miércoles, 10 de noviembre de 2021

§ 2.514. El asesino poeta (Douglas Sirk, 1947)

 

Un título muy espectacular para una película policial singular, tanto por su temática, como por su planteamiento estético. Un blanco y negro muy vistoso por el que no parece que pasen los años.
Estas primeras obras de Sirk estaban más cercanas al cine negro que a los melodramas que le hicieron un director muy célebre, tanto de público como de crítica.
Es interesante y se deja ver. Pero le falta el tono dramático de las grandes obras de cine negro. Por momentos aprecias que no se abordan las cuestiones con el tono necesario para darle la intensidad que parece requerir la historia. Por momentos parodia situaciones que restan credibilidad a la cinta.
Pero es interesante, sobre todo para los que adoramos a Sirk, aunque bien es cierto que por obras diferentes a esta.
El reparto es magnífico: George Sanders en su papel de cínico de siempre, una muy guapa Lucille Ball, un varonil Charles Coburn, y y el inconfundible Boris Karloff en los papeles principales.
A destacar la escenografía y el diseño de producción, con una fotografía muy lograda.

martes, 9 de noviembre de 2021

§ 2.513. Doble cuerpo (Brian De Palma, 1984)

Un cine dentro del cine peculiar, distinto. No tanto para narrar cosas que ocurren en una película, o mientras se rueda una película, sino como recurso narrativo. Lo que ocurre en esta cinta podría haber ocurrido en otras circunstancias, en otros lugares, en otras coordenadas. 
Hay algo de ingenuo en el comportamiento del protagonista. Algo de persona engañable, de la que se puede abusar, porque no se entera muy bien de qué van las cosas. Risueño, confiado, algo superficial, probablemente con buen corazón pero con pocas luces. 
Y, naturalmente ese es el centro de la historia. Un guión flojo, previsible y aunque pretendidamente original, discurre por caminos ya trillados por el mismo autor en otras películas. No es Fascinación (1976), ni, desde luego, Vestida para matar (1980) que es, para mi, la mejor de este tipo de películas.
Tiene algo de Vértigo, sin lugar a dudas, y de la tensión sexual que provoca, y también algo de La ventana indiscreta, con ese vouyerismo algo pasado de tiempo que ya no se lleva y que hoy sería considerado acoso, sin más. Los elementos dramáticos están bien resueltos y el juego del engaño es interesante.
Entretiene y el director sabe sacarle jugo a la historia, que no deja ver hasta bien entrado el metraje. No se hace larga, a pesar de sus 110 minutos de duración. No es, sin embargo, de las mejores de De Palma, ni mucho menos.

lunes, 8 de noviembre de 2021

§ 2.512. Incendies (Denis Villeneuve, 2010)

 

Muy interesante, tanto en la temática que aborda como en el desarrollo estético que propone. Pero dura, muy dura, de esas dureza que no se olvida. No necesite ser impactantemente salvaje, sanguínea o gore para producir dolor. La verdad de lo que cuenta ya de por sí es dolorosa, de una crudeza muy impresionante. Una guerra de religiones en pleno Siglo XX a pocos kilómetros del occidente civilizado produce ese tipo de horrores.
Tras la exposición algo compleja de la historia se esconde un profundo sentido humano, aunque sea difícil de apreciar en momentos difíciles siempre hay un lado humano de las cosas.
Un viaja hacia uno mismo, hacia sus orígenes a veces se convierte en un infierno, en una prueba de fuerza hacia uno mismo, en un reto que, o bien te devora, o bien te hace más fuerte.
Los pasados 'desconocidos' siempre siembras dudas sobre uno mismo, sobre la propia identidad, sobre el destino de cada cual. Y ese es el fundamento de la película.
Me ha gustado mucho. A pesar de no comprender bien el problema de base del conflicto -solamente me 'suena' un poco- la potencia de la historia es universal, y no necesariamente es diferente a otros conflictos similares. En todos ellos late la misma injusticia y la misma crueldad.
De Denis Villeneuve he visto tres cosas, y cada una de ellas me ha sorprendido más que la anterior. Más allá de los purismos Blade Runner 2049 (2017) es una buena película, y Sicario (2015) aunque quizá no  tanto sí cumple con los cánones de una cinta de acción. Tendré que ver más cosas suyas...

domingo, 7 de noviembre de 2021

§ 2.511. Harakiri (Masaki Kobayashi, 1962)

Realmente el cine japonés es mucho más que Kurosawa, Ozu, o Mizoguchi, y esta obra es una buena prueba de ello. Tan buena como cualquier de las obras maestra de esos tres monstruos.

