domingo, 13 de enero de 2019

§ 1.525. La nueva leyenda del gran judo (Akira Kurosawa, 1945)

He leído todas las crónicas que me preceden, y son todas excelentes y recomiendo su lectura antes que la mía, que es una mera anécdota sobre lo bien trabadas que están las demás.
Menos intensa que la anterior entrega. Algo propagandística y más "convencional" en lo que se puede emplear este término con Kurosawa, que no es fácil.
Sugata Sanshirô es interpretado por Denjirô Ôkôchi, actor japonés pero con rasgos muy occidentales. Su primer actor fetiche.
La copia que tengo se ve bien, pero con un blanco y negro muy deteriorado. Son de esas cintas que deberían restaurarse. Seguro que en el mercado hay mejores copias que la mía.
En esta película de Kurosawa no llueve. Y creo que es la primera de las suyas en la que no llueve. Pensé que era un rasgo distintivo de su cine, pero no. Es cierto que nieva, pero no es lo mismo. O quizá sí.
El combate en la nieve es precioso, muy bien expuesto, tremendamente veraz, muy fílmico, con una gran escenografía. La música acompaña pero no interfiera, no cobra protagonismo como en otras películas. Es algo sutil y como intenso, un acompañamiento.

§ 1.524. Harry el ejecutor (James Fargo, Robert Daley, 1976)


Entretenida. Sin más. La serie va cayendo, poco a poco pero inexorablemente.
Machismo, terrorismo, mujer, violencia policial, todo absolutamente  poco convencional y fuera de lugar. Magnífico retrato de un tipo de policía que, en realidad, ya no existe; quizá nunca existió. A Vox y Ortega Smith, para el resto de la gente, quizá les gustaría, pero creo que es una simplificación fuera de lugar. Él mantiene el pulso de la cinta, pero no es el tipo duro de las anteriores entregas de la serie. Es otra cosa. Entretiene, pero, a diferencia de al primer película de la serie, no da qué pensar. Es plana, mucho más plana.

sábado, 12 de enero de 2019

§ 1.523. Asesinato (Alfred Hitchcock, 1930)


Son ochenta y ocho años los que tiene esta cinta. Y funciona, se deja ver y mantiene la tensión perfectamente.
Es un claro antecedente de una obra maestra del cine: Doce hombres sin piedad, y marca la senda de las películas sobre juicios erróneos sobre la culpabilidad del acusado, temática que repite con Frenesí (1972), muchísimos años después.
La copia que visiono tiene mucho ruido, y la fotografía está muy deteriorada, el blanco y negro no se diferencia bien, se ve borroso y dificulta su visión.
La trama es muy interesante, y marca el canon, y el guión está bien trazado, pero en general ha envejecido mal, como no podía ser de otra forma. Todo lo anterior a 1935, la verdad, no me interesa demasiado, y esa fecha la señalo por El Delator, de Ford, y por dos películas que me encantaron: El ángel de las tinieblas (Sidney Franklin), con Merle Oberón impresionante, y Sueño de Amor eterno (Hernry Hathaway), con un gigante Gary Cooper.
El actor principal es Herbert Marshall, que repetiría con Hit en Enviado Especial, y me gustó mucho en La Loba, de William Wyler.
Las películas inglesas de Hit no me agrandan demasiado, que son todas estas:
- Number 13 (1922)
- El jardín de la alegría (1925) 
- El águila de la montaña (1926) 
- El enemigo de las rubias (1926) 
- El ring (1927) 
- Easy Virtue (1928) 
- La mujer del granjero (1928) 
- La muchacha de Londres (1929) 
- The manxman (1929)
- Asesinato (1930)
- Juno and the Paycheck (1930) 
- Juego sucio (1931) 
- Ricos y extraños (1932) 
- El número 17 (1932) 
- Valses de Viena (1933) 
- El hombre que sabía demasiado (1934)
- 39 escalones (1935)
- Sabotaje (1936)
- El agente secreto (1936) 
- Inocencia y juventud (1937) 
- Alarma en el expreso (1938) 
- Posada Jamaica (1939)
Solo me han gustado de verdad: 39 escalones, Sabotaje, y El Agente secreto. La Posada Jamaica, a pesar de su celebérrima fama no me gustó demasiado.
A partir de aquí comienza su etapa norteamericana, mucho más brillante, que comienza con Enviado especial (1940), y, sobre todo, con Rebeca (1940).
A partir de aquí todo en él es, en sí mismo, una obra de arte.
Supongo que estas películas 'inglesas' le sirvieron para aprender el oficio, hacerse con las claves del lenguaje cinematográfico y con los entresijos de la industria.
No es de sus mejores cintas, a mi juicio.

