martes, 17 de septiembre de 2024

§ 3.497. Los placeres ocultos (Eloy de la Iglesia, 1977)

 

Cine que sólo se explica por la transición. Una ola de libertad inundaba el país y temas que hasta entonces estaban soterrados aparecen, entre ellos el que narra esta historia, que tiene su continuidad con El Diputado, que es mejor que ésta, se mire como se mire. Eloy era un director abiertamente homosexual, él mismo hacía profesión de fe sobre este tema. Es natural que tratase estos temas.
Impresionante Simón Andreu, como siempre. Bien Charo López. Un buen guión, y un cineasta descomunal, con un dominio soberbio de la cámara, de los recursos fílmicos y de todo lo que tiene que ver con una película. Uno de los cineastas más importantes de este país, que no sé si tiene el reconocimiento que merece, que es mucho.

lunes, 16 de septiembre de 2024

§ 3.496. Nuestra casa en Indiana (Henry Hathaway, 1944)

 

Una cinta "blanca", familiar, tierna, casi juvenil o infantil. Lejos d los temas negros y del oeste en los que tan bien se desenvolvía el maestro. Bien narrada, con tino, suave, de aprendizaje, de enamoramiento, vitalista y emotiva. Un poco sosa, lejos de sus mejores obras. Pero entretiene. No sé a qué cinta me recuerda, Las verdes praderas de Wyoming, creo recordar.
Adoro a Henry Hathaway. Es uno de mis ídolos. Me encantaría tener toda su filmografía. La verdad es que tengo bastantes películas suyas, más de 40, exactamente 49. Me faltan unas 15 para completarlas todas, pero es muy probable que no pueda conseguirlo. Básicamente porque una se han editado en CD en España. Las que me faltan las he buscado veinte veces y nunca he tenido suerte. Ni en Amazon, ni de segunda mano, ni en Ebay, ni Fnac, ni otras similares.

§ 3.495. Los reyes del mambo tocan canciones de amor (Arne Glimcher, 1992)

 

La vi hace más de treinta años en el cine. Me encantó. Me pareció brillante, fresca, distinta, verdaderamente espectacular. Y, la verdad, no ha perdido nada de frescura, sigue teniendo esa chispa que sólo tienen las cintas intemporales. 
La música es de escándalo. Me ha encantado. Es lo que consideraría una película redonda, muy bien hecha. Es la tercera vez que la veo completa y las tres veces me ha gustado mucho.
Los Reyes es una cinta verdaderamente bonita. Me encanta. La música, el ambiente, el ritmo las pausas, la escenografía, todo. 
Debut internacional de Antonio Banderas y consolidación de Armand Assante. El contraste de personalidades entre ambos es lo mejor de la película, un torbellino, un volcán y huracán frente a un hombre reflexivo, tranquilo, sereno, pausado.
No sé muy bien qué le puso pasar a este director, que tiene otra cinta interesante, Causa Justa (1995). No son dos grandes cosas, pero se pueden ver, tienen su tiempo y se dejan ver. Sólo todo otra película completa más.

domingo, 15 de septiembre de 2024

§ 3.494. Grandes esperanzas (Mike Newell, 2012)

 

La otra versión que vi hace muchos años era la de Cuarón, de 1998, con el mismo título. Y me encantó. Ésta tamébn ime ha parecido fabulosa, incluso mejor. Con un diseño de producción verdaderamente brillante, perfectamente trabajado: ropas, casas, escenarios naturales, pelo, muebles, etc.
Me ha encantado el color, el tratamiento de la fotografía y los planos que compone la acción. Un color muy realista, sin llegar a ser chillón, con rojos muy rojos, verdes muy verdes, etc.
No aprecio variaciones sobre la historia que conozco. Básicamente es la misma, en todas las tramas centrales. El reo, la niña, la sociedad británica, la educación, etc. Ésta tiene aspectos más fantásticos, en la madre y sus trajes, el mismo vecindario y el castillo, etc.  Es el mismo cuando pero contado de otra manera. Más maduro, menos edulcorado, más adulto, más trascendente. Más real incluso. El de Cuarón era más infantil, un cuando más "cuento". Esta versión por momentos es trascendente, con mensaje, más profunda. Pero a medida que avanza la cinta la historia va disipándose poco a poco. A mitad de la película has perdido el hilo principal, parece carecer de continuidad, de propósito. Es como si contasen dos historias diferentes, distintas.  Un desarrollo quizá más propio de una serie que de una película. Supongo que sobre esta historia se habrán rodado varias series. Da para ello. La historia del reo, de la casa con la niña, el caballero, la del abogado que ejerce de tutor. Seguro que hay varias series sobre el asunto. Me ha gustado pero quizá sea más redonda la de Cuarón. 
De Newell he visto solamente tres películas más. El despertar (1980) y Donnie Brasco (1997), la primera no me subyugó especialmente, pero sí la segunda que la tengo por gran estima. Además es el director de Cuatro bodas y un funeral (1994) que fue un éxito mayúsculo.

