lunes, 7 de abril de 2025

§ 3.756. El hombre atrapado (Fritz Lang, 1941)

Después de sus Western viene su etapa antinazi. Con ésta, con Los verdugos también mueren, y con El ministerio del miedo. Parece que las hacía de tres en tres. Luego las negras, que las volveros a ver todas por su orden si Dios quiere.
La primera vez que la vi me gustó mucho. Y, la verdad, esa segunda vez también me ha gustado mucho.
Una trama ciertamente inverosímil, que proviene de una novela de Geoffrey Household, que tuvo otra versión, no sé si realmente un remake o algo menos evidente, años más tarde, en 1977, a cargo de Rogue Male que se llamó: "Lejos de la manada"
El reparto es estupendo: Walter Pidgeon, en un papel que le va mucho; Joan Bennett, que luego será su musa, como antes Sylvia Sidney, George Sanders, tan imperial como siempre, John Carradine, que parece un fijo en sus películas.
Un reparto de lujo, de auténtico lujo.

§ 3.755. ESpíritu de conquista (Fritz Lang, 1941)

Otra del Oeste de Lang, la segunda en su filmografía. No sé si era un intento de entrar en el mercado de EE.UU. o si verdaderamente tenía interés en rodar cosas del oeste.
Lo cierto es que lo hace con un verdadero especialista en el género: Randolph Scott, que es vaquero por excelencia, el prototipo, el canon. No sé si será el que más películas del Oeste rodó, porque eso siempre es difícil de cuantificar, y porque en el cine mudo hay centenares de cintas de este género, pero, desde luego, hizo muchas, muy importantes, y al servicio de directores verdaderamente dótales en el género.
Qué planta, qué andares, qué forma de moverse. Supongo que así se conducían los vaqueros. Quizá no, pero el canon ha quedado de esta manera, como el de los mafiosos y la película de Coppola. 
Se acompaña de Robert Young, otro actor mítico de la historia del cine, además de Dean Jager, y Virginia Gilmore, guapa y blanca blanquísima.
Esta bien, se deja ver, pero carece de la profundidad de otras del Oeste de los grandes maestros: Ford, Hathaway, Hawks, Tournier, Mann, Boetricher, Arnold, King, etc. 
Una vez vi una enciclopedia del Western que no compré. Un diccionario de los Western más célebres de todos los tiempos. Debí comprarlo. No lo hice y me arrepiento. En cuanto lo vuelva a ver, lo compraré.

§ 3.754. La venganza de Frank James (Fritz Lang, 1940)

Primera película a color de Lang. Primer western de Lang. 
Es una secuela de Tierra de audaces (Henry King, 1940) y llama la atención como Lang, un director de muchísimo prestigio se pliega a hacer una saga, una continuación. Recuerdo bien la de King, que me gustó. Ésta es la segunda vez que la veo, quizá la tercera. Y también la recuerdo muy bien.
Me parece buena. Sin más. No es de lo mejor de Lang. Quizá sea fácil decir que el Western no es su género. Pero Encubridora es una del Oeste bastante decente, no superlativa, pero sí bastante buena. 
Ésta está bien, como digo. Pero no es película que destacaría de Lang. Por decirlo gráficamente, si le preguntases a 10.000 cinéticos del mundo cuál es su película favorita de Lang, casi ninguno diría que ésta. 
Más allá de la historia de venganza, que no sé si realmente responde a la verdad, es interesante pare apreciar el ambiente del Oeste, los decorados y ambientación de los hoteles, las cantinas, las ciudades, etc.
Muy interesarte ver cómo rueda Lang en espacios abiertos, lo que tuvo que ser una novedad para él, acostumbrado a obras en escenarios más cerrados, más recogidos. Es cierto que algunas otras películas ha rodado en espacios abiertos "limitados" -Nibelungos, las Arañas, por ejemplo- y que en otras eran escenarios "abiertos" de cartón piedra -La mujer en la luna, Metrópolis-, pero la prueba del algodón es rodar cintas del oeste. Aquí los espacios son gigantescos, y aquí se ve si verdaderamente sabe rodar al natural.
La belleza de Gene Tierney es abrumadora, verdaderamente abrumadora. Lo tiene todo. Una mirada brillante, una sonrisa proteica, una figura elegante, unos ojos inconfundibles, una forma de caminar en silencio, como si no estuviese en la sala, una tez blanca cuidada y sensible, una fijación y una forma de mirar a la cámara únicas e irrepetible. Es impresionante. Verdaderamente impresionante. No creo que haya mujeres en el cine actual con esa belleza. Hay mujeres muy guapas, pero no de esa belleza radiante y superlativa.
Lo de Henry Fonda es un escándalo. Punto. Un auténtico escándalo. Es el cine. Sin más.

§ 3.753. You and me (Fritz Lang, 1938)

Seguimos con el monográfico Lang.
Una comedia a medio camino entre la negra y la de situación. 
Un reparto verdaderamente impresionante.
Una estupendísima Sylvia Sidney, fina, guapa, dulce, sensual, pequeña y sonriente. Una musa de Lang en su llegada a EE.UU. al hacer con él varias películas. Hasta cierto punto puede considerarse un antecedente de Audrey Hepburn, que era la más guapas de las mujeres 'pequeñas'. Frente a las mujeres bandera que vendrían unos años más tarde, italiana y suecas principalmente, representa a la mujer del día a día, que carece de la rotundidad de otras pero a cambio derrocha alegría y entusiasmo.
El hierático pero sereno George Raft. Siempre de mafioso, adquiere en esta comedia un rol menos agresivo, con una vena cómica suave y dulce que no le va mal del todo. Varonil, con un aire de suficiencia de cualquier situación y con un recuerdo italiano en el pelo, en las pobladas cejas. Una mirada dura, sin demasiado fondo. Superficial pero con pasado.
Y, sobre todo, me encanta Harry Carey, un hombre de cine, capaz de todo, vaquero, por supuesto, pero también funcionando en este tipo de comedias negras, o ligeras, algo alejadas de las de situación o de las screwball.

