miércoles, 25 de enero de 2017

SODERBERGH, Steven. Solaris (2002)

Las películas de ciencia ficción son, al menos para mi, raras, difíciles, con tramas poco convencionales. Pero si están bien hechas, como es el caso, si están bien montadas, son eficaces, sirven a lo que se pretende y motivan a la reflexión.
En Solaris, una estación artificial que orbita muy lejos de la tierra se están produciendo cosas extrañas. Esencialmente que se construyen, por la mente de los allí residentes, personajes vivos que son iguales a los fallecidos. Imágenes reales, personajes reales, con carnalidad, idénticos a los muertos. Eso es un problema, porque si alguno vuelve a la tierra se pueden plantear problemas éticos importantes: ¿qué hacer con ellos?.
Clooney lo hace bien, aunque no es un papel para él. No tiene ese presencia de actor clásico, profundo, pétreo.
La película entretiene, es bonita, se deja ver y para ser de ciencia ficción no es mala. Digo eso, porque realmente, películas espléndidas de ciencia ficción no hay muchas, o por lo menos no hay muchas obras de arte, no hay espléndidas películas de fc.
Es un género tendencialmente propenso al gore, al desparrame, a los moustros, mentales o físicos, etc. No es en sí un género cinematográfico, no hay paisajes, como el Wester, ni tan espectacular como las de guerra, ni tan emotivas como los musicales, o los melodramas. Es difícil hacer una excelente película de ciencia ficción.
Soderberg es eficiente, buen director, sabe el oficio, puedes fiarte de sus película, es un director seguro. A mi la que más me ha gustado es Kafka, y la de Erin Brocovich, también algo el Che. Las demás no tanto, son entretenidos, son alimenticias, son unas películas más, como esta.

martes, 24 de enero de 2017

MAYO, Archie. La legión negra (1937)

Pues el tema de siempre, bajo una fórmula distinta. La lucha por el trabajo, el proteccionismo económico, la pureza de raza, los míos frente a los tuyos, nosotros frente a ellos, los de aquí frente a los de allí.
Seguro que a Donald Trump esta película le motivo sentimientos concretos, probablemente distintos a los míos. Es una película interesante para ver, sobre todo desde un punto de vista laboral. En una lista de las películas laborales no debería faltar.
Se ha quedado un poco anticuada, los decorados, los diálogos, incluso los ademanes y el movimiento de las personas es un poco esteriotipado. Además la trama aunque es intensa es un poco básica, y se nota.
No es un problema de dirección, ni de guión, ni de trama, ni de actores, es, simplemente, un problema relacionado con el paso del tiempo, la ligereza de las cámaras y los trávelíng, la capacidad de filmar escenarios y recursos técnicos varios...
Con todo se deja ver, y, al menos a mi, me ha motivado.

domingo, 22 de enero de 2017

FORD, John. El sargento negro (1960)


Ford en estado puro. Me encanta, me parece de lo mejor del cine de todos los tiempos. El cine es lo que dice Ford. Punto. Es canónico, es como tiene que ser, es como debe ser. Es como es.
Estupendo, magnífico, maravilloso...
Esta es, sin duda, una cinta menor de Ford, pero !!vaya¡¡ si esta es la menor, cómo serán las mayores puede imaginarse un lector neófito en estas cosas del cine!!!
Me parece que desarrolla la cinta de una manera hábil, con suma facilidad, y siempre con un sentido definido, cierto, con una guía directriz que guía el desarrollo de la trama.
Pensaba que era distinta, pero me ha sorprendido gratamente. Y luego decían que Ford era un facha, un extremista, un racista, y demás tonterías que dice la gente beauty!!!


sábado, 21 de enero de 2017

MANKIEWICZ, Joseph L. El día de los tramposos (1970)


Esperaba una lección de cine y me he llevado una sorpresa. Nada comparable a las otras películas de Mankiewcz, auténtico maestro del cine. No es que no me haya gustado, que sí me ha gustado, es que esperaba muchísimo más. Es difícil hacer una especie de comedia dentro de un Westher, aderezado en un embalaje carcelario.
Comparadas con otras películas suyas esta es la peor. Sin ninguna duda. Y no es que no tenga guión, metraje adecuado, actores magnifico... es que le falta algo para ser como las otras cintas suyas.
Después de esta sólo hizo La huella, película difícil de ver que sólo se sostiene por el duelo interpretativo, magnífico sí, entre Olivier y Caine.
Pero es que lo había rodado antes era brutal, salvaje, magnífico: básicamente lo siguiente:
- Solo en la noche (1946)
- El fantasma y la señora Muir (1947)
- Odio entre hermanos (1949)
- Eva al desnudo (1950)
- Operación Cicerón (1952)
- Julio Cesar (1953)
- La condesa descalza (1954)
- De repente el último verano (1959)
- Cleopatra (1963)
Rodó alguna más que se me escapa, pero esto es lo esencial suyo... palabras mayores, en las que no es que sobre, pero es que agrande, esta cinta. La huella, su última aportación es mucho mejor película.
Pero curiosamente, en las valoraciones de los aficionados no sale mal parada en comparación con otras obras suyas. Una nota mejor que Eva al desnudo claro, pero tan buena como el Fantasma y la señora, o Operación Cicerón...

