jueves, 16 de marzo de 2023

§ 2.980. El faro (Robert Eggers, 2019)

 

Willem Dafoe siempre hace marginal, de loco, de alterado, de descocado, de neurótico, psicopático o similar. No tiene un papel, al menos ahora no se lo recuerdo, que haga de amoroso burgués que quiere a su mujer y a sus hijos y va a la oficina por las mañanas. Es su hueco en la industria.
Robert Pattinson es otra cosa. Un actor más convencional, con una carrera menos rica en matices pero probablemente mejor remunerada.
El estudio que pretende sobre la soledad y la angustia no le queda del todo mal. Pero más que una película estamos en presencia de un ensayo cinematográfico.
Creo que para lo difícil que es la propuesta ha tenido mucho éxito. Más incluso que su siguiente película, El hombre del norte (2022), que no es que me pareciese excelente pero sí me gustó. Creo que ambas, especialmente ésta, ganará con los años.
No sé si quiero ver en esta forma de rodar, en los blanco y negros tan profundos, una influencia de Bella Tarr, pero lo poco que he viso de él me lo recuerdo similar a esto.
Tiene algo de El sirviente, de Joseph Losey, la dominación por el criado -el dominado- por el señor -el dominador-, en una relación morbosa y malsana de resultado inciertos aunque previsibles, sin que ello suponga una contradicción. 
Me ha gustado, es diferente, está bien rodada y, sobre todo, bien montada.

miércoles, 15 de marzo de 2023

§ 2.979. El increíble hombre transparente (Edgar G. Ulmer, 1960)

 

57 minutos de Ulmer pueden dar para mucho, como de hecho dan con esta cinta y con otras. Esta en concreto, tanto por la temática como por su fisonomía, podría haberla filmado Jack Arnold. Es ese miedo psíquico relacionado con características físicas tan peculiar y que tantas cintas dio.
Los actores -Marguerite Chapman, Douglas Kennedy, James Griffith- para mi no son conocidos. Los diálogos son básicos y la pretensión de la cinta un tanto descabellada. Un producto dirigido a la Serie B, a completar las tarde de sábado en los cines de estreno de alguna película más relevante. Es de 1960, muy avanzada para continuar en esa línea.
Se deja ver, pero poco más.

martes, 14 de marzo de 2023

§ 2.978. Vinieron del Espacio (Jack Arnold, 1953)

 

Más que interesante propuesta que sirve bien al objetivo que pretende, creando incluso un canon de cómo deben ser los marcianos, cómo deben venir a la tierra y cómo deben comportarse.
Me ha gustado mucho Barbara Rush, actriz de la que he visto más películas de las que parece. Richard Carlson es el protagonista principal, al que también he visto en películas del estilo.
El guión está bien trazado, tiene recorrido y no aburre en absoluto. Le falta la potencia espectacular que proporcionan los efectos especiales. Pero hay que entender la época en la que se rodó, los medios de los que se disponían e incluso el status del director dentro del estudio.
Pero es una película estupenda, se deja ver y tiene su recorrido y su fondo.

lunes, 13 de marzo de 2023

§ 2.977. El coloso de Rodas (Sergio Leone, 1961)

 

Bueno. La primera de Leone, siempre he tenido ganas de verla y ya está vista. Y hubiera podido no verla, la verdad. Porque no tiene nada de particular, más allá de un peplum imponente y algo pasado de moda que no está entre los mejores del género pero que se ve y entretiene, hace pasar el rato sin pretensiones.
Que el actor principal sea Rory Calhoun puede interpretarse como una premonición de lo que luego iba a ser la carrera del director, centrado en los Western. Rory ya era un actor conocido en ese género.
Quizá un poco larga, dos horas son muchos minutos para contar cosas.
Bien los decorados, bien la música, bien todo lo que tiene que ver con la dirección de producción. No creo que sea fácil apreciar una línea de continuidad entre esta cintas y todos los spaguetti western que rodó más tarde.

§ 2.976. El extranjero (Luchino Visconti, 1967)

 

Compleja y asfixiante, algo nihilista y desencantada. Sin energía, sin esperanza, sin pulso. Una tonalidad gris poco emotiva y nada vitalista. Leí la novela hace tantos años que no me acuerdo realmente, pero recuerdo otro tono, menos gris, con más pulso.
Un hombre sin ilusiones, desapasionado, con la frialdad de quien nada espera, de quien nada pide, de quien se sabe derrotado por la vida. Un hombre vulgar y acomodaticio que se deja llevar por las circunstancias de la vida, torpes, anodinas, vulgares, feas e incluso soeces. 
Al final de importarle tampoco todo, de no tener espacio personal propio, de vegetar en vez de vivir y de darle igual aquellos que esto se presta a lo más vil, sin importarle en absoluto, sin tener remordimientos o ningún atisbo de culpa.
Me extraña esta cinta en Visconti, todo un estilista, un hombre delicado y acostumbrado a los matices sutiles de las cosas bellas. No parece una cinta suya. No tiene esa belleza intrínseca de sus películas, porque incluso en las de temática áspera como 'Rocco y sus hermanos' la limpieza de su propuesta estilística es serena y limpia. Aquí, sin embargo, la mugre, la suciedad y lo costroso gana terreno al punto de ser el eje central de la historia.

domingo, 12 de marzo de 2023

§ 2.975. Cleopatra (Cecil B DeMille, 1934)

 

1934. La versión más célebre, la más imponente, la más imperial, la más impresionante.
Con el buen hacer de DeMille ya investido de uno de los grandes constructores de la industria. Un director absolutamente imprescindible en la historia del cine. Con obras fundamentales, entre ellas ésta, versión más que notable, y canon de las demás versiones sobre la misma historia.
Me ha gustado la presencia imponente de Claudette Colbert, mucho más guapa y sensual que el estereotipo que tengo de ella, sobre todo en posteriores cintas, ya metidos los cuarenta y cincuenta. El resto del reparto incluye a Warren William como Julio César, y a Henry Wilcoxon como Marco Antonio.
La escenografía es espléndida, la música verdaderamente lograda, los trajes, las ropas, los pelos y todo lo relacionado con el atrezo.
Me ha gustado mucho, pero no tanto como la de Mankiewicz, que en términos generales me parece mejor película.

§ 2.974. De la vida de las marionetas (Ingmar Bergman, 1980)

 

Compleja y con sentimiento de culpa. Así la veo yo. Hay algo que atormenta a Bergman durante toda su filmografía: la incomunicación, especialmente entre los miembros de una pareja, de un matrimonio.
La obsesión por el sexo y las conductas al margen de lo establecido son las válvulas de escape de un señor con un matrimonio muy aburrido y, sobre todo, muy fuera de la realidad, muy desconectado de la deseable comunicación entre los esposos. No ya a un nivel óptimo, sino sencillamente  a un nivel medianamente operativo, funcional y práctico.
No es de lo mejor de Bergman. Tiene su interés, pero aburre un poco en ensayo que pretende y la exposición de los temas.

§ 3.896. La última señora Anderson (Eugenio Martín, 1971)

  Una acercamiento al cine de suspense británico de toda la vida. Rodada en los exteriores de Londres, supongo que con personal británico, e...