domingo, 6 de abril de 2025

§ 3.752. Sólo se vive una vez (Fritz Lang, 1937)

Sólo la he visto una vez. Hace muchos años, seguramente más de veinte. Y la recordaba amarga, sombría, triste y desesperanzada. 
Y lo es. Pero también mantiene un hálito del sueño americano. Del país de las garantías y de la perseverancia en situar al ser humano por encima de todo. Puede leerse como un fracaso del sistema judicial americano, de la esperanza en el ser humano. Y, sobre todo, en el cerco que el  destino traza sobre las personas. Algunas condenadas a una vida dura, otras al triunfo sin merecerlo. Pero ambas, la perdedora y la exitosa, tienen trazado su destino desde siempre y todo aquello que hagan para modificar su directriz no tiene verdadera eficacia. Es artificio y sin sentido.
También hay un crítica a la mezquindad del ser humano. Capaz de perdonar, pero también de recordar y ser malvado.
La pareja Sylvia Sidney y Henry Fonda funcionan muy bien. Uno de los primeros trabajos de él. Ella comenzó un poco antes, en 1931, con La Calle, de King Vidor. Excelentes carreras las de ambos. 
La recordaba de forma parcialmente diferente. En el fondo es una cinta de cine negro, con sus características y sus tópicos. No forma parte del elenco de las (varias) obras maestras de Lang, pero es muy apreciable. Lástima que la copia que tengo no se vea excelentemente. Se ve bien, sin más. Con algunos grumos algunas sombras. 

§ 3.751. Furia (Fritz Lang, 1936)

Es la seunda vez que la veo. La recordaba bien, pero más corta y menos intensa. Es demoledora. Una crítica a la sociedad, a la justicia, a los prejuicios, a la estructura de convivencia, a la cultura propia del EE.UU. Hay que ser extraordinariamente valiente para que tu primera película una vez emigrado sea ésta. Pudo hacer un Western, de hecho los hizo luego, algo sencillo, fácil. Que no diese problemas.
Y, sin embargo, se mete de lleno en una película que critica de manera durísima uno de los dogmas de la cultura americana por excelencia: la capacidad de cada uno de hacer justicia por sí mismo. El linchamiento como método de solución de problemas.
Pero también es una reflexión sobre el infortunio, sobre cómo los acontecimientos fortuitos pueden enredarse y generar resultados verdaderamente aberrantes, de resultados contrarios a los pretendidos.
La vida no es sólo lo que uno prevé, o lo que organiza, o por lo que lucha, o a lo que se prepara. También es aquello que sucede alrededor de uno. A veces se controla, a veces no. A veces lo que sucede, conviene. A veces, todo lo contrario. 
También es una crítica despiadada al cotilleo, a la maledicencia, al rumor, al chisme, a la media verdad, a la noticia falsa, a la fake new. A las gallinas que pían y pían sin sentido. Al igual que un ser humano respira, otros pían.
Pues la reflexión que expone la cinta es precisamente ésta. 
Sylvia Sidney y Spencer Tracy funcionan a la perfección. Sobre todo él. Es un verdadero genio de la interpretación. Me ha gustado mucho Edward Ellis como Sheriff, y también está por ahí Walter Brennan, que no sé en cuántas películas ha participado, una barbaridad, en cualquier caso.
Me ha gustado mucho más que la primera vez que la vi. Fue la nochebuena de 2012. Y la crítica que hice sobre ella varía mucho sobre la que ahora he proyectado. La califiqué con un 9. Ahora la pongo un 10. Una película extraordinaria. 

sábado, 5 de abril de 2025

§ 3.750. Liliom (Fritz Lang, 1934)

Tengo a esta película, y a a Marea de luna, como las dos menos brillantes de Lang. Y probablemente lo sean. Es una cinta francesa, rodada en francés y probablemente en Francia. Quizá antes de emigrar a EE.UU. No lo sé, no conozco tan bien el periplo personal del Director. 
No me parece una temática Lang. No es un drama, no es de cine negro, no es mítica, ni tiene los giros y argumentos de Mabuse, Spione y similares. Además, se detiene demasiado en explicar una temática obvia: la relación del feriante con las mujeres. Ocupa casi una cuarta parte. Quizá la cinta estuviese pensada para más metraje, o sencillamente la copia se montó de otra manera. En todo caso, lo central del asunto no avanza hasta bien entrada la cuarta parte. 
Los argumentos cómicos a veces se esconden en un sarcasmo, en otros en un ironía, en otros en un chiste o una escena risible. Pero no parece tener continuidad en un género determinado. Los toques fantásticos de la redención parecen de Presburger, como poco. Tienen su gracia, pero sin más. 
Además no me parece que el trabajo de Charles Boyer pueda salvar la película. Lleva el peso, pero es infructuoso en ese sentido. No es un papel que le vaya bien. Richard Conte, o incluso Tyrano Power hubieran estado más cerca del tono adecuado para el papel. 
Me parece algo pueril la trama. No es que sea infantil, no es eso, pero muy sin sustancia. No me ha llegado nada. Nada de nada. 
Creo que es la peor de Lang. Desde luego la que menos me ha gustado de todas las que he visto suyas.