§ 1.522. Balas sobre Broadway (Woody Allen, 1994)

Excelente comedia, de lo mejorcito de Allen, autor por el que no siento especial devoción, pero con esta cinta tengo que reconocer que su genio es cierto y real. Estos son los mejores años de Allen, Misterioso asesinado en Manhattan (1993), Maridos y mujeres (1992), después de los finales de los setenta con Annie Hall (1977) y Manhattan (1979).
Muestra la ironía del escritor. El estudioso, el académico, el que aborda las cosas, -las que sean, el teatro, la vida- desde una perspectiva formal, reglada, ortodoxa, no consigue conectar con la realidad de su profesión, ni con el éxito. Sin embargo, quien está al cabo de la calle, quien dice las cosas como son, quien redacta desde su perspectiva de la vida, no desde la ortodoxia de la academia, triunfa, consigue lo que quiere, el éxito teatral en este caso.
El guión es perfecto, la película se conduce con tanta naturalidad, con tanta suavidad, sin saltos escénicos, conduciéndose hacia donde quiere el director. 
De las películas de Allen que más me han gustado. Cuando Allen pretende hacer una comedia sin pretensiones moralizantes, sin contenido moral, funciona perfectamente, como es este caso. Cuando pretende explorar otros terrenos con funciona tan bien. No le veo rodando un drama o una tragedia. Y cuando dentro de una comedia pretende explorar otro vericuetos emocionales también fracasa. Lo suyo es, sin más, entretener. Y lo hace muy bien. Pero sin dejar un poso de sensaciones que perdure. No recuerdo de las de Allen nada más que la trama, de qué iba. Sin más.
La elección de los actores me parece absolutamente genial.
John Cusack lo borda, muestra la ingenuidad del escritor de manera muy real, descarnada. Dianne Wiest, que mereció el Oscar por esta película, mezcla en su interpretación el resentimiento por lo que pudo ser su vida anterior con la alegría de una nueva oportunidad para triunfar. Lo de ,  Chazz Palminteri no tiene nombre: parece nacido para hacer papeles de italiano, hasta el punto de que no creo que cuadre en otro tipo de cintas. Algo parecido le pasa al mafioso, interpretado por Joe Viterelli, actor encasillado, con razón, en papeles muy determinados. Y Jack Warden haciendo de lo que sabe hacer también aporta lo suyo.

§ 1.521. El tercer hombre (Carol Reed, 1949)

Se puede ver veinte veces, y en cada una de ellas descubres cosas nuevas. Las casas, la arquitectura, las ruinas de la ciudad, en este caso.
La película funciona desde el primer al último minuto, y con una intensidad notable. Tráfico de penicilina, escrúpulos, conciencia, recuerdos que no fueron.
Recordaba más minutos en la pantalla de Orson Welles; realmente sale muy poco.
La música como un protagonista más. La belleza de las imágenes en la persecución en sombra y luz en las alcantarillas de la ciudad son prodigiosas. Plano tras plano, luz y sombra, oscuridad y esperanza. Una persecución dificilísima de rodar, con grandes dosis de emoción y peligro, un goce para el espectador.

jueves, 10 de enero de 2019

§ 1.520. El hombre de Kentucky (Burt Lancaster, 1955)


Interesante película que va decayendo poco a poco a medida que avanza y perdiendo el interés inicial.
Filmada por Burt Lancaster, un grande del cine de verdad, su única película como director en solitario. Todo otra en coautora veinte años después.
Los dos comentaristas que me preceden, mas perspicaces que yo y mejor informados les darán las pistas necesarias sobre la cinta, básicamente sobre la música y la fotografía, y sobre la primera intervención de otro gigante del cine: Walter Mathau.
Pretende ser una especie de viaje iniciativo de un joven que viaja con su padre por el medio oeste americano hacia Texas, deteniéndose en un pueblo para buscar a su hermano. Pero no consigue el propósito, naufraga en al narración de la relación con su hijo y se detiene en peripecias que distraen del núcleo esencial: la carta al presidente de EE.UU., la historia de las perlas de ayuda dulce, su suplantación de un rico, la historia del barco y la recurrente pulsión del enfrentamiento entre dos familias. En vez de ser los vehículos sobre los que narran la historia de la relación entre padre y hijo se convierten en los hitos esenciales de la película, perdiendo todo su interés.
No explica adecuadamente por qué la primera mujer, la que viaja con ellos es esclava y cómo se libera. Tampoco cómo se enamora de la segunda.
Pero más allá de esta cosas es un Westher apreciable, que se deja ver, intimistas y con un cierto lirismo.
Sobre, a a mi juicio, metraje, 90 minutos hubieran sido suficientes. Sobraban las cuatro canciones que no se sabe muy bien para qué sirven, más allá de para pasar el plano y contar otra historia.

miércoles, 9 de enero de 2019

§ 1.519. Aguila Gris (Charles B. Pierce, 1977)


Muy discreta película sobre una temática cien veces rodada y noventa y nueve mejor que esta. Tiene guion, pero -demasiadas- veces es confusa, desorganizada, poco hilada. 
Además de ser algo inverosímil, aunque esta circunstancia, al verdad, no tiene demasiada importancia en este teatro de los sueños.
Director para mi desconocido que además no hizo muchas películas.
Tiene el atractivo de ver a Ben Johnson, un clásico donde los haya y poco más. Pero no es una de sus mejores actuaciones, ni mucho menos.
La chica es interpretada por Lana Wood, hermana menor de Natalie. Al parecer (según Wikipedia) ambas intervinieron en Centauros del Desierto haciendo varias edades del mismo personaje, no lo sabía. En Sensacine también se referencia esta punto en este sentido.
Sin embargo -acabo de comprobarlo- en el canónico Libro de John Ford: El Universo de John Ford, de la Editorial Notorius, en la entrada correspondiente a la película no dice nada al respecto; ni tampoco Filmaffinity, esta casa que nos acoge y que tanto nos permite aprender, a quien hay que agradecerle el esfuerzo que realiza.

§ 3.405. Tristeza de amor (Eduardo Mallorquí, 1986)

  Recuerdo algunas noches cuando se emitía la serie y me quedaba a ver algún capítulo. La música es preciosa, la canción en realidad.  Vista...