domingo, 20 de marzo de 2022

§ 2.646. A pleno sol (René Clément, 1960)

 

Un clásico del cine francés. Es la tercera o cuarta vez que la veo y aunque siempre es agradable verla el impacto que te produce la primera vez es imposible de reproducir.
La novela también es estupenda, es de Patricia Highsmith. Tiene un remake: El talento de Mr. Ripley, de Anthony Minghella de 1999, también estupenda. Hubo un momento, hace años, que leí bastante a Highsmith y no me pareció, ni de lejos, su mejor novela. Aunque quizá sí era de más fácil traslación al cine. No sé. En cualquier caso la película es absolutamente redonda, magistral, cerrada y perfectamente engarzada.
Alain Delon está magistral, joven, absolutamente guapo, viril, con ese punto salvaje y canalla que tanto gusta a un tipo muy singular de mujer. En el fondo no deja de ser el retrato de un asesino, que pone su talento al servicio del mal.
De Clement he visto otras dos películas: Los felinos (1964), y  ¿Arde parís? (1966). Las tres son estupendas, magníficas de verdad.

sábado, 19 de marzo de 2022

§ 2.645. Nadie puede vencerme (Robert Wise, 1949)

 

Una película de boxeo con todos los cánones: apuestas amañadas, boxeadores fracasados, mujeres semifatales, utilleros poco dotados intelectualmente, cuentas que saldar, y, sobre todo, una excelente película de boxeo. Parece que estás en el ring, peleando, desando machacar a tu adversario, simplemente no amigo... Cuatro asaltos son suficientes para mostrar lo que un maestro director de cine quiere mostrar.
Un obra maestra.

jueves, 17 de marzo de 2022

§ 2.644. El poder del fuego (Michael Winner, 1979)

 

Interesante propuesta muy de la época, de finales de los setenta. Lo tiene todo para que fuese una cinta de más fuste, más potente. Un reparto brillante (Sophia Loren, James Coburn, O.J. Simpson,  Anthony Franciosa, Vincent Gardenia, George Grizzard y con intervenciones muy puntuales de Eli Wallach y Victor Mature), una música sugestiva (Gato Barbieri), una trama rápida y vivaz, ambiente exótico y alma de thriller. 
Y tiene buen desarrollo pero le falta esa genialidad que tienen o no tienen algunas cintas, y esta no la tiene. Se deja ver, por supuesto, de gusto ver a Sophia o a Coburn, pero carece de densidad, de profundidad, no es la forma de contar sino la manera en que se narra.
La complejidad del inicio no se desenvuelve, cuesta en algunos momentos seguir a los personajes y el hecho de no ver al personaje que se busca en gran parte de la cinta dificulta saber cómo evoluciona la película. Pero no es mala. Es una película normal y corriente de esa época. Sin más.

martes, 15 de marzo de 2022

§ 2.643. La duda (John Patrick Shanley, 2008)

 

Un ambiente áspero y desagradable que sólo puede condicionar los juicios y las apreciaciones sobre cosas que se desconocen.  Cuanto más interés se pone, bien por uno mismo bien por las circunstancias, en ver el mundo y lo que nos rodea de forma desagradable, más se confirma esa apreciación. El punto de vista y la perspectiva desde la que se miran las cosas determina nuestro juicio.
Los abusos sexuales encubiertos no tienen nada que ver en este asunto, es una mera excusa.
Muy bien el reparto de actores: Meryl Streep como siempre, excepcional en su papel. Philip Seymour Hoffman en la línea de su siempre ascendente carrera, truncada no se sabe dónde ni por qué. Y muy bien el papel de Amy Adams, una chica guapa que no quiere que se la encasille. 

lunes, 14 de marzo de 2022

§ 2.642. El ojo del diablo (Ingmar Bergman, 1960)