viernes, 20 de enero de 2017

RAY, Nicholas. Nacida para el mal (1950)

Ver a Joan Fontaine, con esa cara de mujer con clase, guapa y poco trabajada por la vida haciendo de mala es un poco contradictorio. Pero cuando va avanzando la cinta descubres que es su hábitat natural. Es pérfida, es una arpía, es una precursora de las femme fatale ahora mucho más espectaculares en su belleza salvaje pero mucho menos inteligentes en el desarrollo de sus propósitos.
La trama es, simplemente perfecta, su guión más que aceptable, excepto al principio, que es un poco confuso, porque no se explica del todo bien cuál es la razón de la llegada de Christabel a la casa de su prima Donna. Ni tampoco se expone bien la relación con su tío, para el que trabaja Donna. El millonario ya estaba allí cuando ella llegó, pero no se expone como ha llegado, y cual es la profundidad de su relación con Donna.
El millonario es un, para mi desconocido (ligeramente me suena de alguna película de capa y espada) Zachary Scott, y no lo hace mal.
Pero el que está salvaje, el que doma el papel y es capaz de darle entidad en sí mismo es Robert Ryan. Es un actor inmenso, capaz de interpretar cualquier tipo de hombre, con intensidad en su interpretación, con matices, no se hace plano, incluso en cintas como esta en donde tiene que hacer algo para él no acostumbrado, de galán despechado.
Me ha gustado.
En realidad de Ray me gustan más las antiguas que aquellas que le encumbraron (y seguramente le hicieron ganar dinero). Me gusta más, por ejemplo, Llamad a cualquier puerta (1949); En un lugar solitario (1950), ésta o Infierno en las nubes (1951), que: Más poderoso que la vida (1956), Amarga victoria (1957), Los dientes del diablo (1960) o 55 días en Pekín (1963).
Aparte quedan sus dos películas más conocidas: Johnny Guitar (1954), y Rebelde sin causa (1955).

jueves, 19 de enero de 2017

FULLER, Samuel. 40 pistolas (1957)

   Me ha gustado. En realidad me gustan casi todas las películas del Oeste, casi todas de Fuller y todas de Stamwyck, que es una actriz magnífica, con una presencia definitiva en la pantalla, aunque este no es su tipo de papel. Le va más ser femme fatale... papeles oscuros, con personalidades retorcidas, crueles, que utilizan sus encantos para hacer sufrir a los hombres que están a su alrededor.
   En esta cinta Fuller pretende hacer algo difícil, transportar este esquema, este modelo de mujer fatal tan típica de ella a un escenario de Westher, en algo parecido a "Sólo ante el peligro" de Zinneman.
   Fuller es un hombre singular, contrario a la violencia física, pues no en vano fue militar de carrera e hizo una de las mejores películas antibelicista de todos los tiempo: "Uno Rojo: división de choque".
   La película me ha gustado pero a veces he pensado que el metraje ha sido cortado, no sé por qué razón. 76 minutos se hacen pocos para una película A de un director top. No se explican determinadas cosas en la cinta, se dan como sabidas, sobre todo la razón por la que se acude al pueblo, y que son, en realidad, dos hermanos y un hijo, o tres hermanos, que todavía no lo sé.
   Además, no se sabe si Barbara es viuda o soltera, lo cual es importante para el desarrollo de la historia. En definitiva, es buena cinta pero podía haber sido mejor cinta, más contundente, más definitiva, una mejor obra.
Barry Sullivan es para mi un desconocido, no tanto Dean Jagger. Le ha faltado a la película un gran protagonista principal. Con eso y un metraje algo mayor la película podría haber sido una excelente obra. Tal y como está es simplemente una más, buena, pero una más del género.

miércoles, 18 de enero de 2017

HARRIS, James. B. Estado de alarma (1965)

Entrada número 1000. Una bonita cifra. He visto muchas más, y tengo fichadas muchas más. Aproximadamente unas 3500. Quizá alguna más, pero no llego a 4000.
En unos años hay que llegar a las 10.000 cintas.
Esta es magnífica, una película de guerra estupenda, con perfiles muy claros, especialmente el del copian del barco, del destructor americano, interpretado por un Richard Widmark estupendo...
El punto de vista del director es acertado, el tono también, el metraje oportuno. Quizá la música no acompaña, y los efectos especiales del hielo son raros...
Es un director que sólo tiene cinco cintas, una por década. Sinceramente, se me hace raro que con este debut tan interesante no haya hecho muchas más.
Es un debut espléndido...

§ 3890. Sisu (Jalmari Helander, 2022)

Pocas películas Finlandeses he visto. La verdad. Más allá de este señor y Aki Kaurismakis, no conozco más cineastas Finlandeses. Y esto es u...