lunes, 8 de mayo de 2017

sábado, 6 de mayo de 2017

MILLER, David. Los valientes andan solos (1962)


Maravillosa. Excelente. La tenía arrinconada, en el estante de la que tengo que ver. Y la compré por Kirk, no por otra cosa. No me imaginaba que era tan magnífica. Un guión absolutamente maravilloso, donde nada sobra, todo tiene una explicación, lo del comienzo vuelve al final, el pasado ya no lo es, el futuro llegará o ha llegado en forma de premonición.
El pasado es la vida libre, sin cortapisas, haciendo lo que cada uno quiere; el presente es la lucha contra los convencionalismos sociales, la vida en pareja, la prole; el futuro es donde todavía no has estado, no quieres estar pero inevitablemente tienes que ir...
Este tipo de películas, precuspulares, decadentes, con personajes anacrónicos, incapaces de adaptarse a los nuevos tiempos, a la realidad que viene, que mantienen cada vez menores convicciones en sus propios valores, porque son puestos en duda por la realidad, pero que los conservan y mantienen por no ser capaces de enfrentarse a la necesaria mutación de sí mismo o están muy bien hechas, y son agradables de ver y se recuerdan con verdadera devoción, o bien son un castañazo. Esta es de las primeras, sin duda.
Un Kirk en estado de gracia. Una Tena Rowlands guapísima y, que, además, como en casino todas sus cintas, llora. Es una actriz que yo siempre la recuerdo llorando. 
Me ha gustado, aunque no es su mejor papel, ni mucho menos, Walter Matthau, muy joven pero apuntando maneras...

viernes, 5 de mayo de 2017

DERAY, Jacques. Red siniestra (1966)


Lino Ventura es un actor encasillado en papeles de policía. Lo hace muy bien, muy creíble. Además de policía francés o italiano. Es muy creíble.
Esta historia tiene de bueno que tardas bastante en apreciar de qué va... Lo puedes imaginar, pero no lo sabes hasta que llevas una hora de película. Mantiene bien el tono y la intriga.
No es una gran película, pero puede verse, una vez en la vida... Los demás actores no me son conocidos. No es especialmente buena.

jueves, 4 de mayo de 2017

DE TOTH, André. El día de los forajidos (1959)


Un verdadero regalo. No es una cinta muy reconocida, al menos yo no lo tengo como tal. Y, desde luego, merece ubicarse en un lugar destacado. Me ha parecido magnífica. Un tempo ideal, un desarrollo eficaz, soberbio, algo minimalista, con una cierta lentitud pero con mucho fondo. 
El guión es magnífico, y los diálogos están bien estructurados. La historia es realmente estupenda.
El director es estupendo. He visto pocas cosas suyas, pero es muy bueno. Junto con Korda y Curtiz son los húngaros más conocidos en el Hollywood de los años cuarenta. Este, además, tiene dos peculiaridades, le faltaba un ojo, como a Ford, y se casó con Verónica Lake, lo que son palabras mayores. Una diosa del cine.
Los actores son magníficos. El prolífico Robert Ryan, que es capaz de hacer de todo, y todo bien. Y un Gran Burl Ives, un actor muy encasillado por su físico, del tipo que gustan en las películas británicas, con unos secundarios más que interesantes para las películas del Oeste. Tina Louise como mujer del granjero lo hace muy bien, actriz escondida, que tiene más películas de lo que parece, y que cumple sobradamente su rol en la cinta.
Redimirse en el sacrificio personal, estar dispuesto a pagar un precio por los errores del pasado, por alto que este sea, es una de las características del antihéroe moderno.
Un claro antecedente de los Odiosos Ocho, de Tarantino. La verdad es que esta y El Correo del Infierno, de Hathaway son dos claras cintas que sirvieron de soporte a Tarantino. Los Odiosos... es una mezcla de los dos. La caravana, el frío helador, los asaltantes... Obviamente no estoy diciendo que sea una copia, ni mucho menos. Pero sí son claro antecedentes de ella. Y conociendo a Tarantino, que dice que más de director de cine el visitador de cine, pues no es tan descabellado que en el momento de guionizar la cinta se hubiera apoyado en antecedentes que él hubiera visto, como estos dos, entre otras películas, pues el género del oeste puede tener miles de películas... Es probablemente el género más filmado.

miércoles, 3 de mayo de 2017

ENRIGHT, Ray. Los asaltantes de Kansas (1950)


Una más del Oeste, un poco paródica en sí misma. Tras una trama real, al parecer, se rueda una película bastante mediocre. Sólo tiene bueno que dura poco, 80 minutos.
No es que me haya gustado mucho precisamente, pero hay que ver de todo, incluyendo estos Wester mediocres rodados a saco por los estudios para un público ávido de cine, en donde se iba dos o tres veces a la semana. Era la diversión nacional.

martes, 2 de mayo de 2017

BERGMAN, Ingmar. Los comulgantes (1963)


   Maravillosa cinta, indiscutiblemente suya... No hay más que ver dos fotograbas para saber de quién es. Sus dos problemas que le torturaron toda la vida: el sentimiento religioso y las relaciones de pareja juntos en un mismo escenario. 
   Llama la atención, y mucho, la capacidad que tiene para realizar escenografías maravillosas con poquísimo recorrido. No tiene más que una sala blanca, que es una iglesia, una escuela y un par de tomas en el exterior, netamente sueco.
  Qué casualidad, la iglesia y la escuela como lugar de encuentro y desarrollo de las personas, mitad organizadora de la personalidad, mitad represoras de uno mismo.
   Los actores, magníficos, sobre todo el sacerdote, interpretado por Gunnar Björnstrand, que sólo escribirlo se me hace difícil...

lunes, 1 de mayo de 2017

MATÉ, Rudolph. El León de Esparta (1962)


Historia varias veces vista, siempre con un mismo trasfondo de realidad, la batalla de Las Termópilas, y el aniquilamiento del ejército de Esparta.
Hace no relativamente mucho tiempo vimos también una de Roben Rossen sobre una temática muy parecida, aunque anterior en el tiempo: Alejandro el Magno (1956). Me recuerda también a una muy violenta que vimos hace tiempo ya: Los 300 (Snyder, Zack, de 2006), una especie de dibujos animados y realidad virtual...
Esta es buena, está bien hecha, se deja vez y no aburre...
Es la última película de Maté, que es un director muy interesante, que ya hizo, es evidente, sus mejores películas antes que esta, que es su última cinta. Tiene tres o cuatro cintas realmente maravillosas, pero esta no es una de ellas. Siendo buena no es de sus mejores películas.

§ 3.375. Un lugar llamado milagro (Robert Redford, 1988)

Segunda película dirigida por Redford, después de la absolutamente maravillosa "Gente Corriente" (1980) que verdaderamente es una ...