domingo, 16 de octubre de 2022

§ 2.793. El secreto de Mary Reilly (Stephen Frears, 1996)

Hace años que la tengo en 'cartera', comprada y en el estante de las que me quedan por ver, que ha bajado ya un poco pero que sigue teniendo más o menos 250 dvd.
Parece un producto típico del cine de los años 80. Se aprovecha el tirón de unos actores muy de moda y se construye una cinta clásica, sobre perspectiva gótica, algo de misterio y una buena dirección.
Lo que se pretende es elevar la calidad del currículum de algunos actores con cintas de solera y prestigio. Probablemente John Malkovich no necesite ese impulso, pues creo que se le puede considerar un actor prestigioso, pero sin duda Julia Roberts, e incluso Glenn Close sí necesiten ese tipo de apoyo, pues sus carreras se fundamentan más en las comedias de situación y dramas ligeros que en dramas espesos o profundos.
La película se rodea de un misterio que mantiene la tensión, y por momentos es interesante, pero cansa un tanto la pertinaz insistencia en mantener el drama oculto. Se tarde demasiado en comprender de qué va la historia. 
Julia mantiene la compostura, tiene esa actitud modosa que cuadra con el personaje. Glenn está algo atribulada y demasiado caricaturizada. Parece un dangerrotipo, un cromo, una simplificación de la realidad.
Malkovich está soberbio, muestra su complejidad y su morbosidad con cada movimiento. Es malvado y a la vez bueno, al menos formalmente. Tiene dos caras a cual más compleja. Es uno y dos, o dos en uno. Es el yo y su conciencia, o como dicen en algún momento, es uno y lo que le gustaría hacer sin tener escrúpulos. Es un papel que le cuadra bien.
Mantiene la tensión, es interesante porque no sabes qué ocurre o cómo se va a desarrollar, pero más allá de ese halo de misterio se me queda un poco corta la cinta. 
Bien por el director, no obstante, que idea una historia interesante y la proyecta bien. No creo que deba gozar de tan poco crédito como el que creo que tiene esta cinta. La tengo por no bien tratada por público y crítica. Hay algo que no cuadra del todo en la historia, a veces es demasiado lineal, y una vez presentada no parece avanzar con suficiente virtuosidad.

§ 2.792. Black Rain (Ridley Scott, 1989)

 

Es la segunda vez que la veo, y me ha impactado bastante menos. Es efectista, tiene su gracia, pero no es tan buena como Yakuza, que la vi ayer y precisamente por eso he visto esta, que no es exactamente un remake, ni una continuación, ni una segunda parte, pero si tiene una clara conexión.
Más allá de la falta absoluta de credibilidad, (credibilidad real, no cinematográfica) tiene un planteamiento excesivamente 'western',  de venganza, personal, que no le va. Sí está mejor narrada la parte del Japón moderno, lo tecnológico, las calles llenas de neon, etc. Pero los aspectos tradicionales son más deficitarios. 
El binomio que forman Michael Douglas con Andy García tiene su gracia. Sin ser verdaderamente poderoso. Sin embargo el papel de Ken Takakura está muy desaprovechado. Nada que ver el rol tan oscuro y frío de Yakuza, que es estupendo.
Scott tiene películas realmente fabulosas, pero a medida que su carrera avanza se van deslizando hacia un cine cada vez más comercial, hacia grandes producciones que arrasan en taquilla, aunque sea con una merma de su calidad fílmica.
El comienzo de su carrera auguraba, sencillamente, que se convertiría en uno de los mejores directores de todos los tiempos: Los duelistas (1977), Alien, el octavo pasajero (1979) y Blade Runner (1982).


