lunes, 2 de octubre de 2023

§ 3.135. Todo el mundo gana (Karel Reisz, 1990)

 

Una película que quizá pudiera dar para más. No es exactamente un melodrama judicial, pero tiene visos de película mediocre. La dramatización de la historia no cuaja. Hay algo raro, algo que no funciona bien. Lo que se esconde es lo importante. Y quizá se deja demasiado a la imaginación del espectador.
Sobre todo cuando narra el interés de ella en él. Es totalmente ficticio, fuera de lugar, impropio. No es ni razonable ni adecuado. No tiene demasiado sentido. Un hombre con experiencia y bagaje personal, social y profesional no se deja embaucar de esa manera. No un hombre como Nolte, que es el prototipo de hombre viril, fuerte, y con gran personalidad.
Un juvenil y rejuvenecido Nick Nolte, con una bellísima Debra Winger, que, en verdad, está en estado de gracia. Qué belleza. Les acompañan: el securrio Will Patton, Judith Ivey, y un Jack Warden tan serio y potente como siempre.
El guión es de Arthur Miller, sobre una obra propia. Parece raro que un grande del teatro y de la literatura vuelva a la brega de un trabajo tan exigente como el de guionista. Seguramente tuvo mucho libertad en sus actuaciones.

domingo, 1 de octubre de 2023

§ 3.134. Unión pacífico (Cecil B DeMille, 1939)

 

Un Western canónico, de los de siempre, con mucha historia. Una película de gran formato, con alto sentido patriótico, una especie de epopeya moderna. Una película que incluso puede tener un cierto espíritu pedagógica, pues puede ayudar a explicar lo que, visto desde nuestra perspectiva actual, puede considerarse una decisión estratégica capital: la construcción de un ferrocarril que hubiera ambos Océanos. Estoy convencido que a Sergio Leone esta película le encantaba. Ciertos planos de la construcción del ferrocarril de su Hasta que llegó su hora (1968) están claramente inspirados en algunos de esta cinta. Aunque, naturalmente, son películas radicalmente diferentes, tanto en el tono como en el fondo.
DeMille tiene algo en su forma de rodar que lo hace una especie de clásico intemporal. No es que rodara muchas películas, pero cinta por cinta, como se diría en boxeo cuando se menta el kilo por kilo para determinar, sobre todo sonoras. Sí es cierto que tiene muchas mudas, pero las sonoras en casi treinta años no son muchas. Pero todas especiales, interesantes y muy míticas. 
El reparto de esta cinta es, sencillamente espectacular: Barbara Stanwyck, tan espléndida como siempre, brutalidad emocional, sencillez en el trato, y perfidia en la mirada, Joel McCrea, algo impostado y, como siempre que le veo en papeles duros, poco creíble, falto de mala leche; Akim Tamiroff, Robert Preston, tan grande como siempre, Brian Donlevy tan su característico  bigotito, y Anthony Quinn, con poquísimo metraje (no creo que llegue a cinco en pantalla).

§ 3.133. Perros callejeros II (José Antonio De La Loma, 1979)

 

Bueno. Lo que se esperaba. Cine "quinqui" en estado puro. Un tipo de cine absolutamente incomprensible para cualquier cinéfilo que no sea de este país.
Un tipo de cine básico, emocional, primario. Agarrado a las tripas, al estomago, en donde el guión, la trama, los diálogos nada tienen que reflejar en la dinámica de la trama. Tiene un aire dramático que, por momentos, pretende elevarse a algo más de lo que es.

sábado, 30 de septiembre de 2023

§ 3.132. El enigma del yate (Carlos Aured, 1983)

Si sabes lo que  quieres ver no te decepciona. Pero si esperas algún producto medianamente sofisticado quizá debiera buscar en otro lado.
Muy de la época en relación con la pretensión onírica. Pero muy deficiente en su planteamiento estético. Seguramente, en su momento, era un planteamiento atrayente, pero los años han tratado fatal a este tipo de cintas, residuales en una organización cinéfila mínimamente organizada. Ni siquiera se puede ver, en esa frase tan mía.
La frigidez tiene un tratamiento radicalmente histérico en la cinta, rallando en la enfermedad mental.  Es horroroso el planteamiento de la sexualidad de los personajes. Burdo, innecesariamente barroco, superficial, tirando a lesbiano, y sumamente básico.

