Tres historias independientes entre sí, que pretende narrar el espíritu de la Irlanda natal de Ford retratando situaciones características y peculiares. El narrador en off, bueno, mejor dicho el presentador es Tyrone Power, que dice que tiene raíces irlandesas, cosas que jamás hubiera supuesto.
No es un fresco muy bien coloreado. Llama la atención no tanto el propósito, sino el compromiso político implícito del último de los relatos, en donde encumbra a un dirigente del IRA, sacándole de la cárcel y facilitando su huida por parte de un miembro de la policía irlandesa... Es la clásica película que no vería si no hubiera estado firmada por Ford.
En todo caso es un buen entretenimiento.