miércoles, 15 de junio de 2016

BERRY, John. Yo amé a un asesino (1951)

Buena cinta. Ya vista con otra de Lewis Allen, que es quizá mejor. Es la misma idea, un secuestro en la propia casa de una familia por un maleante, aquel quería matar el presidente de EE.UU. desde la ventana de la casa desde la que se veía una estación de tren en donde iba a realizar una parada técnica, en esta es algo más sencilla la trama, un maleante que acaba de cometer un atraco se refugia en una piscina pública. En ella conoce a una chica a la que espera a la salida para intentar despistar a la policía y luego se dirige a su casa y secuestra a toda la familia.
Final previsible. Muy bien Garfield, en su papel estelar, no el de esta película, sino en general el de mafioso pequeño que no tiene buena suerte, porque no se la merece.
Shelley Winters no me gusta nada, nunca me ha gustado, siempre me la he imaginado como camarera en un bar del Oeste, sirviendo Whisky barato a Cowboys cansados de pelear con la vida que tienen.
Buen guión y buen desarrollo de la trama. En general está lograda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

§ 3.376. El relojero de Saint-Paul (Bertrand Tavernier, 1973)

  Debut cinematográfico de Tavernier, después de dos cosas en colaboración con varios directores. Novela de George Simenon. Intriga, remordi...