miércoles, 23 de marzo de 2022

§ 2.650. Buffalo 66 (Vincent Gallo, 1998)

 

La tengo guardada hace muchos años y nunca me ha apetecido verla, aunque la tengo por interesante. Una historia muy poco convencional, mitad autobiográfica mitad exageración, o simplemente fantasía.
Cine independiente americano en la órbita de la marginalidad, el abandono y la ausencia de esperanza. No es exactamente una película "social", pero la ambientación está presente. Una familia muy singular, prácticamente desestructurada, con una madre que  no se sabe muy bien si no recuerda al hijo o no quiere recordarlo y un padre cantante con muy mal carácter que no parece tener ningún afecto por su hijo. Una familia muy deshumanizada, pendiente del fútbol americano, y completamente desaprensivos. No son capaces de tener afectos  normalizados.
Un reparto muy potente: Vincent Gallo, Christina Ricci, Ben Gazzara, Mickey Rourke, Rosanna Arquette, y Anjelica Huston. 
No es el cine que más me gusta, pero reconozco que es interesante, tiene su desarrollo y para ver cine tienes que ver de todo, también estas cosas.
Tiene algo de incomprensible, de discurso no lineal, de perspectiva difusa, de desarrollo poco convencional. Y a mi me siguen gustando más las películas clásicas, con planteamientos más "comprensibles". En esta cinta no sé dónde me quiere llevar, no acabo de comprender qué quiere decir, ni para qué ni cómo. Aun así, insisto, se deja ver y creo que será una película muy apreciada en el circuito 'indie'.

martes, 22 de marzo de 2022

§ 2.649. Ha nacido una estrella (William A. Wellman, 1937)

 

Emotiva historia que ha tenido varias versiones. Este es la segunda, después de Hollywood al desnudo (George Cukor, 1932), que acabo de ver hace un mes y me gustó mucho.
Dos actores brillantes: Fredric March, para muchos el mejor actor del mundo, y Janet Gaynor, que no he cultivado mucho.
Un color excesivamente intenso -estamos hablando de 1937- lastra la película, que no se aprecia del todo bien. El sonido, sin embargo, se escucha bastante bien. Seguro que hay mejores copias de la cinta. 
Es emotiva, simpática, llena de vida, pero se va volviendo amarga a lo largo del metraje. Y aunque es una historia muy conocida funciona perfectamente, incluso en estos días. 
La sed de triunfo, las energías del comienzo de la vida, la lucha por progresar, por sobrevivir, por ser capaz de conseguir los sueños más importantes de la vida.
Directorazo inmenso Wellman, del que he visto 17 de 69 que tiene a su nombre. Un año de estos tengo tiene que ser el año Wellman, como este lo es el de Walsh y Melville, y como otros años anteriores fueron otros directores: Wyler, Polansky, etc.

lunes, 21 de marzo de 2022

§ 2.648. Siempre estoy sola (Jack Clayton, 1964)

 

Una retrato íntimo y personal de una mujer que ha contraído varias veces matrimonio y siempre está rodeada de niños (5, cuatro de anteriores matrimonios). Algún tipo de trauma o problema previo, incluso de tipo psiquiátrico, parece rondarle la cabeza. La técnica del flashback conecta a la mujer con su pasado, mientras que la narración actual siempre está en tiempo presente. 
Una magnífica Anne Bancroft en todo su esplendor da cuerpo a un relato desencantado sobre la vida matrimonial, los celos y las infidelidades. Tiene una belleza 'griega', algo impersonal y clásica, con formas suaves y, a la vez, muy definidas.
Peter Finch es un actor de una pieza, algo rudo y nervioso en esa ocasión, más sosegado a medida que pasa la cinta. James Mason, eficaz como siempre, en un papel de cínico que no le va nada mal. Bueno, es difícil que hiciera algo mal en el cine.
Es una película rara, algo tenebrosa, un poco de terror, llega a ser agobiante. No llegas a saber cuál es la razón de mal que subyuga a la protagonista. ¿Mantener relaciones sexuales sin tener descendencia?, ¿miedo al sexo?, ¿insatisfacción sexual?

