domingo, 16 de enero de 2022

§ 2.577. Atila, rey de los Hunos (Douglas Sirk, 1954)

 

Un biopic curioso. Un peplum en cinemascope sobre un personaje que en Hollywood dorado tenía que sonarles algo parecido al sánscrito medieval. Película de aventuras, de entretenimiento, pura evasión, pero con un marchamo de calidad, aquel que le puede dar un director curtido en multitud de películas y con gran experiencia. 
El resultado es lo que se suponía. Una película de sábado por la tarde, para todos los públicos, sin demasiadas complicaciones.
Me ha encantado Jack Palance, actor más dotado de lo que su fama le otorga. Una cara marmórea y dura que parecía situarlo siempre en papeles dramáticos, generalmente de villano y mala persona. Jeff Chandler es otra cosa, más sutil y versátil, menos encasillado en sus registros.
El resultado es óptimo, pero no apostaría dinero a que fuera de Sirk. Quiero decir: lo sé, pero por un lado me extraña en su filmografía, y, por otro, no encuentre rasgos reconocibles de su característica posición melodramática. no sé si se debía a su status como director a sueldo de los estudios, o que eran proyectos que abordaba desde su independencia y valía, probablemente lo primero.

§ 2.576. Rocky II (Sylvester Stallone, 1979)

 

No es la primera parte, ni mucho menos. Tiene esos momentos emotivos que satisfacen los aspectos más primarios, pero todo es epidérmico, superficial, poco sustancial.
Entiendo que la saga continuase dado el éxito que tuvo la primera película, realmente la más importante de todas ellas. Una película decente que ha 'sufrido' un montón de películas que siguen su estela hasta la extenuación, todas ellas mucho peores que la original.
Esta es un buen ejemplo de lo que digo. El guión es razonable, viendo la primera película, pero el desarrollo es demasiado esteriotipado, previsible, nada original, muy poco desarrollado. Mediocre.

sábado, 15 de enero de 2022

§ 2.575. El confidente (Jean-Pierre Melville, 1962)

 

Extraordinaria. Seca, dura, fuerte, sin concesiones. Directa y a la cabeza. Nada de contemplaciones.
Un tipo de cine negro europeo denominado 'polar', del que Melville era el máximo exponente.
El guión es sorprendente, con algún cambio que no ves venir en absoluto, giros insospechados que provocan una cierta desazón en el espectador. 
La música está muy bien elegida, y el blanco y negro es de una brumosidad que acompaña a la película muy bien. Es una cinta que podría haber rodado perfectamente un director americano. 
Lo que me gusta de Melville es que prescinde de todo relato moral o psicológico de los personajes. No te explica por qué hacen las cosas, o cuales son sus motivaciones. Simplemente te cuenta lo que acontece. Sin más.
Me ha parecido extraordinaria. Me ha gustado mucho Jean-Paul Belmondo, de una seguridad apabullante. Un gran actor, algo rudo pero tremendamente varonil. Me extraña que no tuviese una carrera 'americana'. Quizá no sabía bien ingles, o vaya usted a saber. Nunca le faltó trabajo en el cine francés o italiano. Un grande.

jueves, 13 de enero de 2022

§ 2.574. Yo, gran cazador (Anthony Harvey, 1979)

 

Western que tenía catalogado como de relleno y, la verdad, me ha sorprendido bastante. No es nada mala película, antes al contrario, es interesante, tiene una interesante propuesta narrativa, música muy lograda y una gran fotografía: paisajes abiertos (áridos, montañosos, verdes, etc.) y un recorrido emocional notable. 
Varias historias convergen a lo largo de la cinta. Cada una cuenta su propia historia, más o menos desarrollada, dándole una entidad como de conjunto de cuentos, todas alrededor de un caballo blanco realmente impresionante.
No es un Western clásico, ni tiene el formato de los crepusculares, ni pertenece a las comedias del Oeste. Es distinto. No es dramático, pero sí serio.
Me ha sorprendido para bien. Esperaba algo más pesado, espeso, menos entretenido. Sin ser una 'gran' película, se deja ver.
No veo a Martin Sheen en el papel de superviviente en el desierto, peleando con los indios. Era su momento álgido y supongo que tuvo que aprovechar lo que le ofrecían. Mejor está Sam Waterston en su papel de jefe indio. Harvey Keitel no es ni puntuable, pues aparece, si acaso, cinco minutos de metraje.
Del director vi "El León en invierno" (1968) que se me hizo algo larga y, por momentos, tediosa, por más que la temática y el reparto fueran realmente interesantes.
100 minutos son muchos para la historia que cuenta, 85 hubieran bastado. El comienzo es potente, con el manejo de la ausencia de diálogo como recurso narrativo, pero al final, sobre el minuto 70 empieza a pesar el metraje, para mi un tanto exagerado.

