viernes, 26 de febrero de 2016

MUELLER, Niels. El asesinato de Richard Nixon (2004)

No sé muy bien cuál es la pretensión del director. Probablemente retratar, que no justificar, el viaje a ninguna parte de un hombre un tanto desequilibrado, al que determinados acontecimientos sin relación entre sí -su separación matrimonial, la presión laboral, la relación con su hermano- conducen a un singular callejón sin salida. Emocionalmente inestable, con una cierta conciencia social, no singularmente grave, aunque sí evidente, le empujan a intentar "ser alguien" aunque para ello tenga que realizar una acción absolutamente impensable, intentar matar al presidente de los Estados Unidos.
La actuación de Penn probablemente sea mejor que el resto de la cinta. Particularmente no me gustan los personajes que se construyen sobre la marginalidad, sobre lo singular en vez de sobre lo normal. Y desde esta perspectiva Penn no me consigue meter en el personaje. Todo en él es importado, demasiado poco creíble, muy artificial, nada natural. No me ha convencido. No es un desequilibrado, no es una persona normal que se desequilibra, o un desequilibrado de origen. Es, y se nota mucho, una persona normal que quiere ser o estar desequilibrado, que no es lo mismo. Y probablemente el personaje real de esta historia no sea un ciudadano normal sino un auténtico desequilibrado.
En todo caso se deja ver la cinta, aunque probablemente si tuviera más recorrido la dirección y no se apoyara permanentemente en el personaje principal y le dejara respirar sería mucho mejor película.

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