viernes, 27 de septiembre de 2013

SILVERSTEIN, Eliot. Un hombre llamado caballo (1970)

Bueno, una especie de documental gráfico sobre las costumbres de los indios a través de los ojos de un aristócrata británico que es secuestrado por unos siux y se convierte en uno de ellos. Nada especialmente destacado, más allá del rito del sol, que se suda de que sea, o haya sido, realmente empleado, al menos yo. Al comienzo del film se comenta que la forma de vida que se muestra está documentada, y demás. Pero en realidad, más allá de las batallitas  y la forma de guerrear la película no narra más aspectos de la vida común y diaria de los indios que ese rito. Algo se aprecia sobre la forma de comer, pero poco, y muy poco de la organización social, política y familiar de los indios.
No está mal, con todo. Se deja ver y es entretenida. Tiene una continuación que intentaré ver. En realidad dos de la saga, la venganza, y el triunfo. Curiosamente de directores distintos las tres.

jueves, 26 de septiembre de 2013

MANN, Anthony. Bahía negra (1953)

Los grandes directores hacen grandes películas. No tiene mucho más misterio. Entretenida, divertida, con grandes escenas, buenas interpretaciones, sabrosa, bonita, lógica, previsible, encantadora.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

JEWISON, Norman. La sentencia (2003)

Película bastante poca cosa. Jueza encargada de buscar a un criminal de guerra francés colaboracionista con Vichy, que lleva cincuenta años huido de la justicia que lo condenó a muerte ocultándose en monasterios y casas de Dios.
Mala, mala, mala. Caine no lo hace mal, en realidad habría que preguntar qué hace mal él, pero no es suficiente para salvar una película totalmente prescindible.

martes, 24 de septiembre de 2013

THORPE, Richard. Al caer la noche (1937)


Casi obra de teatro, más que película, narra la seducción que una muchacha común y normal siente por el mal, la pillería, el engaño y la mentira. Una chica alojada en un hotel es asesinada. Al día siguiente una viejecita bastante impertinente y que se hace la enferma postrada en una silla de ruedas sin necesitarlo contrata al botones de ese hotel, que aparece en la casa con el pretexto de hablar de la boda que va a contraer con la criada. La sobrina de la señora rechaza al abogado de la familia con idéntica determinación con la que se siente atraía por el chico.
El propósito de él, claro está es el dinero que guarda la anciana.
Aunque es un poco larga no se hace muy pesada. El doblaje no es muy bueno, con una voces muy estridentes y agudas, y el color pierde como energía en algún momento de la película, pero no está mal. Se deja ver y entretiene.

lunes, 23 de septiembre de 2013

WILDER, Billy. Berlín Occidente (1948)



Muy buena comedia de situación, dirigida por el gran Wilder, lo cual es una garantía de éxito, tanto en taquilla como en crítica. En este caso nos presenta una versión edulcorada el ejército de ocupación Yanki en Berlín tras la II Guerra Mundial.
Dos escenas son colosales. Cuando en el avión la mujer congresista ordena la pluma de escribir y las gafas dentro de una maleta de viaje. Y, en segundo lugar, cuando el protagonista persigue a la mujer para besarla en una oficina y va abriendo ella para cerrarle el paso y cerrándolas él los cajones metálicos de ordenación de ficheros.
Se deja ver, tiene muy buena fotografía, y los diálogos son bonitos, sin tener en general la chispa de las diez o doce obras maestras de él.

domingo, 22 de septiembre de 2013

007. Diamantes para la eternidad (Guy Hamilton, 1971)

Otra más de la saga, tan insustancial como casi todas. Entretenida, pero menos que otras, aunque es divertida como todas.
Peor película en conjunto que la anterior, más película y menos telefilm. Vuelta a Conery y liquidación de Labezy, que no lo hacía nada mal... Pero no sé muy bien por qué sólo rodó una de la saga...

007 al servicio secreto de su majestad (Peter Hunt, 1969)

Pues me ha gustado mucho la película. Desde luego más que otras de la saga. Es más real, es un Bond más cierto, vulnerable, menos fantasioso, menos ligón de película y beso de desmayarse y más rudo y metido en faena.
No entiendo muy bien la fama que tiene esta concreta de la serie de mala o poco Jamesboniana... todo lo contrario, las últimas con el nuevo actor este, tan gordito y poco galán, tan musculoso y con escenas tan típicas y tópicas de la lucha entre espías, incluyendo escena de violencia real y de tortura en el fondo es una vuelta a ésta. Es cierto, en este sentido, que es menor almibarada, menos azucarada, más dura, pero tiene más guión, los diálogos son más reales, y en conjunto es muy película. Otras de la serie parecen, sin más, un telefilm.

§ 3.388. Fat city (John Huston, 1972)

  La vi hace años por primera vez. Obviamente he cambiado mi punto de vista sobre ella. Es una obra maestra. Le puse un 9, no tengo claro qu...