§ 3.493. Serie negra (Alain Corneau, 1979)

 

Director totalmente desconocido para mí. Esta parecer ser una película célebre, interesante, mítica. Una especie de "postpolar", una policíaca francesa después de la moda de los "polares".
La película es muy pretenciosa. Basada en una novela de Jim Thompson y  el guión de Georges Perec, nada menos. 
Presentación más que notable. Pero su desarrollo es algo lento, lo que lastra la organización del relato, que no deja de ser turbio, sucio, malsano, podrido y sórdido. Más que policíaca, negra, como su título dice.
Un personaje de lo más ramplón, un don nadie que escarmienta de la vida que lleva y pretende redimirse de sí mismo... y claro, lo hace de la única manera que sea hacerlo, mediante el delito. Todo un clásico de los más revisado. Y no funciona mal, pero no era lo que esperaba.
Navega en un mar de dudas y zozobra en lo más importante, la trama interesa pero el desarrollo expositivo no tanto.
Me recuerda un poco, salvando todo lo que hay que salvar, a Malas Calles y a Taxi Driver de Scorsese. La chica, la protección falsa y viciada que le profesa el protagonista, lo mal encaminados que van todos los planes, el desastre que se avecina. 
A medida que avanza vas perdiendo el interés por ella, por la historia, y por cómo se va a resolver el asunto.

viernes, 13 de septiembre de 2024

§ 3.492. Isadora (Karel Reisz, 1968)

 

Me encanta Reisz, todo lo que he visto suyo me parece notable. Películas bien construidas, serenas, perfectamente armonizadas, con guión punzante y bien redactado, y abordando asuntos singulares que escapan de la normalidad. Todo lo que hace tiene sentido, la organización de las tomas, los planos retrospectivos, el presentación de personajes, el clímax de la tensión emocional, los colores, ropas y atrezo. Me parece un director muy completo.
Me ha gustado bastenta la película. Quizá, pero esto es una obsesión mía que supongo perdida de antemano, le sobran algunos pasajes, aunque es natural que se vaya más allá de las dos horas, pues hay mucho número musical, danza incluida, naturalmente.
La idea de estructurar la película desde el final hacia el principio, introduciendo retrospectivamente las escenas más brillantes de la película, como si fuese la memoria de la bailarina funciona a la perfección. Me ha gustado mucho Vanessa Redgrave, pero eso no creo que tenga mérito, porque siempre la he tenido como una pedazo de actriz impresionante. Lo de James Fox tampoco tiene mérito para mi, porque es uno de mis actores favoritos de siempre, junto con su hermano Edward, con el que a veces lo confundo. Aunque sé que lo tengo idealizado, lo asumo y aun así defiendo sus películas.
No tenía ni idea de quién era y qué hizo Isadora Duncan. Un personaje a recuperar, especialmente ahora que esta tan de moda los arquetipos femeninos. Me acuerdo mucho de la editorial Circe, que tenía una colección de biografía de mujeres que si se recuperaran ahora sería todo un éxito.

§ 3.491. La golfa (Jean Renoir, 1931)

 

Estoy seguro que Lang vio está cinta para "Perversidad" y "Para la mujer del cuadro". Además el protagonista también es pintor. La primera de ellas puede considerarse, incluso, un remake canónico, oficial.
Evidentemente es una historia muy vieja, conocida y trillada, pero seguro que hacerla en 1931 se consideraba tremendamente avanzado. Le supongo, no lo sé porque no he leído nada al respecto, incluso problemas en su exhibición, judiciales, manifestaciones, etc. Sin embargo no hay excusas escabrosas, ni muchos menos de sexo explícito.
A pesar de los años pasados, más de noventa, la temática sigue siendo muy perfectamente actual.
Los actores manejan los registros de manera algo amanerada, con movimientos bruscos, excesivos, poco naturales, algo artificiosos. Sin embargo la composición de los planos es técnicamente perfecta, la cámara no se mueve, los zoom son precisos, y por momentos pueden parecerse a las composiciones de cuadros. 
A diferencia de las de Lang, aquí la sordidez no se muestra, simplemente se insinúa. Se da por supuesto. Se requiere algo de imaginación para detectar las humillaciones, las servicias y las maldades de 'la golfa' hacia el pintor. Lo interesante de la propuesta es el drama moral que surge de la tensión de la chica con las opciones que se le presentan. El mito de que a las chicas guapas les gustan los chicos 'palotes' se arraiga en historias como éstas. En ningún momento pretende dejar a su chulo y encariñarse verdaderamente con el amante al que engaña.  Y eso es algo que es más vidrioso en la propuesta de Lang. 
El arquetipo de mujer malvada y sórdida está mejor planteado en las de Lang. Joan Bennett tiene más cuerpo, emoción y guapura que Janie Marèse.
Me ha gustado, pero menos que otras del director, que tiene verdaderas obras de arte.

§ 3.491. Así acaba nuestra noche (John Cromwell, 1941)

  Una cinta casi propagandística muy en la línea del Hollywood de aquellos años en los que el cine se puso de parte del bien y contra el mal...