miércoles, 12 de enero de 2022

§ 2.573. Cita con Venus (Ralph Thomas, 1951)

 
Una isla del canal, la invasión por los Alemanes en plena IIGM, las tradiciones por encima de todo y la supervivencia de una vaca de linaje excelso es la trama de la película. Amores, enredo, situaciones peculiares y un amor en ciernes entre el militar destinado a salvar la vaca y la oficial de ese pueblo que es destinada a ayudarle a entrar y conseguir su objetivo.
Delicada película bélica, con ese toque de comedia que sólo las películas finas pueden darle. Un punto romántico y, a la vez, duro y seco de la lucha por la libertad. 
Lo inesperado del viaje, el acometimiento de una misión conjunta entre el militar y la chica voluntaria es el caldo de cultivo en el que se desarrolla la peculiar misión. 
Es muy bonito el perfil que marca de la resistencia de la isla a perder su identidad y dejarse avasallar por los conquistadores alemanes. No hay un alzamiento armado, pero tampoco una colaboración activa con el enemigo. 
Un interesante y maduro David Niven, y una chica muy guapa, llamada Glynis Johns, con una belleza al estilo de Gloria Grahame, nariz aguileña, rostro afilado, ojos grandes, pelo corto... Continua viva, y según dice Wikipedia es la nominada a cualquier premio de la academia de mayor edad, muerta Oliva de Havilland el año pasado.
Me ha gustado mucho, me parece deliciosa.

martes, 11 de enero de 2022

§ 2.572. El tren de los espías (Mark Robson y Monte Hellman, 1979)

 

Una de espías, que es la última de Robson, esta vez ayudado por Monte Hellman. Un guión un poco complicado, enrevesado, complejo, que da vueltas sobre un tema. Quizá le falten minutos, en la copia final cortaron demasiado, o algo similar. Pertenece a ese género tan de moda en los setenta de espías transnacionales, cosmopolitismo en las modas e internacionalismo en las tramas. 
Me recuerda, inevitablemente, a El puente de Cassandra (George P. Cosmatos, 1976): un tren, una estrella guapa del cine, un agente externo al tren que propicia planos cortos y diálogos entre los personajes, y un par de horas de cine de entretenimiento, sin más. No tienen, ambas, la más mínima pretensión estética o artística. Es un producto más de la industria. Me llama la atención esta actitud en Robson, que tiene excelentes películas, pero no tanto en Cosmatos, aunque sí algo en Hellman.
El reparto es más que interesante: Lee Marvin, Robert Shaw, Linda Evans, Maximilian Schell, y Horst Buchholz. Actores capaces de llevar a buen puerto proyectos más enjundiosos que este. Pero aquí no brillan como deberían. Es un resultado incluso mediocre, poco terminado, quizá no mal planteado pero si con deficiencias que lastran la cinta. En general, y salvo excepciones, las últimas películas de directores notables, como es el caso de Robson, no suelen encajar del todo, ni en la industria y el público, ni siquiera en su filmografía. Quizá pretendan hacer cosas nuevas, o asegurarse un éxito en taquilla. No sé. Probablemente única y exclusivamente ocurre que se les acabó el ingenio creador, ese algo imposible de concretar pero que se aprecia perfectamente en el resultado final.

lunes, 10 de enero de 2022

§ 2.571. Casi un ángel (Henry Koster, 1941)

Me recuerda a las películas de LaCava o de Lubitsch, más del primero por el toque humorístico y menos del segundo, porque no tiene esa ironía en los diálogos tan peculiar en su cine, ese 'toque' que le hizo genial y perfectamente reconocible.
Esta cinta tiene material que cualquiera de ellos hubieran aprovechado. Una trama sencilla, un enredo fabuloso y en el camino para salir de él los protagonistas se enamoran. Una comedia de situación. Me ha gustado mucho Deanna Durbin. Es una película hecha claramente para ella.

 

§ 3.903. La herida luminosa (Tulio Demicheli, 1956)

Versión original  de una cinta que tuvo su remake en una de Garci, con el mismo título, que me pareció interesante, sin ser de las mejores d...