martes, 6 de febrero de 2018

BRANT, Beto. El invasor (2002)


Bueno, pues una más. Intenta reflejar bien la angustia del protagonista por ser partícipe en la contratación de un sicario que mata al socio de la empresa. El otro socio no tiene ningún problema, pero éste sí. Tiene escrúpulos. La depravación del sicario es tremenda, mata a los padres de la niña y luego la mete en la droga y se acuesta con ella.
Es cierto que las imágenes van deprisa, que es capaz de transmitir angustia, pero no es el tipo de cine que me gusta.
El mundo de la noche de brasil de lo barrios bajos tiene que ser absolutamente salvaje.

lunes, 5 de febrero de 2018

MIIKE, Takashi. 13 asesinos (2010)


Entretenida, poco más. Las escenas de lucha con espadas son realistas pero no especialmente exageradas, defecto muy acusado en este tipo de cintas.
Directo desconocido para mi, pero que desde 1991 hasta el presente ha dirigido 105 películas, lo que es una barbaridad, absoluta barbaridad. Muchas de ellas directamente para el mercado del video club, según leo.

sábado, 3 de febrero de 2018

KELLER, Harry. Quantez (1957)


Tercera película del director, un especialista del género, y probablemente la mejor. Planteado (prácticamente) como una obra de teatro: un escenario fijo, personajes que entran y salen, cambio de tensión, variación del interés del espectador, etc.
Me ha gustado.

viernes, 2 de febrero de 2018

HORNER, Harry. Un revolver solitario (1956)


Una del Oeste más. Pero no una cualquiera. Es una buena película, con un buen fondo, con algo de Gary Cooper y Kelly en la de Zinnemann...
Me ha gustado mucho Quinn, es un actor de una pieza, magnífico. Katy Jurado cumple ese rol de mexicana guapa en Hollywood, algo parecido a Quinn, pero en el caso de él la necesidad se vio superada por su talento extraordinario.
Un director para mi desconocido, no había visto nada de él.

jueves, 1 de febrero de 2018

FENTON, Leslie. Lulu Belle (1948)


Feme Fatale en versión cabaretera. La cinta no se visitaba del todo bien, ni se oía correctamente, pero se puede ver. No es lo ideal, pero bueno. Copias malas hay en todas partes. 
El director no lo he frecuentado, de hecho es su primera película que veo. No tiene nada singular. Es una historia trillada, bien narrada, con un resultado previsible y con intervenciones muy estereotipadas. Pero bueno, más o menos funciona la cinta.
Los actores, Dorothy Lamour,  y George Montgomery no son muy conocidos. Ella sí intervino en "La taberna del Irlandés", de Ford, y el en "La batalla de las Ardenas", de Annakin. Pero poco más. El tercer actor interesante es una copia (mala) de Cliffor Webb, pero con menos estilo, menos clase y glamour.

martes, 30 de enero de 2018

BERGMAN, Ingmar. Música en la oscuridad (1948)


Película muy convencional de Bergman, de las primeras que hizo, de su primera época.
Melodrama apoyado en algunos tópicos al uso pero que funciona bien, se deja ver y es muy efectivo. Me ha gustado. Me recuerda a una de Franklín que se titulaba "El príncipe de las tinieblas" con Merle Oberón como gran estrella.
Esta es más modesta, pero es muy buena. Se aprecia bien el dolor del personaje, cómo intenta solventar bien sus dificultades. Está muy bien narrado cómo se enamora de quien puede, de la chica de la limpieza y cómo ello le hace feliz pero le duele. Es evidente que ni no fuese ciego no se hubiera casado con ella, e incluso lo verbaliza con su madre en una conversación que ello le chica. Pero al final es ella la que elige, no él. Él hace lo que puede, ofrece lo que tiene, que además no es mucho, y ella lo escoge en vez de a otro chico, compañero de piso que tiene veleidades sindicales y políticas.
Es evidente que lo que propone el protagonista no es un gran plan de vida. No tiene trabajo, sólo quiere dedicarse a afinar pianos y ella está estudiando. Pero el amor es más fuerte que la conveniencia.
Es el primer Bergman, muy convencional, como otros tantos creadores. Para él un período de aprendizaje.

lunes, 29 de enero de 2018

LANG, Fritz y MAYO, Archie. Marea de Luna (1942)


De las pocas que me quedan por ver de Lang, y no es muy reconocible como de él. No veo los cánones que aprecio en otras obras grandes de él.
No sé muy bien por qué la colaboración con Mayo, cosas de los estudios supongo. Ya había hecho películas, algunas excelentes de crítica y público en EE.UU. por lo que no puede considerarse como una película de aterrizaje. A lo mejor uno de los dos la comenzó y más tarde la abandonó, por lo que sea, y el otro director se hizo cargo de la película para terminarla, montarla, etc.
En cualquier caso no me ha parecido especialmente interesante. La materia quizá sí, pero el tono, entre divertido y pasotil que le da Gabín no cuadra con la cinta, esta camina hacia una película de cine negro y el actor va por su lado. El resultado no queda del todo bien. Por otro lado Ida Lupino está muy desangelado, no quiere brillar, está como plana, lenta, poco sugestiva. No sé, no camina en la misma onda que Gabín. Es cierto que le tengo una cierta manía a Gabín, no es un actor que me subyugue, ni siquiera me parece un gran actor.
Además hay un aspecto que no queda del todo claro, es la intervención del médico amigo del pescador. Vuelve con su mujer, o eso parece, pero no nos da una confirmación de ello, el director lo insinúa y nada más. Probablemente es lo que quiere, pero queda raro.
En definitiva, una película interesante, sin más, pero para guardar una vez vista.

§ 3.908. Billy el niño (David Miller, 1941)

Otra versión más de uno de los mitos americanos de siempre. Una versión clásica, frente a la de  Sam Peckinpah de 1973 y a la de King Vidor ...