martes, 25 de octubre de 2022

§ 2.807. La horca fatal (Nick Grinde, 1939)

 

Otra más del año 1939, y son muchas ya las de ese año, probablemente uno de los mejores de la historia del cine. Esta de ese terror semi científico tan en boga en algunos años y tan buenas películas ha dejado.
Al servicio Boris Karloff, alma de la película y probablemente  su razón de ser. Una estrella del género.
Una hipótesis tan inverosímil como cualquier otra de este tipo de películas: la construcción de una máquina que es capaz de devolverle la vida a los muertos. Creo recordar que el primer trasplante de corazón fue en Sudáfrica en 1967 por Christiaan Neethling Barnard. La hipótesis sigue siendo muy parecida a la de la película.
Tiene algo de cine negro, de terror, de ciencias ficción y de juicios. Verdaderamente es un producto de consumo para sesiones dobles en las tardes de sábado en los cines de la época.

lunes, 24 de octubre de 2022

§ 2.806. Plan diabólico (John Frankenheimer, 1966)

 

Una idea muy sugerente, que con algunas derivaciones se ha ensayado varias veces. Más allá de la típica de Fincher "The game" (1997), con la que guarda un gran parecido, no tanto estético, sino temático.
Frankenheimer es un director la mar de interesante, con cosas realmente magníficas.
Si la intentas ver con una cierta perspectiva vital la cinta puede conducirnos hacia un existencialismo vital y una crítica a la clase media americana, más centrada en el progreso económico y social que en el personal.
Me han gustado mucho las escenas oníricas, muy en la linea de algunas imágenes que el propio Hitchcock introducía en algunas de sus películas, Recuerda, particularmente.
Tiene algo de thriller, de retrato de introspección psicológica, de ciencia ficción, de miedo. Me parece una cinta atrevida y polémica, que indaga el sentido de la existencia y que la supongo un sentido fracaso en taquilla. No es fácil de ver también supongo que la crítica la machacó inmisericordemente. Básicamente me parece una película my avanzada para su época.
El relato es duro, hasta cierto punto inflexible y muy poco caritativo. Es, por momentos, innecesariamente desagradable.
Desde luego no es el primer ni el último hombre que algunas vez en su vida piensa en desaparecer, en comenzar de nuevo, en romper con todo y darse una nueva oportunidad, de comenzar desde el principio, aprovechar las oportunidades que la vida te dio y no pudiste hacerte con ellas, no cometer los mismos errores, etc. Y esa es la reflexión que provoca la cinta.

domingo, 23 de octubre de 2022

§ 2.805. El bruto (Luis Buñuel, 1953)

 

Un tema muy social de la etapa mexicana de Buñuel, un director abiertamente comprometido con lo social, incluso políticamente.
El guión es magnífico, dominando el tiempo con maestría. La acción transcurre de forma suave pero inexorable, pero no sobre ni un minuto. Todo tiene una coherencia interna, y cada escena sirve para explicar la siguiente y servir de corolario de la anterior.
La dureza del tema no se ve suavizada en su tratamiento, antes al contrario, cada vez es más fuerte. Las escenas en el matadero sólo auguran la dureza de lo que va a ocurrir.
Pedro Armendáriz está espléndido, como siempre. Y Katy Jurado está tan perversamente guapa como en sus mejores tiempos.
La debilidad humana, la cohesión del grupo, la solidaridad, la avaricia y la maldad se muestran con toda su crudeza, con todo su salvajismo. 
Interesante película de un director del que tengo que ver más cosas. Apenas he visto 8 películas de las treinta y tantos largas que rodó en su vida.

§ 2.804. El extraño amor de Martha Ivers (Lewis Milestone, 1946)

 

Hace muchísimos años que la vi. Y me pareció prodigiosa. Ahora, quizá veinte años después, me sigue pareciendo magnífica.
Una vida complicada, un amor confuso, una sensación de vacío y de resentimiento. Una difícil existencia que crea una personalidad marmórea, de hielo, de acero, verdaderamente potente.
Un retrato potente guionizado por Robert Rossen, casi nada, estupendo guionista y magnífico director.
Un reparto absolutamente maravilloso: Barbara Stanwyck con esa complejidad suya tan características, el pelirrojo y muy joven Van Heflin, tan bueno como siempre, la bellísima Lizabeth Scott, el bueno de Kirk Douglas en su debut cinematográfico, y la siempre inconfundible Judith Anderson en un papel muy corto pero muy potente, como casi siempre son sus papeles: fuertes y encarnizados.