domingo, 20 de marzo de 2022

§ 2.647. La caza (Carlos Saura, 1966)

Película muy célebre del cine español Una introspección algo decadente sobre sí mismos y los demás, en una sociedad -la tardo franquista- ya herida de muerte en sus pretensiones de mantenimiento en su fórmula.
Sombría y desencantada. La soledad, los rencores, los celos, la amargura de las relaciones humanas, especialmente las de pareja, y ausencia total de esperanza. El saber que los días son iguales, que los tiempos pasados fueron mejores y no volverán, que no hay proyecto para el futuro.
El trazado de las relaciones entre los personajes es lo destacable de la cinta, su valía. La puesta en escena de esas relaciones su propuesta estética.
Carlos Saura es, desde luego, un grande del cine español. Un autor tremendamente prolífico y muy apreciado por público y crítica. Le tengo por muy influyente en las nuevas generaciones de cineastas, esos que se encuentran a medio camino entre lo clásicos de los cincuenta y las nuevas generaciones que darían un salto brutal con la apertura política y la transición democrática.
Una amargura de película, un retrato descarnado de una clase social muy singular, muy de la época.

§ 2.646. A pleno sol (René Clément, 1960)

 

Un clásico del cine francés. Es la tercera o cuarta vez que la veo y aunque siempre es agradable verla el impacto que te produce la primera vez es imposible de reproducir.
La novela también es estupenda, es de Patricia Highsmith. Tiene un remake: El talento de Mr. Ripley, de Anthony Minghella de 1999, también estupenda. Hubo un momento, hace años, que leí bastante a Highsmith y no me pareció, ni de lejos, su mejor novela. Aunque quizá sí era de más fácil traslación al cine. No sé. En cualquier caso la película es absolutamente redonda, magistral, cerrada y perfectamente engarzada.
Alain Delon está magistral, joven, absolutamente guapo, viril, con ese punto salvaje y canalla que tanto gusta a un tipo muy singular de mujer. En el fondo no deja de ser el retrato de un asesino, que pone su talento al servicio del mal.
De Clement he visto otras dos películas: Los felinos (1964), y  ¿Arde parís? (1966). Las tres son estupendas, magníficas de verdad.

sábado, 19 de marzo de 2022

§ 2.645. Nadie puede vencerme (Robert Wise, 1949)

 

Una película de boxeo con todos los cánones: apuestas amañadas, boxeadores fracasados, mujeres semifatales, utilleros poco dotados intelectualmente, cuentas que saldar, y, sobre todo, una excelente película de boxeo. Parece que estás en el ring, peleando, desando machacar a tu adversario, simplemente no amigo... Cuatro asaltos son suficientes para mostrar lo que un maestro director de cine quiere mostrar.
Un obra maestra.

jueves, 17 de marzo de 2022

§ 2.644. El poder del fuego (Michael Winner, 1979)

 

Interesante propuesta muy de la época, de finales de los setenta. Lo tiene todo para que fuese una cinta de más fuste, más potente. Un reparto brillante (Sophia Loren, James Coburn, O.J. Simpson,  Anthony Franciosa, Vincent Gardenia, George Grizzard y con intervenciones muy puntuales de Eli Wallach y Victor Mature), una música sugestiva (Gato Barbieri), una trama rápida y vivaz, ambiente exótico y alma de thriller. 
Y tiene buen desarrollo pero le falta esa genialidad que tienen o no tienen algunas cintas, y esta no la tiene. Se deja ver, por supuesto, de gusto ver a Sophia o a Coburn, pero carece de densidad, de profundidad, no es la forma de contar sino la manera en que se narra.
La complejidad del inicio no se desenvuelve, cuesta en algunos momentos seguir a los personajes y el hecho de no ver al personaje que se busca en gran parte de la cinta dificulta saber cómo evoluciona la película. Pero no es mala. Es una película normal y corriente de esa época. Sin más.

§ 3.405. Tristeza de amor (Eduardo Mallorquí, 1986)

  Recuerdo algunas noches cuando se emitía la serie y me quedaba a ver algún capítulo. La música es preciosa, la canción en realidad.  Vista...