, esconde muy bien qué va a pasar, no es previsible y aunque puedes imaginar por dónde va a discurrir no lo tienes claro en ningún momento.
Un drama gótico, costumbrista con tintes melodramáticos subido de metraje y pretensiones de gran producción que no cuaja del todo bien. 
De Wood he visto varias cosas: Una noche en la ópera (1935), que no me gustó demasiado, El orgullo de los Yanquis (1942) que la vi en el año del desprendimiento, y ¿Por quién doblan las campanas? (1943) que recuerdo haberla visto hace muchos años y que me encantó, además de tenerlas por un éxito realmente potentísimo. Quizá esta pretendía que la química de los mismos protagonistas funcionase igual, y, desde mi punto de vista, no ha sido así. El resultado no es ni parecido, pero bien es cierto que cuando vi la cinta era una época en que adoraba a Hemingway y, además, acababa de leer la novela.

domingo, 18 de septiembre de 2022

§ 2.763. El noveno día (Volker Scholöndorff, f2004)

 
Las películas dogma, documentales, testimonios, veraces, auténticas... Pues me parecen un castañazo. Sencillamente. Quiero mentiras, ficción, embuste, quiero que lo que veo en la pantalla no sea real, quiero que me engañen, que me mientan, que me tomen el pelo, que le falsifiquen la realidad, quiero mentiras en mi vida cinematográfica. Y esta película es, literalmente, lo contrario, es verdad, auténtica y limpia, sincera y literal. Es, simplemente, lo que ocurrió. Y no me gusta verlo. Sé que ocurrió, pero no me gusta verlo, como no me gusta saber cómo está mi ojo después de seis operaciones de desprendimiento de retina. Sé que no veo bien, pero no quiero saberlo. No puedo con todo el peso de la maldad del mundo.
Director desconocido para mi, es la primera película suya que veo. El actor principal es lrich Matthes de quien sólo he visto "El hundimiento" (Oliver Hirschbiegel), también de 2004, excelente cinta, mejor que esta.
El culto católico en la Alemania nazi siempre ha estado sujeta a controversia, a veces incluso muy alevosa. Y esta película pretende mostrar parte de ese camino, de esas circunstancias, de esa realidad.
Interesante cinta, polémica supongo, pero realmente impactante.

jueves, 15 de septiembre de 2022

§ 2.762. La llave (Carol Reed, 1958)


Lo de William Holden es escandaloso. Es un actor de una pieza. Sobrio, varonil sin ser pedante, galante sin ser pesado, se mete en el papel sin ser histriónico, o amanerado, guapo sin ser un galán de rompe y rasga. Mi actor favorito, sin lugar a dudas, el más completo, el más capaz en todos los terrenos, capaz de hacer de marido y de amante, de hombre de guerra y de malo del oeste. Probablemente solo tenía un enemigo, él mismo y su lucha de años contra el alcohol, que le arruinó la vida, le estropeó y acortó la carrera y le acortó la existencia. Elegía bien sus papeles, era versátil, jugaba en la liga de la crítica y también en la del público.
Sofia Loren también era una actriz muy dotada, además de extraordinariamente bella.
De esas bellezas italianas absolutamente rompedoras, de una belleza racial, con un punto animal que tanto gusta a los hombres de cualquier raza, condición o extracción social. Pero también era una gran actriz, suave de formas y muy dotada para hacer papeles dramáticos. No tanto quizá para la comedia o para otros géneros más ligeros. Siempre la he considerado una gran actriz.
Carol Reed probablemente sea siempre recordado por El tercer hombre (1949), y en menor medida por El tormento y el éxtasis (1965), para mi una obra de arte absoluta y que me gusta más que el tormento y el éxtasis. Pero también tiene otras cosas muy notables: Larga es la noche (1947), Se interpone un hombre (1953), Trapecio (1956), la muy lograda Nuestro hombre en la Habana (1959), y la más normalita El precio de una muerte (1963). Un director de prestigio, muy británico en sus formas y en sus tramas, comprometido con su tiempo y su país.
Esta cinta me gusta. Puede situarse en la línea media de películas de su tiempo, calidad y buena factura, buen metraje, atrezo adecuado y gran selección de actores.

§ 3.405. Tristeza de amor (Eduardo Mallorquí, 1986)

  Recuerdo algunas noches cuando se emitía la serie y me quedaba a ver algún capítulo. La música es preciosa, la canción en realidad.  Vista...