Onírica, barroca, estéticamente decadente, superficial en su planteamiento, edonista pero profunda en sus pretensiones morales. El bine, el mal, los sueños, la realidad. El pecado y la religión, tan comunes en Bergman tienen una interesante derivación con esta cinta. El mito del Don Juan elevado a la enésima potencia como redentor del mismísimo diablo, que necesita que se pierda la 'virtud' de una muchacha para que le sane un orzuelo.
La fábula arranca del proverbio que dice "la castidad de una mujer es un orzuelo en el ojo del diablo". Sobre ella construye su película, con pretensiones de sueño vivido y relato fantástico.
Muy reconocibles la fantástica actriz Bibi Andersson, y el característico Gunnar Björnstrand. Los demás actores no me son conocidos.
Me ha gustado mucho, tiene ese punto cínico sobre la realidad, esas distancia que se toma para establecer su crítica a las costumbres, a la sociedad, a los `bienpensantes'.

domingo, 13 de marzo de 2022

§ 2.641. El profesional (León) (Luc Besson, 1994)

 

La vi en el cine hace muchos años, probablemente cuando se estrenó en España. Me pareció estupenda. Debut de Natalie Portman, casi una niña, con un consolidado Jean Reno que le dió mucha visibilidad, y un Gary Oldman absolutamente maravilloso, todo expresividad, aunque poca contención. A Danny Aiello cuesta verle en un papel que no sea de mafioso, con una fisonomía perfectamente reconocible.
No la recordaba tan de "acción", es realmente una cinta con mucha violencia, asesinatos, sangre y todo lo demás. Es una película muy potente, tremendamente impactante.
La enseñanza de un 'oficio' tan peculiar como el de asesino a sueldo es tratado con gracia, garbo, profesionalidad y empatía. Además la enseñanza es a una niña. La chica tiene algo de la niña de Taxi Driver, esa sexualidad infantil tan a la vista, tan desagradable en su visualización, tan sumamente anti erótica, tan poco adulta y madura. También tiene algo de Nikita, cosa lógica por otra parte. El juego de las armas, la erótica de las pistolas.
No es la primera vez que se enseña el oficio de matón, ni tampoco la primera vez que se transmite de chico a chica, pero esta cinta es todo un canon, por lo bien que se hace y lo bien rodada que está.
No sé qué dirá la crítica, pero puede ser la mejor película de Besson.
La música es estupenda, a cargo de Eric Serra, uno de los de la nueva ornada, de los que han puesto música a decenas de películas.
Dos cosas llaman la atención de la cinta, dos detalles. La constante ingesta de leche (además de la misma marca y en el mismo envase de cartón) y el cariño que le tiene a una planta.
La versión que he visto dura 133 minutos, la comercial de las salas, al parecer, 106. En esos 25 minutos se narra la historia de amor entre el  profesional y la niña, la parte más tierna y divertida de la cinta, la que explica muchas cosas de cómo funcionan las cosas y su razón.
Una gran película, muy reconocible y recordada. 

§ 2.640 El luchador (Darren Aronofsky, 2008)


Siempre he tenido a Mickey Rourke como un actor mediocre.  Y seguramente lo sea, pero en esta película da un tono bastante razonable y adecuado. Derrota, alcohol, enfermedades, oportunidades perdidas, un pasado mejor, ningún futuro, remordimientos, mala conciencias, pobreza, marginalidad, drogas... En realidad Rourke vivía de esa manera cuando hizo la película. Una especie de "enfant terrible" de la industria, mitad un juguete roto, mitad un héroe caído. Su aspecto físico, sus tatuajes, la ropa que lleva, todo concuerda para llevar a buen puerto un papel difícil y comprometido.
Pues todo eso y algo más es el "bestiario" que aprecias en esta cinta, bastante mejor de lo que, en principio, pudiera parecer. Más que nada porque la última (y única) que he visto de su director "Pi, fe en el caos (1998)" me pareció abracadabrante... directamente una película muy mala.
Marisa Tomei tiene ese punto de salvaje gata latina tan atractiva para un tipo de público muy cerrado en sus gustos y sus certezas. Tiene su gracia. Consigue darle un aire de borracha empedernida, entre ángel caído y redentora de almas más que creíble. No la he visto en otro papel tan comprometido como en este.

§ 3.898. Tu nombre envenena mis sueños (Pilar Miró, 1996)

Muy bien rodada. Gran guión (que procede de una novela de Jesús Leguina), excelente ambientación y diseño de producción, actores en su punto...