§ 2.791. El tren de las 3:10 (James Mangold, 2007)

 

Es la segunda vez que la veo, más que la original, que sólo recuerdo haberla visto una. La original no la recuerdo así, ni por asomo. Aquí hay un retrato de acontecimientos, en la original lo es de sensaciones, de sentimientos. 
Siempre he recordado mejor la original que el remake. Y eso que esta cinta no está mal, se deja ver, es interesante y te hace pasar el rato, pero no es la original.
Y, obviamente, Russell Crowe no es, ni de lejos, Glenn Ford.

sábado, 15 de octubre de 2022

§ 2.790. Yakuza (Sydney Pollack, 1974)

 

Es una maravilla. Es la segunda vez que la veo y me ha parecido bastante mejor cinta. Escribo esto en el momento de empezar a verla, pero la vez que la vi me quedé con la sensación de que la segunda vez que la viera sería más satisfactoria.
Y así ha sido.
No es, aunque pueda parecerlo, una película de violencia. Antes al contrario.
Lo de Robert Mitchum es escandaloso, qué credibilidad, qué versatilidad, qué armonía en todo lo que hace. Es uno de los mejores actores de todos los tiempos, al menos de los que más me gustan a mi.
Me ha sorprendido Ken Takakura, siempre a la sombra de Toshiro Mifune y de la estirpe de actores japoneses representa bien la 'nueva' ola de grandes actores.
Interesante, sin mas, Brian Keith. Muy interesante el papel que interpreta Keiko Kishi, guapa y con ese halo de misterio y oscuridad que enamora en el cine a los espectadores.

viernes, 14 de octubre de 2022

§ 2.789. El dormilón (Woody Allen, 1973)

 

Bueno... las típicas chorradas de Allen que no me agrandan demasiado y que, sin ningún género de dudas, se siguen viendo todavía porque son de él, única y exclusivamente. 
Una especie de comedia futurista en una sociedad más cercana al Orwell de 1984 que a la sociedad que plantea Blade Runner.
Introduce su crítica a cualquier circunstancia o situación de la sociedad en la que vive, permitiéndose la crítica porque él está en el futuro, a 200 años de aquí. 
Es inteligente pero no me llega. En realidad soy de esos que aprecia más los dramas de Allen que las comedias.

jueves, 13 de octubre de 2022

§ 2.788. - Saraband (Ingmar Bergman, 2003)

 

Al parecer es continuación de Secretos de un matrimonio (1973), que he visto todavía, aunque si Dios quiere terminaré viendo alguna vez.
Problemas adultos de gente adulta.
Un par de actores absolutamente maravillosos. No sé si yo envejeceré como Erland Josephson, pero me gustaría. Pero lo que de verdad me gustaría es que mi mujer envejeciera como Liv Ullmann. Es de una belleza tan serena, tan madura, tan adulta, tan llena de vida, tan llena de experiencias, tan vivida. Realmente cada arruga de su cara refleja lo mucho que ha vivido, y da verdadera satisfacción apreciar cómo ha envejecido y de qué manera. Una absoluta belleza.
Me ha parecido una maravilla de película, una obra de arte, su última gran película, aunque fuera para la televisión.

miércoles, 12 de octubre de 2022

§ 2.787. Elephant (Gus Van Sant, 2003)

 

Retrato caleidoscópico de una juventud desencantada en la sociedad bienpensante norteamericana.
Armas y tiros en un instituto americano, en Columbine en abril de 1999. Un hecho real que no es la primera, ni seguramente será la última vez, que es llevado al cine. La película fue premiada y es reconocida como una cinta muy interesante. Pero no me llega. En general me gustan las mentiras, ni me agrada el cine político, ni los biopic (a no ser que estén muy bien hechos), ni el cine documental, testimonial y similar. Todo aquellos que escape del mero entretenimiento me cansa, me aburre y me abruma. No pretende ser un cinéfilo, aunque Z, por ejemplo, de Costa-Gavras me pareció una maravilla de película, como Desaparecido. Pero eso son palabras absolutamente mayores. 
La perspectiva que adopta es situarse en la piel de los alumnos que sufren el tiroteo. Presenta a los personajes individualmente, llegando al instituto, caminando en un día normal y corriente, y siempre filmándolos por detrás. También son presentados así lo dos chicos que provocan la masacre, saludando a los chicos protagonistas que había presentado hacía un minuto. Todos son conocidos. Todos sabes qué hace el otro, todos recelan de otros.
El todo abiertamente documental de la cinta me aburre soberanamente. Me ha parecido un 'tostón'.
Metraje más que contenido, 81 minutos.

§ 3.899. Estos son los condenados (Joseph Losey, 1963)

Terror británico a cargo de la Hammer, por un director estadounidense exiliado en Inglaterra porque era perseguido por sus ideas políticas e...