sábado, 22 de octubre de 2022

§ 2.803. El largo viernes santo (John Mackenzie, 1980)

 

Una de tantas. Mafia británica, negocios sucios y tensión 'matonil'. No me parece una gran película, pero entretiene. Cuesta llegar a entender de qué va y cual es la trama, pero una vez descubierto sabes que te va a entretener.
La pareja de actores es más que interesante: un Bob Hoskins algo mayor y una guapísima Helen Mirren en un papel de madura joven esposa del gánster. También aparece un Pierce Brosnan en la que sería una de sus primeras películas, sino la primera.
Una estética muy inglesa, una música un tanto barroca que se inmiscuye demasiado en el relato, componen un relato de venganza en el que no queda nada mal Bob Hoskins, actor versátil, de carácter y aunque quizá más dotado para la comedia que para el drama en esta cinta no lo hace nada mal.
Hay algo que no funciona, la necesidad de encontrar explicaciones convincentes en relación con quién está atentando contra el mafioso. Es evidente que esta circunstancia es indiferente, porque en realidad da igual quién sea. Y el mafioso pierde demasiado tiempo en ese menester. Pero es evidente que los que están orquestando la venganza contra el mafioso son los americanos. O al menos eso da a entender en cada momento.
Pero la historia avanza con firmeza en una thriller creciente que se va descafeinando poco a poco.

§ 2.802. La semilla del diablo (Roman Polansky, 1968)

Una película mítica, que no creo haberla visto más que una vez. No me gustó demasiado. En general no me gustan las películas de miedo, pero esta tiene algo que la hace especial. Probablemente fue la cinta que puso a Polansky en lo más alto de los directores, pedestal del que ya no se ha bajado. 
Estoy terminando con Polansky, del que me quedan solo tres por ver, y estoy aprovechando para volver a ver algunas suyas más míticas. No es un director que me apasione. Es más me gustan más su obras 'menores' que las más 'típicas'.
El guión es muy inteligente, la idea primigenia también y el desarrollo y la tensión emocional que provoca va en aumento a lo largo de la cinta.
El papel de Mia Farrow es magnifico, y ella lo borda, la verdad. John Cassavetes también está muy bien aunque su rol es más discreto.
La producción corre a cargo de William Castle, todo un referente en el género de terror. De él he visto: El americano (1955), Conspiración en Houston (1956), Macabro (1958), Los 13 fantasmas (1960), Homicidio (1961), El barón sardónico (1961), Amor entre sombras (1964), y El caso de Lucy Harbin (1964).

viernes, 21 de octubre de 2022

§ 2.801. El hombre del Norte (Robert Eggers, 2022)

 

Siglo X. Países escandinavos. Mitos y leyendas, guerras de supervivencia y de conquista, de riqueza y por la comida.
Intensa, muy efectista, llena de requiebros, giros y efectos especiales, una música de cuerda algo estridente que evoca, naturalmente, la de aquella época, unos paisajes helados, un mar embravecido y el asombro de un niño para contar una historia de venganza.
No es, no lo pretende, una historia clásica, sino moderna, fuerte y agresiva, pretendidamente realista y algo alejada del clasicismo sobrio de las de aventuras del Hollywood clásico.
No me interesan demasiado las prácticas de bestialismo a las que se acostumbraban estas gentes en períodos de lucha, y de esto hay mucho en la cinta, pero lo entiende, o al menos lo soporto, como un mecanismo para contarme un trasfondo, una historia más o menos interesante, la evolución del niño rey, su obsesión por el poder, sus relaciones con otros seres. Pero aquí parece que el medio es el mensaje. 
Excelente nota requiere la fotografía y los paisajes, realmente espectaculares: fuego, hielo, volcanes, caballos, barcos...
Quema la mecha de los excelentes actores -Nicole Kidman, Ethan Hawke, y Willem Dafoe- al comienzo de la cinta, en su primeros veinte minutos, lo cual es una estrategia interesante.
El resultado es interesante, pero no es una obra redonda. Quizá para los muy 'cafeteros' pueda resultar gigante, pero dista mucho de emocionar o transmitir como tal.

§ 3.902. Entre el amor y el juego (Sam Raimi, 1999)

  Tercera vez, quizá cuarta, que la veo. Siempre me ha gustado mucho.