viernes, 29 de septiembre de 2023

§ 3.131. El último Kamikaze (Paul Naschy, 1984)

 

Pues no creo que pretendiera ser un remake de El Samurai (El silencio de un hombre), de Melville. No tiene esa idea, pero desde luego le influyó en su construcción. No es la primera vez que aprecio que Naschy lo que hace es traer, a su manera, elementos de otras películas. Seguro que veía mucho cine y era un gran aficionado.
Y, de una manera u otra, también tiene elementos de El Crack 2, incluso actores que participaron en las dos cintas, la del 1981 y la de 1983.
Creo que las cintas de este género, el 'fantaterror', hay que verlas con ligereza. Sin pretensiones. De manera liviana. 
En esta, además, como si de una película de 007 se tratase nos hace un recorrido por varios países que, la verdad, no aportan nada a la trama, más allá de emular esas cintas de un género super singular. 
Me ha gustado mucho el estilo  y la belleza clásica de Irán Eory, una actriz de esas que parece que no tiene carrera pero filmaron más de 60 cintas. Bellezón de siempre, de los que me gustan. Con estilo, con ese pelo que siempre me recuerda al de mi mujer.
Además de Naschy y la citada Irán intervienen: José Bódalo, que la verdad, supongo que lo hace por necesidades alimenticias, y Manuel Tejada. Actores de siempre en el escena de aquellos años.

jueves, 28 de septiembre de 2023

§ 3.130. Malas tierras (Terrence Malick, 1973)

 

Le tenía a Malick como un director cosmopolita, menos apegado al terruño sureño. Porque esta película parece un relato sureño de Tennessee William o de William Faulkner. Emociones primarias, sentimientos básicos. Luces y sombras de la vida, poesía coral y en movimiento. Imágenes que no conducen a ningún sitio.
Vaqueros ingenuos, pelirrojas pícaras pero inexpertas. El primer amor de Turgeniev en versión postmoderna. Algo irracional y salvaje, irreflexivo pero contundente. 
Un poema visual atrayente y sugestivo. Sin demasiado interés en observar una dinámica ortodoxa pero tampoco abiertamente rupturista. 
Es el debut cinematográfico de Malick. La pareja Martin Sheen y Sissy Spacek no me parece que tengan mucha química. A lo mejor eso era precisamente lo que quería el director. Porque aunque en la película se llevan 10 años -es lo que dicen en un momento inicial de la cinta- ella parece mucho más niña, y el mayor. La carrera de él si la he seguido bastante, y me gusta. Siempre con un aire de autenticidad, hombría bien entendidas y compromiso moral. La de ella nunca me ha gustado. Ella no me gusta. A pesar de ser pelirroja. Siempre me han gustado las pelirrojas. Mi mujer lo es.
Se acompañan en el primer tercio de Warren Oates, que no tiene mucho metraje.
Una especie de Road Movie extraña, distinta, poética y con un todo lírico por medida de su propia validez. Una Road Movie de interior, si eso es posible. 
Me ha gustado. Bastante más que cualquier otra del director.

miércoles, 27 de septiembre de 2023

§ 3.129. Apollo 18 (Gonzalo López-Gallego, 2011)

 

Perteneciente a la categoría de "metraje encontrado", o incluso a la de "falso documental", aborda una teoría fructífera para los conspiranoicos de todo tiempo y lugar: que el viaje a al luna no fue tan claro y limpio como se ha mostrado siempre. En este caso la hipótesis no es que nunca se fue, y que, por tanto, todo fue un montaje. Aquí se discurre por otro camino. Más aterrador y bizarro. Sin mucho gore, pero con sus buenas dosis de sustos y efectos visuales y sonoros, entretiene y aumenta de interés a medida que el metraje avanza. 
Previsible y no especialmente brillante, se deja ver. Sin más.

§ 3.390. Sacco y Vanzetti (Guiliano Montaldo, 1971)

  Una muy buena película, con una crítica dura al sistema político americano, su aversión a los sindicatos libres de trabajadores y a todo l...