Aunque puede parecer un tema conocido, trillado, y aunque nos queda lejos culturalmente hablando, la cinta consigue que te llegue la historia. Realmente es un relato fantástico, nada enredoso, muy claro, con una exposición limpia, lineal incluso en sus introspecciones hacia atrás. Se va descubriendo, poco a poco, la historia, el trasfondo, las motivaciones, la venganza... Tanto la exposición del ritual del harakiri, como su componente axiológico o moral está perfectamente tratado.

La fotografía es muy nítida, pero sin esos preciosismos de las películas en blanco y negro de los directores 'americanos': Lang, Hitchcock, o Preminger. No tiene claroscuros, ni contrapicados, ni ningún recurso de ese tipo. Expone la acción a la luz blanca prácticamente sin sombras, sin reflejos.

Los actores, naturalmente, no me suenan de nada: Tatsuya Nakadai, y Rentarô Mikuni en los papeles principales. Aunque indudablemente deben ser tremendamente conocidos, porque cada uno de ellos tiene más de cien películas. 

Una maravilla. Me ha encantado. Me ha parecido una obra de arte. No sé cuál es la sensación que tienen otros amigos del cine. Ni lo sé, ni me importa, porque nunca me ha importando. Tampoco pretende que mi criterio sea seguido por alguien. No soy más que un simple aficionado.

miércoles, 3 de noviembre de 2021

§ 2.510. La calle del misterio (John Sturges, 1950)

 

Una de las primeras película de Sturges, un gran artesano del cine. Uno de los más cualificados, con varias películas que son auténticas obras de arte. Esta tiene hechuras pero no acaba de concretarse, tiene un ambiente logrado pero que no tiene personalidad propia. Emplea demasiado tiempo en apreciarse un sentido característico, propio. Tiene una manufactura de Serie B lo  que la dota de un cierto sentido común en algunos aspectos, pero le resta creatividad en otros.
Interesante, tiene el aliciente de seguir el caso del homicidio, pero pierde consistencia en los aspectos relacionados con la personalidad del policía y sus vicisitudes.
Es agradable de ver, tiene sus momentos y entretiene.

martes, 2 de noviembre de 2021

§ 2.509. El enemigo público (William Wellman, 1931)

Una película muy conocida y una de las primeras del genero de gangsters, con un prototipo de actor del género: James Cagney, que se hace acompañar por la rubia platino más célebre de todos los tiempos: Jean Harlow.
Un guión previsible pero eficaz, un desarrollo temático bien trabajado y aunque los actores están amanerados el resultado es  apreciable. No tiene la complejidad argumental de otras obras del género posteriores, pero la simpleza de su planteamiento no aburre ni cansa. Ciertamente es un poco infantil, incluso en el planteamiento estético de las imágenes, pero se le perdona en aras de la claridad del discurso. Además dura más de lo acostumbrado para una película de comienzo de la década, 85 minutos.
La cinta tiene la friolera de 90 años y se ve perfectamente, seguramente porque se ha sometido a una restauración exhaustiva. Que sea blu-ray también ayuda. Sonido perfectamente coordinado, blanco y negro sin grumos ni manchas. Realmente se ve mucho mejor que películas de los años 50 que no han sido restauradas.
Me llama la atención la cantidad de personas que han visto la película, para ser tan antigua. En las plataformas que he consultado ha sido muy votada, mucho más que otras más modernas que tienen mucho mejor crédito. Se explica por ser una de las pioneras del género.

§ 2.508. ¡Jo, qué noche! (Martin Scorsese, 1985)

 

Un comedia negra de esas que o te salen bien y se convierten en una gran obra, o son completamente prescindibles. Seguramente los sesudos intérpretes de la comedia americana sean capaces de vislumbrar en ella aspectos interesantes que la eleven a un estado superior de calidad, pero a mi no se me ocurren cuáles pueden ser éstas. Me parece una obra menor, y, desde luego, una obra menor en la filmografía de Scorsese, que tiene obras magníficas junto con otras muy menores.

A esta película no le he cogida la gracia. Como otras suyas la veo por ser de él. No me ha motivado nada. Me parece una sucesión de imágenes sin demasiado sentido, con una forma de narrar que no me agrada. Ni la entiendo, ni intento comprender por qué. Simplemente no es mi tipo de cine. Seguro que hay muchos aficionados a los que le gusta mucho esa película y este cine. Con un guión abracadabrante, una mezcla entre sueño y realidad, un cine entre experimental y narrativo. No me ha gustado nada.

§ 3.897. Fedra West (Joaquin Luís Romero Marchent, 1968)

  Un guión previsible, aunque interesante. Con la gracia de ver al gran actor que fue Simón Andreu en un rol del oeste. No es exactamente un...